El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha asegurado este martes, durante su comparecencia en el Senado, que el “mecanismo ibérico” que desligó la electricidad del precio del gas ha supuesto “en poco más de tres meses” un ahorro de 2.000 millones de euros “para familias y empresas”. “Sin esta excepción ibérica hoy los hogares y las empresas estarían pagando 2.000 millones de euros más”, ha explicado. Por ello, ha pedido al PP de Alberto Núñez Feijóo, que fue quien pidió el Pleno de este martes, que “deje de hacer el ridículo” y que “no llame timo ibérico” a la “defensa de la ciudadanía”.
Durante su discurso, Sánchez ha anunciado, además, la aprobación de una “excepción para las instalaciones de cogeneración para las industrias con gran consumo de gas para que de manera temporal queden cubiertas por el mecanismo ibérico”. “Se trata de una medida excepcional para tiempos excepcionales que ha sido solicitada por la propia industria y que va a beneficiar a sectores que representan el 20% del PIB y que son claves para muchos territorios”, ha recordado el jefe del Ejecutivo. Asimismo, el Gobierno prepara una “propuesta integral de reforma del mercado eléctrico” que se presentará “en las próximas semanas”.
Todo ello responde a un gran objetivo del Gobierno: que la crisis no la paguen las clases medias trabajadoras y que, con ella, no se enriquezcan las grandes empresas, como sucedió durante el hundimiento económico de 2008. “Nos desviviremos para evitar que los impactos sociales se cronifiquen en el tiempo”, ha asegurado Sánchez. “Haremos todo lo que esté en nuestra mano para evitar que se repita la salida neoliberal de la crisis anterior”, ha dicho, porque “en España existe una democracia en la que prevalece la voluntad popular, prevalece el voto, que se expresa en el Congreso y en el Senado y no en unos pocos restaurantes”.
Sánchez, con todo, ha negado que este invierno el Ejecutivo vaya a adoptar “medidas dramáticas” en materia energética. “No va a haber apagones de electricidad ni racionamiento de bombonas de butano, ni ninguna de esas escenas apocalípticas que evocan en muchas ocasiones la bancada de la derecha y la ultraderecha, junto con los medios de comunicación”, ha señalado. “Los ciudadanos pueden estar tranquilos”, ha concluido.
En el corto plazo, el Gobierno planteará “cambiar un poco algunos hábitos de vida”. “Lo haremos para defender nuestro modelo de vida”, ha dicho Sánchez. Serán, en todo caso, “recomendaciones que van a ayudar a reducir la factura energética”. “Nuestra prioridad va a ser atajar el derroche”, ha añadido, sin cerrar la puerta a “medidas adicionales y temporales en algunas industrias”, que el Gobierno tratará “que sean temporales y compensarlas desde la fuerza del Estado”. “No se trata de hacer grandes sacrificios sino de adaptar nuestro modelo de vida. Los españoles lo van a entender. España es el país más solidario de la UE”, ha remarcado.
Respecto a lo que ocurrirá en los próximos meses, Sánchez ha reconocido que el Gobierno trabaja con “distintos escenarios”. “Es posible que Putin y Rusia, que dependen del gas para pagar la factura de la guerra, mantengan un volumen de exportación con cortes para generar miedo e incertidumbre. También es posible que Putin ordene a Gazprom reducir aún más ese flujo o que directamente cierre el grifo del todo con el objetivo de doblegar a Europa, para obligarnos a dejar de apoyar a Ucrania”, ha señalado el presidente del Gobierno.
“No sabemos qué va a pasar. No podemos descifrar esa incógnita. No podemos leer la incertidumbre. Lo que estamos haciendo es prepararnos para lo peor y lo peor es el corte total del gas”, ha dicho. Por parte de España, se está tratando de “asegurar las importaciones” que llegan de otras partes del mundo, así como “acelerar las energías propias, renovables y otras fuentes”, así como “reduciendo” el consumo “con políticas de ahorro y de eficiencia”. “Putin puede doblegar a Ucrania, o a otro país en solitario. ”Pero lo que tenemos claro es que no tiene ninguna posibilidad de doblegar a una Europa unida“, ha apuntado.
