Mariano Rajoy quiere cambiar las reglas del juego electoral e impedir en el futuro que los pactos entre varias formaciones impidan que gobierne la lista más votada. Así lo ha anunciado este lunes el responsable de organización del PP, Fernando Martínez-Maillo en la rueda de prensa posterior al Comité de Dirección.
La propuesta del PP tiene tres ámbitos de aplicación: elecciones locales, autonómicas y generales. Maillo ha aclarado que los cambios no afectarían a las próximas elecciones generales, pero abre la mano a dejar los cambios hechos antes de cerrar la legislatura.
Con la propuesta del PP, la lista que tenga más del 35% de los votos se haría con el Gobierno de los ayuntamientos de manera automática sin dar posibilidad a que acuerdos entre otras formaciones permita la formación de Gobiernos sin la participación de quien haya recibido más votos. Con su plan, los de Rajoy quieren dejar atado el tablero de juego para las próximas elecciones municipales y evitar el escenario que el 24M ha permitido gobiernos como el de Manuela Carmena en Madrid o Joan Ribó en Valencia. En caso de que nadie obtenga esa cifra del 35%, el PP apuesta por la celebración de elecciones en segunda vuelta en donde quien más votos obtenga vea allanado su camino a los gobiernos.
La mayoría absoluta de Rajoy le permitiría impulsar los cambios para elecciones municipales y generales. En el caso de las autonómicas, la idea de los populares obligaría a la reforma de muchos estatutos de autonomía, algo fuera del control de los conservadores en este momento.
El Partido Popular está dispuesto a impulsar los cambios en solitario y advierte que “si alguien se muestra contrario a una propuesta sensata tendrá que explicarlo a los ciudadanos”. Los de Rajoy dejan fuera del debate a Podemos y a Ciudadanos. Martínez-Maillo aclara en este punto que “el debate tiene que estar en el ámbito parlamentario”, en donde ninguna de las dos formaciones emergentes tiene representación por el momento.