“Hay millones de españoles que son de UPyD y no lo saben”. Con esa convicción se expresa su líder, Rosa Díez, quien no tiene ninguna duda de la ascensión de su partido en próximas elecciones y de que va a tener “mucha capacidad” para condicionar la política nacional “más bien pronto que tarde”.
Rosa Díez, en una entrevista, repasa la actualidad política nacional y llega a la conclusión de que hay una crisis “de las viejas instituciones, entre los que están los viejos partidos políticos”, lo que le permite certificar el hundimiento del bipartidismo en España.
Díez aclara que no tiene preferencias a la hora de pactar en el futuro y recuerda que en estos años UPyD ha colaborado en el Parlamento “con unos o con otros” siempre en función de ideas que les parecen importantes y justas.
“No nos preocupan las siglas de los partidos políticos, nos preocupa la política”, zanja, y sentencia: “En estos casos la pareja de baile es lo menos importante. Lo que importa es la música, y la música en este caso es la política y la regeneración democrática”.
Apoyada en las diferentes encuestas que se vienen publicando, Díez tiene la certeza de que UPyD va a seguir escalando posiciones más allá de sus actuales cinco diputados hasta el punto de convertirse en un partido determinante en la vida política.
Y es que, según apunta, “el bipartidismo se hunde en España”, pero “afortunadamente” hay partidos como UPyD “dispuestos a dar una respuesta desde dentro de las instituciones, no al margen o frente a ellas”.
A estas alturas, dice, resulta “obvio para todo el mundo” que los responsables de la crisis económica y política son quienes han gobernado históricamente en España.
Una “crisis de las viejas instituciones”, entre las que sitúa a los “viejos partidos”, patronales, sindicatos... que fueron fundamentales para construir la democracia pero que desde hace tiempo ya no responden a una sociedad mucho más exigente, crítica, evolucionada y abierta.
El escollo de UPyD: la ley electoral
Hace ya cinco años que en UPyD mantienen esa tesis y pensaron que “hacía falta crear en España un partido inequívocamente nacional, transversal progresista, laico, que respondiera a la sociedad del siglo XXI”. “Lo hicimos hace cinco años, menos mal, porque si no lo tendríamos que estar haciendo ahora”, bromea Díez.
A su juicio, el nicho de votantes potenciales de UPyD es de “millones” de personas, todas aquellas (hasta un 80% según el CIS) que se puntúan a sí mismas en una horquilla de entre el 4,5 y el 6, cuando son preguntadas si se consideran de derechas o de izquierdas, y que colocan en el mismo baremo a su partido.
“Son preguntas que se hacen separadas, pero cuando las juntas... Yo creo que hay millones de españoles que son de UPyD y no lo saben”, argumenta.
El único obstáculo que ve para el despegue definitivo de UPyD es una ley electoral que está pensada para bendecir el bipartidismo y que “perjudica notablemente” a los partidos que no son PP, PSOE o nacionalistas.
Mientras llegan las elecciones UPyD se prepara ya para su segundo congreso, en el que Rosa Díez tiene la intención de presentar su candidatura para seguir al frente de la organización.
Afronta ese reto “con mucha responsabilidad”, confiesa, desde la perspectiva de que si el primer congreso era más bien “de autoafirmación”, en el del próximo otoño les estarán “mirando” millones de personas a ver qué deciden y cómo lo hacen.
“No veo brotes verdes por ninguna parte”
Díez ha pedido al Gobierno que no lance “las campanas al vuelo” sobre la mejora de la situación económica y advierte: “Yo no veo los brotes verdes por ninguna parte. Observo que se secan menos ramas, pero se siguen secando ramas y no florece nada”.
Además, alerta de que los seis millones de desempleados “que lo están pasando mal” y que apenas pueden pagar lo básico se pueden sentir “burlados” por un Gobierno que asegura que las cosas ya van “estupendamente”.
Para la líder de UPyD, las cifras del PIB, que apuntan a un frenazo de la recesión económica, no indican necesariamente que se haya iniciado la recuperación porque, a su juicio, “llegará el momento en el que ya no decreces nada porque te has muerto”.
Díez, que hace un año era una firme defensora del rescate de la economía española, subraya que nadie puede decir si ahora España estaría mejor o peor si hubiera sido rescatada.
“Lo que sé es que estamos muy mal, no porque haya llegado un cataclismo sino como consecuencia de las políticas que hace este Gobierno”, ha afirmado Díez, que recuerda que España ha sido rescatada “financieramente” aunque no haya sido un “rescate completo”.