El voto útil siembra dudas entre los partidarios de Patxi López
El PSOE se acerca a la recta final de la campaña de las primarias en un escenario absolutamente polarizado entre Susana Díaz y Pedro Sánchez. Patxi López se ha quedado atrás. Su distancia insalvable respecto a los otros dos candidatos –le superan en más de 80.000 apoyos entre los dos con un censo de 187.360 militantes– lastra su campaña. El voto útil siembra dudas entre los partidarios del exlehendakari.
En la candidatura del diputado vasco reconocen que algunos dirigentes territoriales hicieron una lectura distinta a la del núcleo duro tras el resultado de los avales. Mientras que algunos de sus partidarios consideraron necesario abrir una “reflexión” sobre la continuidad del proyecto, López y su equipo más próximo decidieron seguir adelante.
“Si el resultado hubiera sido 10.000-30.000 –señala un diputado que apostó por la 'tercera vía' para evitar el ”choque de trenes“– lo entendería, pero con estos números no tiene sentido. No tiene ninguna posibilidad de ganar”. “Del Real Madrid, la Juventus o el Atlético podíamos tener dudas de qué iba a pasar, pero lo que todo el mundo tenía claro es que el Mónaco no iba a pasar”, expresa esa misma fuente poniendo como ejemplo la Liga de Campeones. “Tenía claro que debía haber una alternativa, pero está claro que la militancia no lo ha comprado”, agrega otro parlamentario.
Públicamente todos mantienen un perfil bajo y evitan pronunciarse. “En este momento no se puede hacer público un giro porque la otra parte no te va a querer”, dice un socialista. Otra fuente consultada dice que hay que esperar a que pase el debate del lunes para ver si hay algún movimiento: “Será el día D”.
La presidenta balear, Francina Armengol, es una de las principales dirigentes que está en esas coordenadas y considera que ante la imposibilidad de ganar se debería haber dado un paso atrás. La murciana María González Veracruz tiene esas mismas dudas. El resultado en esas dos federaciones fue claro: Sánchez venció en avales a López, que tenía el apoyo del aparato en cada una de ellas. “Han quedado en una situación muy complicada”, coinciden varias fuentes consultadas.
En el equipo del exlehendakari también admiten que en otros territorios, como Castilla-La Mancha, algunos de los que le han avalado se irán con Sánchez el 21 de mayo. “Lo que hay es antisusanismo”, explica un dirigente del equipo. El portavoz del PSOE en Cáceres, Luis Salaya, que apoyaba al exlehendakari, admitió que “existe la posibilidad de unir fuerzas para alcanzar una victoria sólida”. El comentario en Facebook iba acompañado de una fotografía en la que Sánchez y López se abrazaban: “Nada me gustaría más que este abrazo se trasladase a estas primarias”, agregaba dos días después del emplazamiento público de Sánchez a López.
Esa oferta de sumar fuerzas, hecha en público y sin tantear antes a López, enfadó al núcleo duro del vasco, que asegura que fue una razón más para seguir adelante. López esperó a que se transmitieran oficialmente los datos de los avales para dar una rueda de prensa en la que zanjó el asunto: “Mi candidatura no se va a retirar”. Esa decisión generó cierto malestar en algunos de los dirigentes que apostaron por él porque se enteraron “por la prensa”.
El portavoz de su candidatura, Óscar López, ha negado que se estén produciendo fugas y lo ha achacado a las “intoxicaciones” que está habiendo en la campaña. Además, sostiene que cada vez reciben más apoyo.
En las otras dos candidaturas, sin embargo, están convencidos de que se producirán trasvases desde los partidarios de López. “Hay gente que se está moviendo en las dos direcciones”, dicen en el equipo de Díaz en el que destacan que sobre todo son “militantes de base de algunos territorios” más que referencias. “Son más de lo que parecen”, dice un diputado sobre los 'sanchistas' en el grupo parlamentario en el Congreso. Señalan a algunos compañeros de bancada, como Esther Peña o Pilar Lucío, a las que inicialmente fueron situadas con el exlehendakari. A ellos suman a algunos de los barones que participaron en las reuniones en las que apostaron por que Sánchez no fuera el cabeza de cartel, como Luis Tudanca o la presidenta de la gestora del PSOE gallego, Pilar Cancela, que están en un segundo plano, pero del lado del exsecretario general.
Susana Díaz, a por los desconocidos
El mensaje oficial del 'susanismo' es que la cercanía de Sánchez en los avales va a movilizar a una parte del partido que no está muy convencido con la presidenta andaluza, pero que acabará votándola para evitar la vuelta de Sánchez, al que identifican con “el fin del PSOE”. Algunos de sus partidarios están convencidos de que los del exsecretario general están más movilizados: “Les ha costado menos conseguirlo porque están muy movilizados y han ido todos”.
El equipo de Díaz cree que pueden arañar aún más votos en Andalucía –donde obtuvo el respaldo en avales de más de 26.000 personas– y que tiene margen de subida donde menos respaldo ha tenido. “En Cataluña y Euskadi si avalas a Susana, te extraditan”, señalaba esta semana uno de sus hombres de confianza. Es en esos territorios –en País Vasco solo consiguió 96 firmas– donde esperan subir, así como en Galicia y Castilla y León.
Díaz espera en esta recta final de la campaña llegar también a donde no han tenido “la presencia necesaria y los militantes no conocían el proyecto”. La andaluza está convencida de que aún se puede mover votos en su favor de quienes no la conocen.
Por el contrario, los de Sánchez consideran que los 'aparatos' de Díaz se han movilizado al máximo y que ha llegado a su “techo”. También en la candidatura de López creen que los barones que apoyan a la presidenta andaluza han “apretado” y que Sánchez podrá obtener una mayor ventaja. Entre algunos 'susanistas' también ha calado esa interpretación y empiezan a ver factible una derrota. “No supieron ver lo que había por debajo”.