Diez jueces han pasado por el tribunal de la caja B del PP antes de empezar el juicio
La magistrada o magistrado que sustituya a José Ricardo de Prada en el tribunal que juzgará la caja B del PP será el undécimo en integrar las distintas composiciones que ha tenido esa sala desde la primera que hizo pública la Audiencia Nacional hace ya más de cuatro años. Tres de ellos han sido apartados por su afinidad al Partido Popular: Concepción Espejel, Enrique López y Juan Pablo González. La recusación de De Prada fue votada este viernes por ocho votos contra siete con el argumento de que ya se ha pronunció en la sentencia de Gürtel sobre la existencia de una financación con dinero negro en la formación de Pablo Casado durante dos décadas.
La decisión de apartar a De Prada ha sido presentada como una cuestión técnica que levanta muchas suspicacias. El magistrado progresista es, junto a Julio de Diego, responsable de los pasajes de la sentencia de Gürtel que dieron por acreditada la caja B del PP y que provocaron un tsunami político que arrasó al Gobierno de Mariano Rajoy, moción de censura mediante.
De Prada, que nunca ha escondido su talante progresista, siempre fue objetivo del Partido Popular, artífice de la recusación que ha apartado al magistrado del tribunal de la caja junto a su extesorero Luis Bárcenas. El fallo, sin embargo, solo fue posible porque el conservador De Diego compartió tesis con De Prada en contra del presidente del tribunal, Ángel Hurtado.
Los jueces, para dar “contexto” a los intercambios de favores entre la trama de Francisco Correa y los cargos políticos, explicaban que el Partido Popular disfrutó de “una estructura financiera y contable paralela a la oficial” y que ésta existió “desde al menos el año 1989”. Una de sus finalidades era “entregar cantidades a personas miembros relevantes del partido”. La procedencia: dinero negro de los empresarios a cambio de adjudicaciones. Esas donaciones, tenían, “un marcado carácter finalista, en tanto en cuanto es una manera de pagar favores, o la contrapartida, por adjudicaciones irregulares de contratos”, recogía el fallo.
Una vez más, la composición definitiva del tribunal será de carácter conservador. A quien corresponda por reparto sustituir a De Prada se encontrará presidiendo el tribunal a María José Rodríguez Duplá y redactando el fallo a María García Fernández, ambas magistradas conservadoras nombradas por el actual Consejo General del Poder Judicial, con mayoría de miembros propuestos por el PP. Rodríguez Duplá sustituyó a Concepción Espejel al frente de la Sección Segunda cuando ésta fue ascendida a presidenta de la Sala de lo Penal pese a haber sido apartada del tribunal de Gürtel por su proximidad al PP.
El otro magistrado recusado junto a Espejel fue Enrique López, el magistrado por el que el PP y/o la mayoría conservadora de la judicatura ha hecho más esfuerzos y durante más años por situarlo en el CGPJ, el Tribunal Constitucional y la Sala de Apelaciones de la Audiencia Nacional. Ahora se desempeña como consejero de Interior, Justicia y Víctimas del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid.
El cuarto magistrado apartado del tribunal de Gürtel por no guardar la apariencia de imparcialidad respecto al PP fue Juan Pablo González, con una carrera impulsada por el Partido Popular y que, poco después de aquel varapalo, fue elegido para presidir la Audiencia de Madrid con los únicos votos del bloque conservador mayoritario en el Consejo General del Poder Judicial. Completan la nómina de magistrados que han pasado por ese tribunal Fernando Andreu y María Riera Ocáriz.