El TAD propone inhabilitar durante seis años a Pedro Rocha, que tendría que dejar la presidencia de la Federación de Fútbol

Raquel Ejerique

21 de junio de 2024 17:56 h

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Una instructora del Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) ha resuelto que el actual presidente de la Federación de Fútbol (RFEF), Pedro Rocha, debe ser inhabilitado durante seis años para desempeñar cualquier cargo federativo, según ha adelantado El Español y ha confirmado elDiario.es tras tener acceso al fallo. Si la propuesta de sanción se confirma en los próximos días supondría la salida del mandatario del fútbol, que fue visto este jueves compartiendo palco con el Rey Felipe VI en el partido de la Eurocopa, e impediría que se presentara a las próximas elecciones a la RFEF, previstas para el mes de septiembre.

Rocha, imputado en el caso que investiga la Supercopa y varios casos de corrupción dentro la Federación en la época de Rubiales, puede alegar en los próximos diez días la propuesta de resolución del TAD, que le abrió expediente en abril por una posible falta “muy grave” tras la denuncia de Miguel Ángel Galán, presidente del Centro Nacional de Formación de Entrenadores de Fútbol. ¿El motivo? Que presuntamente se excedió en las funciones encomendadas como presidente transitorio tras la dimisión de Luis Rubiales. Según el artículo 31.8 de los estatutos de la Federación, la misión del presidente de la gestora es convocar elecciones para elegir un presidente que acabe el mandato de dimisionario. Al entender que no lo hizo y tomó decisiones importantes, propuso una sanción por falta “muy grave” para él y toda la comisión gestora, que finalmente ha sido exonerada en la decisión de la instrucción. Después de su alegación, los miembros del TAD se reunirán para imponer la sanción definitiva, que casi siempre coincide con la propuesta.

La instructora insta a inhabilitarlo dos años por despedir al secretario general de Rubiales (Andreu Camps), otros dos por poner fin al contrato con el bufete de asesoramiento legal (propiedad del también imputado Tomás González Cueto) y otros dos por tomar la decisión de que la RFEF se personara precisamente en el caso de la Supercopa, por el que la jueza lo imputó también, además de al exfutbolista Gerard Piqué.

Tras el tira y afloja entre el Consejo Superior de Deportes (CSD), organismo dependiente del Gobierno, y el propio Rocha, que luchó para presidir la RFEF tras ser el único candidato que reunió los avales tras la turbulenta gestión del periodo post-Rubiales, el actual presidente consiguió tomar posesión del cargo porque el organismo gubernamental decidió no apartarle del cargo temporalmente, algo que podría haber hecho con la ley del Deporte. Eso sí, el CSD le puso una comisión de tutela, presidida por Vicente del Bosque.

La Federación no ha dado de momento su versión y ha emplazado a elDiario.es a esperar un pronunciamiento.