“La ruptura de la disciplina de voto sería un problema, pero entiendo que Pedro Sánchez votara no”
Sara Hernández (Madrid, 1976) es una de las dirigentes territoriales del PSOE que sigue manteniendo el no al PP. Apuesta por una consulta a la militancia porque considera que la abstención puede ser una cuestión trascendental para el futuro del partido. Asegura que nadie de la gestora le ha hablado de la 'operación Gabilondo' como candidato a unas hipotéticas terceras elecciones si el rechazo a Mariano Rajoy se impone en el Comité Federal que se celebrará previsiblemente el domingo. Evita dar su opinión al respecto de que el portavoz en la Asamblea se vaya.
¿Abstención o terceras elecciones?
No rotundo al PP, porque el proyecto del PSOE es totalmente contrapuesto. Abogo como secretaria general en Madrid por plantear una alternativa clara al PP que por supuesto viene de la mano del PSOE.
¿Se puede plantear una alternativa sin secretario general?
El PSOE tiene historia, proyecto y sobre todo ilusiones de muchos compañeros para presentar alternativa. Evidentemente, la situación actual no es la más favorable para el PSOE, pero somos un partido que siempre nos hemos crecido ante las adversidades. Y vuelvo a decir: tenemos muchos hombres y mujeres que construyen cada día una verdadera alternativa de derechos y dignidad.
Pero entiendo que esa alternativa tendría que ser ya de cara a unas terceras elecciones porque ahora no da tiempo.
La situación que tiene ahora el PSOE no es la más propensa. Antes del 1 de octubre, sí se planteaba esa alternativa de un gobierno de cambio. Me gustaría que hoy se estuviera hablando de esa posibilidad de una alternativa al PP en vez de hablar de divisiones internas, hablar de por qué hay partidos que se presentaron a las elecciones con el emblema del cambio y se ponen vetos mutuamente impidiéndolo, sería enriquecedor hablar de por qué en marzo habiendo una alternativa real algunos partidos votaron que no... Posibilidades existen, pero hay que tener voluntad. El PSOE siempre ha mostrado esa voluntad.
¿Tiene que ser Pedro Sánchez esa alternativa?
No voy a pronunciarme sobre nombres. Ahora tenemos una dirección, una gestora, que yo ayudé a conformar, pero las formas y todo lo que ocurrió en el Comité Federal del 1 de octubre no me gustaron, yo era partidaria de las tesis del anterior secretario general. Ahora el camino que abra el PSOE es un capítulo que tendremos que escribir entre todos y pido que, a la mayor inmediatez, con urgencia incluso, se convoque un congreso extraordinario que clarifique el liderazgo y el proyecto político.
¿Es Pedro Sánchez pasado?
No, no, en absoluto. Aquí nadie es pasado. Ningún compañero es pasado, todos podemos aportar, aquí no sobra nadie.
Pero después de dimitir, ¿se puede volver a liderar el PSOE?
Como posibilidad estatutaria, por supuesto que sí. Pero en cualquier caso no son preguntas que yo deba responder, debe responder el interesado o cualquier otro compañero que en ese congreso federal, que debe convocarse lo antes posible, quiera presentarse.
¿Es la abstención un suicidio para el PSOE?
Yo no estoy de acuerdo con la abstención. Desde Madrid apostamos de una manera clara, con una postura muy inflexible, que avalar un gobierno del PP no es lo más positivo, ya no solo para el PSOE sino para el conjunto de la sociedad. No podemos olvidar que el PP, para el que algunos quieren ahora la abstención, es el partido del Power Point donde enseñaba a sus cargos públicos a burlar la ley de financiación, es el partido de la Gürtel, de la Púnica... Con ese PP, el PSOE no tiene que tener absolutamente nada que ver. Pero no solo lo creo yo, lo cree el partido porque a día de hoy sigue estando vigente la resolución de diciembre de 2015 en la que todos dijimos de manera unánime que no al PP. Esas circunstancias no cambian.
¿Y si hay una mayoría favorable a la abstención?
Se provocará la abstención, el PSOE dirá su opinión dentro de los órganos internos y, a partir de ahí, seguirá trabajando para que de esta situación de crisis podamos salir más fortalecidos y con ilusión de futuro.
¿Se puede salir fortalecido de una división absoluta y de permitir gobernar al PP?
Quiero pensar que sí, pero estoy en el punto anterior. Sigo manteniendo mi no al PP, el Comité Federal ya dijo que no y de una manera abrumadora las bases están diciendo que no. Vamos a esperar a ese debate porque a lo mejor no se da la abstención.
