El Partido Popular ha lanzado este jueves toda su artillería contra Vox, de quien depende hoy mismo la investidura del popular Fernando López Miras como presidente de la Región de Murcia, y con quien negocian también su apoyo para una futura investidura de la madrileña Isabel Díaz Ayuso.
En un carrusel de entrevistas –tres en menos de una hora, en TVE, la Cadena Ser y Antena 3– el vicesecretario de Organización del PP, Javier Maroto, ha cargado con dureza contra la formación de Santiago Abascal, un partido que, ha dicho, “ha llegado a la política para pedir cargos”. Maroto ha criticado “ese lenguaje tan vulgar, de descalificaciones” empleado ayer por Vox en un tuit contra Ciudadanos, algo que “abochorna a todos pero especialmente a los votantes de esos partidos”.
“Pero lo que realmente abochorna es que Vox vote con Podemos y el PSOE para que no haya un Gobierno de centro derecha”, ha asegurado, haciendo alusión a la primera votación de la investidura de López Miras del martes, en la que la extrema derecha votó en contra.
“Si no cambian lo que hará Vox es votar con PSOE y Podemos y habrá un Gobierno de izquierdas. No puede pasar a la historia como el partido que facilita los gobiernos de PSOE y Podemos evitando que gobierne el centro derecha”, ha considerado.
Preguntado por las exigencias de Vox, que pide retrocesos en las leyes sobre los derechos LGTBI, Maroto ha sostenido que el PP “durante las dos últimas décadas” ha “avanzado”. “Tener una orientación sexual distinta es como ser blanco o negro, mujer u hombre, de izquierdas o de derechas, es un rasgo más y punto”, ha zanjado. “Nuestro compromiso con la igualdad de todas las personas es inequívoco. La orientación sexual de las personas no es una pieza que permita jugar en un juego de cromos”.
A Maroto le ha respondido a través de Twitter el propio líder de Vox, Santiago Abascal. “Vox no facilitará nunca los gobiernos de la izquierda frentepopulista. Esta es la gran verdad olvidada o escondida por quienes pretenden chantajearnos desde las portavocías y los medios acólitos de la derechita cobarde y la veleta naranja”, sostiene el líder de la formación de extrema derecha.
“La actitud de Cs es una mezcla de la que durante años han mantenido los nacionalistas (el chantaje) y la que mantiene la izquierda (el ”cordón sanitario“). Y no vamos a convertirnos en sus cómplices para estigmatizar y humillar a nuestros propios votantes”, afirmaba.
“Pero la actitud del PP es incluso peor. Al no denunciar el chantaje de Cs, y mantener una posición de equidistancia entre los chantajistas y los que deseamos llegar a acuerdos, está anteponiendo el cálculo electoral al bien común. y a eso hay que sumarle que en el PP se enorgullecen de haber hecho trampas a Vox en los ayuntamientos y de incumplir sus acuerdos, cuando en realidad han hecho trampas y engañado (una vez más) a sus propios electores”.