Entre aplausos de todos los ministros del Ejecutivo y de las bancadas de PSOE y Unidas Podemos, Sánchez ha apelado una y otra vez a la solidaridad europea para asegurar el suministro energético a todos los países de la UE. “Debemos auxiliar a nuestros hermanos europeos por solidaridad y europeísmo. Pero también por interés estratégico, porque su futuro económico también afecta a nuestro futuro económico”, ha añadido el jefe del Ejecutivo.
Un escenario “muy volátil”
En cuanto a la inflación, Sánchez también ha asegurado de que el futuro está “plagado de incertidumbres”. “Todo va a depender de cuestiones que escapan al control del Gobierno”, ha proseguido, citando, por ejemplo, “cuánto va a durar la guerra, o si Putin va a decidir cortar el gas”. Pero, a su juicio, los cálculos de los principales organismos internacionales “invitan a un optimismo moderado” y “que la inflación va a ir cayendo”, acabando este año al 8% y situándose en el 3% en 2023. El presidente, no obstante, ha reconocido que el escenario es “muy volátil y estas previsiones se han equivocado antes y han tenido que actualizarse”.
Por eso, desde una “posición de la prudencia”, Sánchez ha asegurado que el Gobierno va a hacer “todo lo que esté en su mano y más para doblegar la curva de la inflación y proteger a las clases medias trabajadoras”. Mientras sea presidente, todos los recursos del Estado estarán al servicio de la ciudadanía“, ha remarcado.
Tras la intervención de Feijóo, Sánchez ha utilizado su turno de réplica para acusar al máximo jefe de la oposición de “meter miedo a los españoles” y de no aportar “ninguna solución” ante la crisis energética en su intervención ante la Cámara Alta. Es más, Sánchez ha acusado a Feijóo de utilizar la pandemia o las consecuencias económicas de la guerra de Ucrania para “socavar” al Ejecutivo.
No obstante, aunque el presidente del Gobierno ha asegurado no ser “partidario de gobiernos de concentración porque es una fórmula peligrosa, anula la dialéctica, y empuja el descontento fuera de los límites del sistema”, ha reclamado un “diálogo fluido entre Gobierno y oposición”. En este punto, ha recordado que el PSOE, estando en la oposición, pactó con el PP distintas iniciativas. “En 45 años de democracia, el PSOE no ha incumplido nunca sus obligaciones constitucionales de renovar las instituciones constitucionales”, ha recordado el jefe del Ejecutivo, instando así a Feijóo a desbloquear la renovación del Poder Judicial, bloqueada por el PP desde 2018.
Sánchez a Feijóo: “¿Es insolvencia o es mala fe?”
A continuación, Sánchez ha pasado al ataque, al asegurar que “la mayoría de las propuestas” de Feijóo “carecen de un rigor técnico”. “Usted se presenta como un gran gestor porque ha estado trece años al frente de la Xunta. Pero los meses han pasado y las cosas que dice no avalan esa imagen de buen gestor que usted dice tener de los últimos trece años”, le ha dicho al líder del PP. El jefe del Ejecutivo ha dedicado entonces su discurso a “poner algunos ejemplos”.
“En marzo dijo usted que el gobierno de España se estaba forrando. El grueso de lo recaudado va a las comunidades autónomas, algo que debería saber. ¿Esa acusación es insolvencia o es mala fe?”, se ha preguntado Sánchez, en una fórmula que ha repetido, a renglón seguido, una decena de veces. “En abril propuso crear una deducción en el IRPF para la eficiencia energética, una deducción ya creada desde octubre. ¿Es insolvencia o mala fe? También en abril dijo que en Galicia en lo rural no se pagan impuestos, una falta de respeto. Queda claro que en materia de impuestos su conocimiento es justito”, ha ironizado.