Luego vamos a la posibilidad de que gane el no, pero antes: ¿cree que todos los miembros de su dirección van a defender el no como usted?
La postura hasta ahora siempre ha sido mayoritaria.
Pero no hubo unanimidad. Por ejemplo, Ángeles Álvarez se abstuvo de votar en el último Comité Federal, pese a que la Ejecutiva madrileña, de la que forma parte, decía que había que apoyar a Pedro Sánchez. ¿Cómo se maneja una división dentro de la propia dirección?
Se quiere hablar de división cuando realmente no la hay. Hay compañeros que tienen posturas coincidentes en algunos casos y en otros no coincidentes. En esta situación, de forma amplísima, la dirección de Madrid trabaja en la misma dirección.
¿Animaría a los diputados por Madrid a que rompieran la disciplina de voto en caso de que ganara la abstención?
La ruptura de la disciplina de voto no me parece la mejor solución. Por eso abogo por un debate sosegado y de lo que resulte, que espero que sea un no claro al PP y no tener miedo a unas terceras elecciones, mandatarlo al Congreso. No creo que un problema se tenga que resolver creando otro problema y la ruptura de la disciplina de voto lo sería, pero entiendo que Pedro Sánchez, como exsecretario general, mantuviera el no.
¿Entendería que Pedro Sánchez mantuviera el no, diga lo que diga el Comité Federal?
Entiendo que Pedro Sánchez, por evidentes razones, porque ha hecho de su gestión un camino de ruta basado en el no, entiendo que existen circunstancias especiales, peculiares. Mi opinión es que la única excepción que contemplaría sería esa.
¿Y Antonio Hernando? ¿Qué le parece que tuviera que defender la abstención?
Es el portavoz en el Congreso y tiene, como todos, que defender lo que dicen los órganos del partido.
¿Usted también lo hará?
Evidentemente. Dentro de mi partido y así se lo he dicho a Javier Fernández, me mantendré dura e inflexible en esa posición y si los órganos de mi partido decidieran otra cosa, al día siguiente, yo seguiría trabajando para que el partido estuviera en las mejores condiciones.
¿Le ha parecido laxa la posición de la nueva dirección del PSOE con la corrupción del PP?
La mía la tengo clara: las declaraciones en el juicio de la Gürtel me reafirman en el no. Lo digo yo, pero es que lo dicen los militantes. Te para la gente por la calle y te dice: “Por favor, arregladlo, que no siga gobernando el PP”. Es es que es el PP que ha hecho de la corrupción una forma de gobierno. A partir de ahí, no entiendo que mi partido tenga algo que ver con esto.
Además, no es solo la investidura, sino que el gobierno que naciera de ella estaría muy debilitado y si sigue por esta senda va a presentar un proyecto de presupuestos nada favorable a la ciudadanía, porque el PP no va a cambiar y va a seguir haciendo políticas de derechas, y el PSOE tendrá que decir que no. Entonces podemos estar hablando de otras elecciones dentro de muy pocos meses.
¿En unas terceras elecciones le iría mejor al PSOE?
El PSOE nunca teme unas elecciones. Siempre tiene ganas de explicar su proyecto. Hace poco, me decía una vecina que en este país hemos estado 40 años sin votar. No hay que tenerle miedo a votar otra vez.
Sacaron 90 diputados, 85... ¿Pueden seguir bajando?
O subiendo. Estábamos viendo que el partido ganaba nuevamente en credibilidad con la postura clara del no a Rajoy en la investidura de finales de agosto. La coherencia es fundamental para conseguir la credibilidad. A lo mejor unas terceras elecciones supondrían un incremento basado en esa coherencia y esa credibilidad.
¿Es Ángel Gabilondo un buen candidato para la presidencia del Gobierno?
Gabilondo es una persona de excelente prestigio y nivel intelectual como para aportar todo lo que pueda a este partido, como lo está haciendo magníficamente en la Asamblea de Madrid.
O sea que podría encabezar una candidatura para unas terceras elecciones.
No tengo noticias de que se pueda estar barajando esa posibilidad y a mí los interesados no me lo han trasladado. Por tanto, no me puedo pronunciar sobre eso. Lo que sé es que está haciendo una magnifica labor en la Asamblea de Madrid y está aportando muchísimo a este partido. El resultado es que estuvimos a las puertas de conseguir el cambio en la Puerta del Sol.
