La fuerza más votada en las pasadas elecciones generales en la provincia de Teruel concurrirá a los próximos comicios municipales y autonómicos. Teruel Existe ha dado un paso más en su andadura política, que comenzó hace apenas dos años, y ahora quiere llegar a las instituciones “que más incidencia tienen sobre el bienestar de los ciudadanos”. “Queremos estar presentes en las Cortes de Aragón”, dice el diputado Tomás Guitarte al comienzo de una entrevista con elDiario.es, esta semana. La gente se lo pide por la calle, tal y como sucedió antes de las generales, según relata. No se postulan contra nadie, pero Guitarte reconoce que la agrupación de electores será capaz de aglutinar a una “parte del voto descontento” que de otro modo podría terminar en el saco de la extrema derecha. El parlamentario retrasó su vuelta a Teruel después de un día de trabajo en el Congreso para atender a este diario. Y, a primera hora de la tarde de una jornada sin Pleno, la planta en la que se ubica su despacho estaba desierta.
¿Por qué toman en este momento la decisión de concurrir a las próximas elecciones municipales y autonómicas?
Lo queríamos hacer con tiempo suficiente para que no nos pasara como sucedió con la presentación para las generales, cuando tomamos la decisión con muy pocos días de antelación, apenas quince días, y fue todo muy rápido, con muchas prisas. La tomamos porque nos la está pidiendo nuestro cuerpo social y mucha gente por los pueblos que quieren presentar candidaturas de agrupaciones de electores de manera alternativa y no tienen un cauce en quien apoyarse. Están pidiendo que Teruel Existe sea ese cauce para vehicular todas las ilusiones que hay en la provincia. Quieren empezar a trabajar por sus pueblos. Y no podemos no respaldar todo ese río de ilusión.
¿Incluso gente de otros partidos?
No lo sé. No lo preguntamos. En general, suele ser gente que nos ve como una alternativa a los partidos tradicionales y que habitualmente ha ido trabajando con agrupaciones de electores. No suele ser gente de otros partidos. Aunque ya se sabe que en los pueblos lo de los partidos no es muy estricto. La gente se presenta un poco con aquel que puede o con quien le ofrece apoyo.
Faltan dos años para esos comicios. ¿La idea es que Teruel Existe esté presente en todos los municipios de la provincia?
No. Decidimos presentarnos a las autonómicas y a las municipales, y lo fundamental son las autonómicas porque queremos tener presencia en las Cortes de Aragón. ¿Por qué nos interesan las autonómicas? Porque en el reparto competencial que hay actualmente en el Estado una gran parte de las competencias, se estima que en torno al 70%, son competencia de las comunidades autónomas. Entre ellas, los aspectos que más incidencia tienen sobre el bienestar de los ciudadanos, como la Educación, la Sanidad o la atención a los mayores. Son los aspectos más del día a día y nos interesa estar ahí. Lo de las municipales viene como consecuencia de eso, pero no por el interés de estar en todos los municipios. Tal y como se vota en Aragón, el apoyo a nivel municipal significa votar a la vez tres cosas: el Ayuntamiento, el Consejo Comarcal y la presidencia de la Diputación Provincial de Teruel. A lo mejor el ámbito municipal sería el que menos nos preocuparía llegar, pero sí que queremos tener presencia en las comarcas y en la Diputación Provincial.
Lo hacemos con tiempo para que podamos constituir equipos suficientes, solventes, con gente capaz para aportar cosas al Ayuntamiento. No vamos a ir a los ayuntamientos a presentarnos por presentarnos. No vamos a hacer listas por hacerlas y decir: “hemos hecho cien o doscientas”. Nos da igual hacer cinco que cincuenta. Lo que queremos es que las que hagamos sean candidaturas solventes, que vayan a aportar a su municipio.
¿Cómo será el proceso para elegir candidatos?