“Si usted quiere bajar los impuestos nos tiene que decir qué servicios públicos quiere recortar como hizo usted cuando estaba en Galicia. Es una gran mentira que el PP baje los impuestos cuando gobierna. No es que no los bajen, es que se los suben a las clases medias”, le ha dicho Sánchez a Feijóo, para seguir: “En agosto volvió a la carga y dijo que España se asomaba a la recesión. Es un escenario que descarta FUNCAS. ¿Es insolvencia o es mala fe? Yo creo que hay un poco de las dos. Su acusación de que este Gobierno está metiendo un pufo a los españoles, ¿es insolvencia o mala fe?”, ha insistido.
“Dijo que el Gobierno no podía subir las pensiones porque incumplía la regla de gasto, debería saber que las pensiones no entran en la regla de gasto”, ha añadido. Y también le ha recordado a Feijóo “que hay gobiernos conservadores aplicando impuestos a las grandes energéticas”. “¿Es una prueba más de insolvencia o de mala fe?”, se ha preguntado, además de considerar “sorprendente escucharle decir que el gobierno compra votos con cheques y en la misma entrevista ofrecer 200 euros de cheques”.
“Va a fracasar como Casado”
Sánchez ha pedido al líder del PP que se rodee de “buenos asesores” porque “propone volver hacia atrás en la política energética” y el Gobierno “no va a dar un paso atrás”. “Ustedes votan contra el sentido común y ustedes insultan. Usted en la misma frase insulta y critica en la misma frase al Gobierno de España por insultar”, ha asegurado el presidente del Gobierno. “Sí, a lo mejor usted piensa que llamarme El otoño del patriarca no es insultar”, ha añadido, entre un considerable barullo, aludiendo a esa cita pronunciada por Feijóo ayer mismo. “Descalificar a su adversario político como usted hizo ayer es un auténtico disparate. ¿Es insolvencia cultural o mala fe?”, ha remachado.
Finalmente, el presidente del Gobierno ha considerado que si Gobierno y PP no pactan es porque los populares “no quieren pactar con el PSOE ni con el Gobierno de coalición”. “Desde que defenestraron al señor Casado ha repetido una y otra vez que le interesa el bien de España y que tiende la mano al gobierno. Pero veamos los hechos”, ha añadido Sánchez.
“Yo en su visita a la Moncloa le ofrecí once acuerdos de sentido común: cumplir con la Constitución para renovar el CGPJ, volver al pacto antitransfuguismo, reformar el artículo 49 de la Constitución, pactos de consensos básicos fundamentales. Y usted ha votado en contra de prácticamente todas las leyes del Gobierno. Usted ha votado en contra de una ley que vela por la seguridad de las mujeres, han votado en contra de un decreto para ahorrar energía en contra de lo que pedían los aliados europeos, planes que han copiado otros gobiernos y que ha aplaudido la Comisión Europea. Ustedes han votado en contra de aumentar las becas o de bonificar el transporte. Usted lo ha hecho por debilitar al gobierno de España sin preocuparse por los problemas que tiene la gente. Usted va a fracasar como fracasó el señor Casado”, ha zanjado.
El presidente del Gobierno ha llegado a plantear que Alberto Núñez Feijóo solo vela por los intereses de las grandes empresas energéticas que, a su juicio, fueron las que le situaron al frente de los populares. “Puede que usted actúe con insolvencia o mala fe, lo que está claro es que usted no olvida quién le puso ahí: las grandes empresas y energéticas de este país”, ha dicho al final de su segunda intervención.
En la respuesta, el líder de la oposición ha arremetido contra el jefe del Ejecutivo: “Decir que a mí me han puesto las empresas es un insulto a la democracia española y a los militantes del PP. Es lamentable, señor Sánchez. Para esto se podía haber quedado en su despacho, yo venía a un debate sereno y lamento que usted haya elegido la estrategia de la descalificación”, ha lamentado.