Por eso, ¿podría trasladarse al Gobierno de España?
Cuando se dé la circunstancia... Pero no me gusta hablar de conjeturas.
¿Cuál sería su candidato perfecto?
Cualquier socialista claramente de izquierdas siempre va a representarme perfectamente.
¿Susana Díaz?
Cualquier compañero. Susana Díaz es una excelente compañera, como lo es Pedro Sánchez, como lo fue en su día Rubalcaba y lo fue Zapatero y también nuevos compañeros que ahora mismo se están afiliando bien a las juventudes o bien al partido.
¿Da tiempo a hacer primarias? ¿Cree que la candidatura debería ser por primarias?
Está en los estatutos y no contemplo otra cosa que la aplicación estricta de los estatutos. Ya que el PSOE es el pionero en democracia interna no contemplo ninguna posibilidad de retroceder en ese aspecto y si alguien la está pensando, que yo creo que no, por supuesto mi más absoluta negativa.
Un independiente como Gabilondo no se puede presentar a unas primarias.
Si sucede, ya veremos.
Tampoco aparece en los estatutos la posibilidad de consultar a la militancia, pero hay quien aboga por una consulta sobre la abstención. ¿Está de acuerdo?
Estoy completamente de acuerdo porque lo que estamos decidiendo es un aspecto fundamental, un posicionamiento de apoyar o permitir o no un gobierno del PP y no de cualquier PP, del que dirige Rajoy. Es una decisión de tanto calado político que sin duda alguna tiene efectos muy importantes en el futuro de nuestra organización por lo que tiene que debatirse de manera profunda. En el PSOE somos aproximadamente 180.000 compañeros y compañeras, en el Comité Federal somos 300. Una decisión tan importante tiene que incluir la posición del mayor número de personas posible. No hay que tener miedo a las votaciones, a la pluralidad, a decir nuestras opiniones. Algo tan importante sí tiene que ser consultado a la militancia porque es una decisión trascendental que podría cambiar el futuro del PSOE.
¿Y entrar en el gobierno de Manuel Carmena tienen que decidirlo los militantes?
Entrar en el gobierno de Carmena es una decisión en su día debatida, que no está encima de la mesa. Se escuchó a todos los secretarios generales que llevaban la voz de sus agrupaciones en una reunión, dieron su opinión y esa opinión se ha trasladado a través de un apoyo responsable, pero una oposición muy crítica. Si se diera, que ahora mismo no está y sospecho que no va a estar en un futuro próximo, la posibilidad de entrar en el Ayuntamiento de Madrid, ya veríamos en el futuro la mejor opción.
Pero no está sobre la mesa.
No está en ninguno de los casos encima de la mesa entrar en el Gobierno de Madrid. Ni nos preocupa ni nos ocupa. El Grupo Municipal está haciendo una magnífica labor en la que estamos trasladando al gobierno de Madrid que hay cosas en las que apoyamos y somos responsables con esos deseos de cambio que se dieron en la ciudad de Madrid, pero también les decimos que el cambio tiene que cuajar y hay muchos aspectos importantes en los que no notamos cambio en Carmena con respecto a lo que se hacía con los gobiernos del PP y en esa línea seguiremos empujando. El buen trabajo del grupo socialista se demuestra en que elección tras elección ha aumentado en número de votos.
Y respecto a la renovación del liderazgo en Madrid, ya ha dicho que se presentará. ¿Por qué ahora?
Es de lealtad decir a mis compañeros las intenciones que tiene su secretaria general. Lo hice en un momento en que no interfería en ningún asunto nacional, ya había sido el debate de investidura, el del estado de la región en Madrid, y en ese momento quería participarlo a mis compañeros. Lo quería hacer antes, pero dada la situación en la que está el partido aún con más ganas si cabe.
¿Buscaba aplacar el ruido que hay sobre otros posibles candidatos?
No. ¿Se ha aplacado el ruido?
¿Cree que Manuel Robles o David Lucas se van a presentar?
Lo desconozco. A mí me han dicho lo contrario. Ambos me han trasladado, y también lo han hecho de manera pública, el apoyo a esta dirección de la que forman parte. No hay ningún problema en que se presenten compañeros o compañeras. Yo soy secretaria general gracias a la confrontación democrática de proyectos políticos. Quien quiera hacerlo, adelante, todo mi apoyo y a partir de ahí todo mi apoyo para que en 2019 sea la fecha definitiva para que haya un socialista en la Puerta del Sol.