Es pronto. Lo único que quisimos ratificar fue que nos presentábamos. Los procesos habituales en Teruel Existe son que tú te incorporas al movimiento, vas trabajando y, cuando tocan estas cosas, se decide, intentando buscar siempre a los mejores o a los más capacitados para resolver una situación. Lo idóneo es que estés en el movimiento, que vayas trabajando de manera desinteresada y luego, cuando surja la necesidad de formar una candidatura, si ves que estás capacitado para ello y quieres ir, pues te propongas.
Una de las visiones que se tenía sobre Teruel Existe antes de las generales era que no estaba bien articulado en toda la provincia. Los resultados de las generales demostraron casi lo contrario. ¿Están estructurados en toda la provincia?
Siempre se podría estar mejor. La provincia de Teruel está dividida en diez comarcas, y tenemos representación en las diez. Tenemos una estructura que cubre todo el territorio y las elecciones demostraron que se llegaba a toda la provincia con más o menos intensidad. Esperamos ir consolidando esa estructura en los dos próximos años de trabajo.
¿Quién podría ser el candidato para la capital? ¿Se ve como alcalde de Teruel?
[Risas] No, no. No nos hemos planteado nada de eso. La única decisión tomada es la de presentarse. En Teruel Existe hay gente muy preparada, bastante más capaz que yo. No son decisiones tomadas. Se tomarán cuando se convoquen las elecciones o poco antes.
Aunque todavía no suenen nombres, Alcañiz y Andorra van a ser dos municipios clave, ¿no?
Lo lógico es que sea más fácil tener candidaturas donde hay más gente. Imagino que sí.
Las dos están ahora mismo gobernadas por alcaldes del PSOE.
Sí, eso es. Y Teruel por una alcaldesa del PP.
¿Necesitará Teruel Existe constituirse como partido político, en vez de seguir siendo agrupación de electores, para poder armar toda esta candidatura?
Dentro de las opciones de la ley electoral actual nos gusta la figura de la agrupación de electores porque es la que entendemos que refleja mejor el paso que se da de movimiento ciudadano a formación política. Lo que sucede es que las agrupaciones de electores, tal y como están reguladas ahora, tienen muchas desventajas en comparación con un partido político. Nuestra intención es que, en un proceso que se abre ahora en el Congreso, se modifique la legislación para otorgar a las agrupaciones de electores una regulación similar o la misma que a los partidos. Si lo conseguimos, está claro que apostaríamos por esa opción.
¿La candidatura de Teruel Existe a las autonómicas y municipales puede suponer el fin de partidos como el PAR o la CHA?
No lo sé. Es una elucubración. No sé pronunciarme al respecto. Son partidos que llevan ya mucho tiempo implantados. No creo que las cosas sean tan frágiles. Otra cuestión es que sí que somos un tercer elemento en liza y que tuvimos mucho apoyo en las elecciones generales [Teruel Existe fue la fuerza más votada en la provincia]. Pero no es correcto hacer una traslación directa del apoyo de unas elecciones generales a unas autonómicas, y mucho menos a unas locales, donde influye mucho el conocimiento personal del candidato. Yo creo que eso no va a suceder.
Pero parte del voto es posible que se trasfiera.
Sí, pero llegar a desaparecer o cosas de ese tipo sería muy significativo y precisamente por eso es difícil. Muchas veces se dice que esas formaciones han tocado suelo, pero es que a veces algunos partidos tienen el suelo muy estable. Por ejemplo, el PAR tiene mucha presencia en muchos municipios, ese sustrato es muy difícil que baje de ahí. Lo veremos.
No nos presentamos contra nadie
¿Teruel Existe puede ser una herramienta para frenar el avance de la extrema derecha en zonas rurales?
No es el objetivo. En general, no nos presentamos contra nadie, sino para aportar cosas y para defender la problemática de nuestros territorios. Podemos ser una alternativa cuando hay cierto voto descontento que no tiene claro ideológicamente hacia dónde se dirige. Esta opción puede recibir parte de ese voto descontento que, a lo mejor en otra ocasión, sí que iría a opciones de extrema derecha, pero no necesariamente. El que haya una alternativa de este tipo puede contribuir, pero ni es nuestro objetivo ni está demostrado que eso sea así. Cuando el voto de la extrema derecha se produce conscientemente es un voto muy ideologizado. Ese es difícil que cambie. El que es fácil que se trasvase es aquel voto de castigo o hastío con un sistema. Ese podría ser.
