Una proyección del Parlamento Europeo publicada este lunes anunciaba que Vox irrumpiría el 26 de mayo con seis eurodiputados. Y, horas después, se conocía que el partido de extrema derecha estará en la Eurocámara el 6 de marzo para hablar de Catalunya. ¿Los ponentes? El secretario general del partido, Javier Ortega Smith; la vicepresidenta de relaciones institucionales, Malena Contesti; el portavoz en Catalunya, Jorge Buxadé; la editora de Intereconomía, Rosa Cuervas; y el historiador Jesús Lainz.
El anuncio del acto se produce el mismo día en que debía celebrarse un acto de Carles Puigdemont en la Eurocámara, anulado por el presidente del Parlamento, Antonio Tajani.
No solo el exeurodiputado Ignasi Guardans ha interpelado a Tajani -si bien este no ha autorizado ni desautorizado el acto-. También lo ha hecho la eurodiputada del BNG, Ana Miranda, pidiendo que se impida el acto por amenazar el “orden público y la seguridad: fascismo nunca más”.
Y el propio Puigdemont:
La introducción del acto correrá a cargo del ultraconservador polaco Kosma Zlotowski, sancionado por la Eurocámara por su apoyo al régimen de Azerbaiyán y con quien Santiago Abascal visitó la valla de Melilla en la campaña de las andaluzas.
El debate está organizado por el grupo parlamentario ECR –Conservadores y Reformistas Europeos–, el grupo que engloba al Partido Conservador británico y los ultraconservadores polacos del PiS –el gobernante Ley y Justicia–.
Anfitrión sancionado
En abril pasado, el Parlamento Europeo excluyó a Zlotowski y otros dos eurodiputados de ECR –grupo derechista de Conservadores y Reformistas– de toda misión futura como observadores electorales después de viajar a Azerbaiyán sin mandato y hacer comentarios positivos del proceso electoral, en el que no participó la oposición por falta de garantías y que culminó con la reelección del monarca de Azerbaiyán, Ilham Aliyev –en el poder desde 2003–.
La Eurocámara había decidido no enviar la delegación a Azerbaiyán a causa del “empeoramiento del ambiente democrático del país” y por el hecho de que “la oposición había boicoteado las elecciones en vista de la ausencia de una competición genuina entre candidatos”, de acuerdo con la carta escrita entonces por David McAllister y Linda McAvan, copresidentes del Grupo de Apoyo a la Democracia y Coordinación Electoral del Parlamento.
“Aquel temor estaba absolutamente justificado”, afirma la carta a los presidentes del grupo parlamentario ECR, Syed Kamall y Ryszard Legutko, enviada tras el viaje de Zlotowski y sus dos compañeros. “Les informamos de que Ryszard Czarnecki, David Campbell Bannerman y Kosma ZÅotowski no volverán a ser autorizados a tomar parte de ninguna delegación oficial como observadores electorales en lo que queda de la actual legislatura”, decía la carta: “Esta decisión es con efecto inmediato”.
Más recientemente, ZÅotowski se ha sumado a una campaña para pedir a Amazon que deje de vender ropa y objetos con símbolos soviéticos o con la hoz y el martillo.
“La URSS era un Estado totalitario y criminal. Una empresa como Amazon debería saberlo”, ha dicho.
Zlotowski pertenece al gobernante nacionalista y autoritario Ley y Justicia, que tiene a Polonia sometido a un proceso sancionador de la UE –artículo 7, como Hungría–, por las injerencias del poder Ejecutivo sobre la Justicia.