El cartel de un concejal de la CUP para señalar al de Vox que se sienta a su lado: “Fascista”

Una flecha de cartón con un letrero en el que se lee “feixista” (fascista en catalán). Con ella en la mano ha tomado posesión del cargo Pere Vidal Domènech, concejal y número 1 de la CUP en el municipio catalán de Valls (Tarragona), señalando al que será único representante de Vox en la localidad, Francisco González.

“Pere Vidal se ha encargado de señalar el fascismo presente —tristemente— de forma descarada en el Ayuntamiento de Valls, empezando a combatirlo también desde dentro”, ha señalado CUP Valls en su perfil de Twitter. Y ha añadido: “Plantamos cara”.

Candidatura d’Unitat Popular obtuvo en las elecciones del 28 de mayo un total de dos concejales: además de Vidal, Mariona Montalà ejercerá como edila. Unas elecciones donde Junts fue el partido más votado, con Dolors Farré a la cabeza, que será la alcaldesa de Valls los próximos cuatro años.

El partido independentista manifestó en un comunicado el pasado 9 de junio su preocupación por la presencia de la ultraderecha, que ha sido el único grupo político que no ha perdido votos en comparación con los anteriores comicios. De una nula influencia de Vox en 2019 a un concejal y 524 votos en 2023.

Tras los resultados del 28 de mayo, Vox ha obtenido responsabilidades en 140 ayuntamientos de los casi 1.000 en los que logró representación, entre ellos cinco capitales de provincia: Valladolid, Burgos, Guadalajara, Toledo y Ciudad Real, que gobernará con el PP.

Según los datos que ha facilitado este sábado el partido de Santiago Abascal, sus 1.665 concejales se reparten en 966 consistorios, de los que gobernará 26 con mayoría absoluta y con pactos en otro centenar, informa Europa Press.