¿De qué ha servido la presencia de Teruel Existe durante este tiempo en el Congreso?
En primer lugar, para poner el problema de los desequilibrios territoriales y la lucha contra la despoblación en la mesa política y, mucho más que eso, en la conciencia de la sociedad española. Hoy está masivamente aceptado por la sociedad y por la clase política que este es un problema grave. Somos la formación que defiende estos temas en el Parlamento. Nadie más lo hace.
Luego esa defensa se ha trasladado en un plan de 130 medidas que anunció el Gobierno dotadas con 10.000 millones de euros. Nunca ha habido un presupuesto de este tipo para estos problemas y, además, estas 130 medidas vienen como consecuencia de una moción que nosotros presentamos pidiendo un plan urgente de actuación para las zonas en proceso de despoblación. En aspectos más concretos de nuestra provincia, se ha rescatado el corredor Cantábrico-Mediterráneo que estaba olvidado. Se ha conseguido que se liciten los proyectos de tres tramos de la A-68. Se ha licitado la redacción del proyecto de la variante de Utrillas. Se está ejecutando la variante de Alcorisa.
¿Cómo valora la gestión del Gobierno?
El principal problema que ha habido ha sido la pandemia. Esto ha obligado al Gobierno, y a todos, a cambiar las prioridades. Respecto a la gestión de la pandemia, siempre hemos dicho que en una pandemia no hay culpables y que todos somos víctimas. En cuanto al cumplimiento de nuestros acuerdos, teniendo presente que hay un lapso de un año, podemos decir que se está intentando cumplir, que hay unos retrasos en los plazos temporales justificados. Se va cumpliendo, también hay que decir, con insistencia constante por nuestra parte.
Es a partir de ahora, si damos por superada la crisis sanitaria –ojalá sea así– cuando debería verse una mayor celeridad en los compromisos.
¿Y en cuanto a las renovables?
A ese respecto no había ningún pacto con nosotros, pero sí que es un tema que nos ha preocupado mucho. Como formación presente en el Congreso hemos sido partidarios de que se hiciese el cambio de sistema energético de los combustibles fósiles a las energías renovables. Hemos estado preocupados porque entendíamos que el destino prioritario de la implantación de esas energías renovables iba a ser el medio rural. Es muy diferente dependiendo de cómo se actúe. Puede ser una oportunidad o puede ser un problema. Hemos participado muy activamente en la redacción de la Ley del Cambio Climático. Hemos estado en la ponencia y, gracias a nuestra presencia, la ley contempla un artículo que dice que la implantación de renovables en el territorio se hará respetando el patrimonio natural y luego un segundo párrafo que dice que deberán contribuir al desarrollo económico de los territorios en los que se implanta. Eso debería concretarse ahora en unos planes de la implantación de las renovables.
Poco después de llegar al Congreso dijo que uno de los aspectos que más le había disgustado era el clima de confrontación. ¿Esto se ha limado un poco?
Podemos decir que ha bajado un poco el nivel de intensidad. Cuando vienes desde fuera lo que más te sorprende es que en vez de hablar de problemas ordinarios y cotidianos, donde casi seguro hay unos puntos de coincidencia, se busque hablar de aquello con lo que puedes enfrentarte más con el rival y hacerlo de una manera muy agresiva. Ese nivel de intensidad es más bien solo en los plenos. Luego en los trabajos en comisión, en los trabajos más de despacho, aunque haya discrepancias, la tónica no es esa agresividad tan acusada, es más llevadera. En cierto momento lo entiendes, porque hay una diferencia de puntos de vista que quieres enfatizar, pero una cosa es enfatizarlo de una manera normal y otra cosa es hacer de eso poco menos que un enfrentamiento de tipo hooligan.
