Las Cabezas de San Juan (Sevilla) retrocede en estos días dos siglos en la historia para llenar de magia sus calles y celebrar el pronunciamiento de Riego de 1820 que obligó al restablecimiento de la Constitución de Cádiz de 1812. La recreación del mercado antiguo y los talleres de artesanía y costura de ropas de la época son algunas de las actividades puestas en marcha por la Delegación de Cultura de la localidad para contextualizar aquel acontecimiento histórico. El pronunciamiento de Riego y el levantamiento contra el reinado absolutista de Fernando VII convirtió al municipio sevillano en la primera ciudad constitucional y sirvió de arranque al Trienio Liberal que vivió España hasta 1823. Pero, ¿qué fue el pronunciamiento de Riego y por qué se produjo en Las Cabezas?
Las tropas expedicionarias estaban acantonadas en los alrededores de Cádiz a la espera de partir en una expedición a América ante las sublevaciones de las colonias. Así lo explica el historiador y catedrático de Historia Contemporánea en la Universidad de Cádiz, Gonzalo Butrón, quien cuenta que la salida se estaba demorando cada vez más debido a la escasez de navíos y dinero para tantos abastecimientos y suministros. Eran miles de soldados y también un gran número de oficiales. Durante ese periodo de espera se produjeron varias conspiraciones, entre ellas la de 1816, que resultó complicada tanto para los independentistas como para las tropas.
El temor a las enfermedades y las pocas ganas de partir se unieron a otras cuestiones políticas. Por un lado, las conjuras para intentar acabar con el absolutismo de Fernando VII, que había terminado con la Constitución de Cádiz de 1812, en las que estaban implicados muchos oficiales del ejército; y por otro, la existencia de muchos civiles que, a través de sociedades secretas, intentaban preparar acciones contra el Gobierno.
Mito y protagonista del levantamiento
Algunas de esas conspiraciones fueron descubiertas y se arrestaron multitud de jefes y oficiales. No todas tenían como fin restablecer la 'Pepa', pero se iba preparando una propuesta constitucional nueva. Unos meses después de una nueva conjura, en 1819, se recuperó la actividad conspirativa, que tuvo como fruto el acuerdo para levantarse y proclamar la Constitución en Las Cabezas de San Juan. El general Rafael del Riego hizo un llamamiento a sus compañeros y al pueblo español: “La Constitución, sí, la Constitución, basta para apaciguar a nuestros hermanos de América”.
Aunque el protagonismo históricamente haya recaído sobre el general Riego, que es considerado el héroe del pueblo y de la Revolución de 1820, Butrón señala que había muchos oficiales implicados con igualdad de protagonismo y representación, entre ellos, Arco Agüero, Quiroga y López Baños. No obstante, la presencia que tuvo Riego durante el Trienio Liberal y la forma en que fue capturado, despedazado y expuesto el 7 de noviembre de 1823 en Madrid, situaron el foco sobre su figura, convirtiéndolo en héroe popular, mito y protagonista del levantamiento.
Así pues, para entender la figura de Rafael de Riego y por qué estaba implicado en aquella revolución, también hay que saber que fue militar y político, miembro de los Guardias de Corps de Carlos IV que luchó contra los franceses en la Guerra de la Independencia (1808-1814). Durante un tiempo estuvo prisionero en Francia, donde recibió la influencia ideológica del liberalismo revolucionario que practicó hasta su muerte. Además, dio nombre al conocido como Himno de Riego, que fue adoptado por los liberales durante la monarquía constitucional y, más adelante, por las tropas republicanas en la Guerra Civil Española.
Representación del pronunciamiento
Más de 700 personas y diversas asociaciones han colaborado con el Ayuntamiento de Las Cabezas para preparar la amplia variedad de actividades que se han organizado del 17 al 19 de marzo. Teatros, pasacalles, exhibiciones de aves rapaces y desfiles de bandas son algunas de las actividades que tienen lugar durante este fin de semana en el municipio sevillano.
Este domingo 19 se ha teatralizado nuevamente el pronunciamiento de Riego en la Plaza del Ayuntamiento, desde cuyo balcón Riego pronunció el discurso. En la primera escena, el Regimiento de Asturias ya se encuentra en el pueblo y tiene lugar la llegada a Las Cabezas de Rafael de Riego, teniente Coronel de Infantería y Comandante del 2º Batallón. Posteriormente, se ha representado la reunión entre Riego y los políticos Antonio Alcalá Galiano y Juan Álvarez Mendizábal. El espectáculo culmina con el Pronunciamiento de Riego, que resonó en Las Cabezas de San Juan el 1 de enero de 1820 y que cambiaría el trascurso de la historia de España.
Un monumento a Riego de tres metros de altura se hizo realidad casi 200 años después de que fuese recogido en el decreto de las Cortes de Cádiz de 1822, que concedía al pueblo el escudo de armas, el título de ciudad. Durante el Trienio Liberal se aprobaron también otras muchas disposiciones para dar propaganda al nuevo régimen, entre ellas el hecho de que en todas las plazas municipales se implantara una placa y se les denominase Plaza de la Constitución.
Según afirma el actual alcalde, Francisco José Toajas (PSOE), el pronunciamiento de Riego se ha convertido en un evento turístico muy importante que además representa el fin de semana de mayor facturación para su economía. Desde el municipio se sienten muy orgullosos de haber sido escenario de este “grito de libertad” que supuso esta primera experiencia constitucional para todas las que de ahí en adelante fueron surgiendo en distintos puntos de Europa.
En otras poblaciones también tuvieron lugar pronunciamientos fallidos que no consiguieron que Cádiz se levantase, pues el Gobernador de Cádiz, conocedor de la situación, cerró la ciudad para evitar que la tomasen, cuenta el historiador de la UCA.
El ejército que no partió hacia América durante el trienio se conoció como el “ejército de la isla” por la gran repercusión que tuvo el levantamiento en la ciudad de San Fernando. Allí, se publicó un periódico que iba informando día a día de los avances que hacían los que se habían levantado. Así pues, el efecto no fue inmediato, ya que desde el levantamiento hasta que el rey jurase la constitución pasaron semanas.
Hubo que esperar a que otras ciudades se fueran sumando al levantamiento para poder restablecer la Constitución y jurarla por primera vez, ya que el rey nunca había llegado a jurarla. Por esa misma razón, seis años antes protagonizó el Golpe de Estado de Mayo de 1814, que hizo que la Constitución no fuese jurada por el rey.