El juez Ruz admite a trámite la querella contra Rosell por el fichaje de Neymar
El juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz ha admitido a trámite la querella presentada contra el presidente del Fútbol Club Barcelona, Sandro Rosell, por un delito de apropiación indebida en su modalidad de distracción en el fichaje del jugador brasileño Neymar Dos Santos, al entender que existen indicios de que se produjo “una simulación de contratos”.
En un auto dictado este miércoles, el juez Ruz explica que de la documentación aportada por los querellantes “se desprenden elementos suficientes para investigar los hechos”, como había pedido la Fiscalía, “a fin de despejar los extremos relativos al fichaje del jugador brasileño”, así como “la apariencia o no de posibles irregularidades con relevancia jurídico-penal”.
Ruz también señala que los documentos aportadas por la plataforma opositora 'Consulta Barça', podrían apuntar a “una simulación contractual presuntamente llevada a cabo entre los firmantes de los acuerdos que pudiera evidenciar una falta de correspondencia entre la causa y finalidad real de los compromisos y obligaciones económicas en aquellos documentados con el título nominal y apariencia formal de los contratos suscritos”.
El juez, que rechaza la personación del Barça en la causa porque no ha acreditado suficientemente su condición de perjudicado, no ve “por el momento urgencia o necesidad” de llamar a declarar a Rosell hasta que no se practiquen las diligencias que se encuentran pendientes.
En este sentido, tal y como pidió el fiscal José Perals, el juez pide a la FIFA que aporte la documentación que guarda en sus archivos relativa al fichaje de Neymar, pide al jugador que remita el contrato con la sociedad Neymar&Neymar (N&N), que gestiona su padre, por el que cedía sus derechos económicos futuros y cursa una comisión rogatoria a Brasil para que se aporten los contratos de trabajo y traspaso del jugador.
Además, pide al Barcelona que aporte los contratos que sustentan el pago de 7,9 millones de euros por los derechos de tres jugadores juveniles del Santos así como los contratos por los que se produjo un pago de 9 millones por que el club culé jugara dos partidos amistosos contra el club brasileño.