Entendemos que se concedan los indultos previa asunción de que algo se hizo mal
Ahora que van a salir a la palestra los indultos, quizá se vuelva a recrudecer. ¿Cómo espera ese proceso?
Ya se está viendo. Es un tema muy delicado porque confronta situaciones que son comprensibles desde los dos lados. Para nosotros el tema de Catalunya es importante. Nos parece lógico, y si no que alguien diga cómo se puede solucionar de otra manera, y es casi obligatorio que se deba resolver dialogando. Si no es mediante el diálogo, ¿cómo se puede resolver? En ese diálogo, a lo mejor el indulto puede colaborar. Mientras que eso sería comprensible atendiendo a un bien general, también es cierto que para nosotros habría que desligar claramente entre la parte de la pena que lleva inhabilitación para la actividad política, que creemos que se debe mantener porque se hizo un uso de la política incorrecto, y la parte que lleva la privación de libertad durante equis años. Estaríamos hablando siempre de indultos parciales. Y habría una siguiente condición para nosotros, que también creo que la menciona la legislación, que es que hubiese una mínima asunción de arrepentimiento o de no volver a actuar de la misma manera. Creemos que es exigible y, si se dieran esas condiciones, podríamos entender que se concediesen ese tipo de indultos, manteniendo la inhabilitación política y previa asunción de que algo se hizo mal. Porque si tú vas a conceder una medida de gracia a alguien, pero ni siquiera ese alguien a quien le das la medida de gracia reconoce que hizo algo mal, parece un poco ilógico.
El siguiente reto del Gobierno y del resto de instituciones es la gestión de los fondos europeos. ¿Quiere Teruel Existe entrar en las instituciones autonómicas y municipales para poder intervenir en la gestión de parte de estos fondos? ¿Para qué deberían utilizarse en Aragón, y más concretamente en Teruel?
Nuestra voluntad de estar en las Cortes de Aragón y en diputaciones, del mismo modo que nuestra presencia aquí [en el Congreso], es una herramienta para el movimiento ciudadano, es para preocuparnos de que las soluciones que se toman se asoptan con una perspectiva de cómo van a afectar a estos territorios. En Aragón pensamos que esa es una reflexión que hay que hacer. Que se cometería un error si se aprobasen proyectos sin evaluar su repercusión sobre los objetivos que queremos cumplir. Por eso presentamos en el Congreso el mecanismo de garantía rural. Los fondos deben ir a cubrir las emergencias, las medidas que hemos detectado como prioritarias. La digitalización es una de ellas: las telecomunicaciones, la fibra óptica, la corrección de los déficits históricos de infraestructuras, mejorar las carreteras, mejorar el ferrocarril convencional...
Este martes dijo en rueda de prensa que, si se consigue que Aragón deje de ser la comunidad autónoma más desequilibrada, probablemente, Teruel salga beneficiada. ¿Cómo plantean esto?
Si exceptuamos Ceuta y Melilla, Aragón es la comunidad donde más población se concentra en su capital. El 51% de la población se concentra en el 2% del territorio y el resto está en unas condiciones de densidad de población muy bajas. Ante tal desequilibrio, que es manifiesto, no se ven actuaciones concretas dentro de la comunidad para corregirlo.
Dijo también que ha habido falta de diálogo con el Gobierno de Aragón. ¿Cómo ha sido su relación con Lambán durante estos dos años?
No ha habido relación. Al poco de tomar posesión solicitamos tener una reunión con él, tanto yo, en calidad de diputado, como Teruel Existe, en su condición de agrupación de electores que había obtenido representación. Todavía no se nos ha contestado. Llevamos dos años, aunque hay que reconocer que ha habido uno de pandemia.
Pedimos el encuentro a las cuatro formaciones políticas que forman el Gobierno de Aragón [PSOE, Podemos, CHA y PAR] y nos hemos reunido con las otras tres, pero todavía no con el señor Lambán ni con el PSOE de Aragón. No ha habido esa relación. Nuestra voluntad era ofrecer nuestra presencia en Madrid como un elemento que ayudase a defender determinadas cuestiones que le pudiesen interesar a la comunidad, y no ha podido ser porque no se ha tenido esa relación.
