Con cuatro años de retraso, este sábado por fin se han publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE) las declaraciones de bienes de los altos cargos de la Administración. Un documento que publica un pequeño resumen del valor del patrimonio de cada persona pero mantiene ocultos los detalles clave de esos bienes: en qué empresas tienen sus acciones, yates, obras de arte, número de inmuebles o con quién están endeudados.
El listado incluye datos del patrimonio y deudas de ministros, secretarios de Estado, embajadores y otros altos responsables del Gobierno que fueron nombrados o cesados desde el 1 de julio de 2014 hasta la actualidad. Es decir, incluye los cargos cesados del Ejecutivo de Rajoy y los recién nombrados por Pedro Sánchez.
En total, incluye 1.492 nombramientos de 1.062 altos cargos durante el ejecutivo de Rajoy. Para cada uno de ellos, el Gobierno publica el valor de los bienes (activos) y deudas (pasivos) que tiene con distinto desglose:
1) Para los nombrados o cesados antes del 20 de abril de 2015, fecha de entrada en vigor de la nueva ley de altos cargos, se incluye el valor de los activos desglosado en “bienes inmuebles” y “otros bienes” y una cifra del pasivo (deudas), sin desglosar.
2) Para los altos cargos que presentaron la información tras esa fecha, el desglose de los activos es algo mayor: bienes inmuebles, depósitos bancarios, acciones en instituciones de inversión colectiva (como fondos o sicav), acciones en sociedades, seguros de vida y un epígrafe de otros.
Tal y como publica “El BOE nuestro de cada día”, con este desglose es imposible saber si una existe conflicto de interés en cualquier decisión que tomen o hayan tomado mientras eran altos cargos. Por ejemplo, sabemos cuánto valen las acciones que puede tener un ministro de Energía pero no sabemos si esas acciones son de Endesa, de una empresa de papelería o de una sociedad familiar.
¿Qué ministros de Rajoy se enriquecieron?
Asimismo, tampoco da el detalle suficiente para saber cómo y con qué clase de bienes se han enriquecido los altos cargos que pasaron por el Gobierno de Rajoy.
Por ejemplo, si comparamos el patrimonio de los ministros de Rajoy al entrar por primera vez al Gobierno, una información publicada en 2012, con los activos que tenían al salir del Ejecutivo, publicado hoy, nos sale este gráfico:
Los datos señalan que hasta 14 miembros de los sucesivos Gobiernos de Mariano Rajoy incrementaron su patrimonio durante su periodo en el Ejecutivo. El caso más llamativo es el de Dolors Montserrat, que triplicó el valor de sus bienes durante los 19 meses que ocupó el cargo de ministra de Sanidad: pasó de tener activos valorados en 174.000 a su llegada a 679.000 euros a su salida del departamento.
Fuentes de la exministra defienden “que no es un incremento patrimonial ya que responde a un seguro de vida que incluyó en su última declaración”. Aunque el desglose de los datos confirma que la mayor parte de la subida es por seguros de vida (su nombramiento y cese es posterior a 2015), la ley 19/1991 sí los incluye como parte del patrimonio. Además, la normativa concreta que su importe se computará por su valor de rescate, el importe que recibiría el beneficiario en caso de cancelar la póliza.
El de Dolors Montserrat es solo un caso, una particularidad. Con los datos desglosados en el BOE, es imposible conocer cuántas particularidades como esa existen entre los cientos de nombramientos. Imposible discernir si el enriquecimiento de un alto cargo sucede por alguna cuestión relacionada con su cargo o por razones menos alarmantes como un seguro de vida. Por tanto, los datos pierden mucho valor.
Este cálculo del aumento del patrimonio en el Gobierno de Rajoy, sin embargo, no incluye a los ministros que se han endeudado para aumentar sus activos. Este sería el mismo gráfico si solo tenemos en cuenta la variación del patrimonio neto (activos menos pasivos).
Entre los ministros que más se enriquecieron -en neto- destacan, además de Dolores Montserrat, Isabel García Tejerina (Agricultura), Soraya Sáenz de Santamaría o Mariano Rajoy. En ninguno de esos casos es posible conocer dónde aumentó su patrimonio ya que las declaraciones que se publicaron a su llegada al Consejo de Ministros solo incluía un desglose entre “bienes inmuebles” y “otros bienes”.
Fátima Báñez, exministra de Empleo, representa la otra cara de la moneda. Su patrimonio neto pasó de 868.000 euros a 409.000. Sin embargo, el detalle de sus bienes en 2012 impide conocer en qué disminuyó su riqueza durante su tiempo como ministra.
La ley vigente establece, en su artículo 21.5, que se publicará “una declaración comprensiva de la situación patrimonial” de los altos cargos y omitiendo aquellos datos “referentes a la localización y salvaguardando la privacidad y seguridad de sus titulares”. Con la información publicada en el BOE, el Gobierno hace una interpretación estricta de esta normativa al solo publicar un escueto resumen del valor del patrimonio de cada alto cargo.
En PDF y sin estructurar
A la falta de transparencia de los datos concedidos se suma la opacidad del formato en el que han sido publicados. El documento ha sido publicado en formato PDF, y no directamente en la página web del BOE como HTML (como sí se hizo en 2014).
Asimismo, el formato de presentación de los datos, en vez de hacerse como una tabla o directamente en un archivo .csv o .xls, dificulta que se pueda reutilizar la información publicada.