La decisión de dónde se sentarán los diputados en el hemiciclo del Congreso ha provocado una nueva bronca. Según Patxi López y Podemos, el orden se debe a una propuesta de la vicepresidenta primera, Celia Villalobos, y el sitio adjudicado a los diputados de Podemos y las confluencias ha sido el del “gallinero”, como se conoce a las últimas filas de escaños. El PP ha negado que la idea partiera de ellos sino que la ha atribuido a un acuerdo previo entre los socialistas y Ciudadanos. Pocos minutos después, Rafael Hernando ha acusado al presidente de la Cámara de “mentir” sobre el acuerdo de la Mesa y de conocer la disposición previamente. “He escuchado las declaraciones del presidente del Congreso y quiero decir que me parecen sencillamente lamentables. No puede ser que se estrene después de la primera Junta de Portavoces mintiendo al conjunto de los ciudadanos”.
Así, una parte de los parlamentarios de Pablo Iglesias se sentarán detrás de PNV y DiL (Democràcia i Llibertat, la antigua Convergència), mientras que el resto tendrán delante a los socialistas y a ERC. Muy enfadado, Iñigo Errejón lo ha calificado de “fraude” y de hecho “vergonzante porque ha llegado una propuesta cerrada a la Mesa y no estaba ni en el orden del día”. “Mandan a cinco millones de votantes al gallinero”, ha asegurado el portavoz de Podemos.
La vicepresidenta segunda de la Mesa, Micaela Navarro, ha apoyado la propuesta de Villalobos, mientras que el presidente de la Cámara, Patxi López, era partidario de haber negociado otra disposición que lograra un mayor consenso. Podemos tiene previsto impugnar la decisión y proponer otro orden “que refleje qué tipo de correlación de fuerzas fue la que votaron los españoles”.
“Conozco esta casa y esto no se aprueba sin que el PSOE esté de acuerdo”, ha asegurado José Luis Ayllón, secretario de Estado de Relaciones con las Cortes en funciones, informa Gonzalo Cortizo.