Incluso observamos que determinadas cosas que nosotros gestionamos aquí se nos dificultan cuando las llevamos a la provincia. Detectamos, más que una voluntad de colaboración en caminar juntos, que se dedican esfuerzos a que nuestra presencia aquí no tenga ni la repercusión mediática ni social que realmente puede tener. Esa es nuestra principal discrepancia.
Nosotros, que no somos políticos al uso, lo que buscamos es trabajar por un objetivo y por solucionar determinados problemas. No comprendemos que se pueda poner por delante de la solución de esos problemas intereses de tactismo partidista. Podemos competir en el proceso electoral, pero no entendemos que eso se tenga que traducir en no colaborar para conseguir cosas para el territorio.
¿Les da vértigo el paso del Congreso y el Senado a los ayuntamientos y la comunidad? Supondrá que haya mucha gente bajo las siglas de Teruel Existe.
Sí. Más que vértigo nos hace actuar con precaución y con cabeza. Por eso lo hemos anunciado con tiempo suficiente para ser capaces de organizarlo bien. Sí nos hace mucha ilusión y nos da esperanza. Es por lo que lo hemos hecho. La ilusión y la esperanza que nos transmiten los ciudadanos que nos lo piden. Ha sido un proceso muy similar al de las generales, que nos presentamos en última instancia porque se nos pedía que nos presentásemos hasta por las calles. Y ahora estaba pasando algo muy similar.
Hay mucha gente con ilusión por trabajar por su pueblo y que ve con esperanza este momento histórico. Por fin los turolenses hemos sido conscientes de nuestra situación y hemos decidido actuar, liderando a nivel nacional un movimiento.
Sabemos que hay que hacerlo con precaución. Y nos dará igual tener diez candidaturas más o menos. No vamos a hacer una carrera como hacen otros grupos por poder decir que hemos presentado candidaturas en todos los municipios. Las presentaremos allá donde tengamos gente comprometida. El que se acerca a nosotros también sabe cómo es el espíritu de Teruel Existe.
La legislatura se aproximará mucho a su desarrollo total
A nivel nacional, ¿considera probable un adelanto electoral?
Todo está en el aire [ríe]. Yo personalmente creo que no. Por ejemplo, un adelanto de unos pocos meses sería comprensible, pero un adelanto que se produjese ya o en un año o menos lo veo muy difícil porque, pese a las discrepancias que puedes observar a veces entre los socios del Gobierno, aprecio que hay una voluntad de continuar en coalición. Hay que reconocer que tenemos muy poca experiencia en gobiernos de coalición. Es el primero que vivimos. La legislatura se aproximará mucho a su desarrollo total. No creo que haya un adelanto inmediato.
¿Se volvería a presentar a las elecciones?
Será lo que decidamos. Creo que hay que estar aquí [en el Congreso]. Es muy diferente defender tus posturas desde aquí que desde la calle. Hay que hacerlo en los dos sitios. Tiene mucha importancia que una postura sea una demanda social, no una elucubración de despacho, pero también es verdad que esa demanda social, si tiene apoyo desde los despachos, desde el punto donde se toman las decisiones, es más factible e incluso influye más. Lo hemos visto.
Cuando llegamos aquí nos desmoralizamos un poco al ver que nada de lo que habíamos estado reclamando durante muchos años, décadas, estaba realmente en el orden del día de los ministerios. ¡Pero si lo llevamos pidiendo veinte años! Aquí no se había hecho nada.
Estar aquí, estar persiguiendo esos temas, no es mera pesadez, demostrando con argumentos cómo deben ser los criterios de actuación. Es importante estar. Será lo que decida el movimiento ciudadano, pero yo creo que tiene que estar aquí con mi persona o con otra, pero tiene que estar presente.