MEMORIA HISTÓRICA
La salida de Queipo de la Macarena, aún sin fecha: la Ley de Memoria no establece plazos para exhumaciones

El historiador Paul Preston dedicó al 'terror de Queipo' un capítulo de 'El holocausto español'.

Javier Ramajo

4

El cronómetro para la salida de los restos mortales de Gonzalo Queipo de Llano de la basílica de la Macarena de Sevilla ya está puesto en marcha con la entrada en vigor este viernes de la Ley de Memoria Democrática, publicada este jueves en el BOE, aunque, de momento, no hay plazos para ejecutar la exhumación del general golpista y “criminal de guerra”, responsable de la “matanza” de miles de andaluces según historiadores y expertos en la materia. A la Hermandad de la Macarena no le dicen en la ley “lo que tiene que hacer”, como el día anterior argumentaba, y no hay fecha prevista ni estimación de cuándo se sacarán los restos de Queipo a quien, eso sí, y como ya se anunció, se le retira el título nobiliario de marqués del que hasta ahora era portador su nieto.

Pero Queipo de Llano “ya es un ilegal, un intruso en la Macarena si atendemos a la ley”, celebran fuentes memorialistas. El artículo 38.3 de la ley establece que “los restos mortales de dirigentes del golpe militar de 1936 no podrán ser ni permanecer inhumados en un lugar preeminente de acceso público, distinto a un cementerio, que pueda favorecer la realización de actos públicos de exaltación, enaltecimiento o conmemoración de las violaciones de derechos humanos cometidas durante la Guerra o la Dictadura. Corresponderá a las administraciones públicas garantizar lo dispuesto en este apartado”. Es el caso de la basílica de la Macarena, en Sevilla, donde yace el general golpista junto a su esposa, Genoveva Martí, como ya informó este medio, aunque no todos las tenían consigo cuando el texto ya cobraba esa forma, hace más de un año.

La tumba del general franquista sigue donde siempre desde 1951 pese a que las distintas normativas, interpretadas por unos y por otros, han rodeado la idoneidad o no de esa circunstancia. La publicación este jueves de la Ley de Memoria Democrática, aprobada por el Senado el pasado 5 de octubre, abría paso, ahora parece que sí, a la exhumación. El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, se comprometió el 6 de octubre a lo que esperan desde hace mucho tiempo los memorialistas, esta vez, con la ley estatal en la mano, después de años de reivindicaciones en ese sentido, con homenajes a las mujeres represaliadas o anuales vigilias antifascistas siempre bajo el lema “fuera Queipo de la Macarena”.

“Una vergüenza para la ciudad”, una “anomalía democrática”, han proclamado todos estos años atrás. El ministro no hacía más que confirmar lo que ya dijo hace un año el todavía secretario de Estado de Memoria Democrática, Fernando Martínez: “Una vez que aprobemos la Ley de Memoria Democrática, están puestas todas las condiciones para que este tipo de anomalías en la vida democrática no vuelvan a producirse ni que estén en esos lugares públicos”.

La Junta, tras el anuncio explícito, aseguró lo siguiente: “Nosotros vamos a cumplir, como hacemos siempre, las leyes y esta no es excepción”, comentaron brevemente al respecto fuentes de la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte. Las últimas declaraciones de la entonces consejera responsable de las competencias de memoria histórica en Andalucía, Patricia del Pozo, levantaron ampollas en el movimiento memorialista. Preguntada por este periódico por la tumba de Queipo dijo que “no es bueno buscar el conflicto desenterrando esos horrores”.

Hace apenas tres meses, antes de la aprobación de la nueva Ley de Memoria, la hermandad se escudaba, como ha hecho en los últimos años, en la voluntad de la familia. “La familia sigue sin ningún movimiento” respecto al traslado de los restos del general al columbario, que fue bendecido en noviembre de 2020 y donde ya reposan inhumados los restos de un centenar de hermanos y devotos, dijeron a este periódico el pasado julio durante un homenaje a las víctimas del franquismo frente a la Macarena con motivo del 86 aniversario del golpe militar contra el Gobierno de la República.

Este miércoles el hermano mayor, José Antonio Fernández Cabrero, dijo que no va a “tomar ninguna decisión” por ahora, esgrimiendo que sus hermanos están “divididos” sobre la cuestión, de ahí que haya decidido aguardar cómo se desarrollan los acontecimientos. En este sentido, ha señalado que la hermandad “está esperando que le digan qué tiene que hacer”. La ley no pone plazos para ello.

Por su parte, el secretario general del PSOE andaluz, Juan Espadas, defiende que la nueva Ley de Memoria es la herramienta definitiva para zanjar el asunto de la exhumación de Queipo de la Macarena. No obstante, el ex alcalde de Sevilla sigue defendiendo la vía del “diálogo” con la familia del general fascista y con la hermandad para evitar ahondar en una polémica que despierta muchas sensibilidades encontradas en la capital andaluza, a pocos meses de las elecciones municipales.

Los escollos

En octubre de 2019, fue el dictador Francisco Franco y ahora le tocará el turno a Queipo de Llano y a José Antonio Primo de Rivera, fundador de la Falange Española enterrado a los pies del altar mayor de la basílica del Valle de los Caídos, la mayor fosa común de España, que cuenta con un artículo específico en la ley. Los restos de Franco y los de Queipo tenían una serie de diferencias por las cuales se procedió a la exhumación de los restos del dictador y los del general golpista aún esperan en el mismo lugar. Para algunos, ya debió salir de la Macarena a la luz de la ley andaluza de 2017 respecto a ese tipo de situaciones (“cuando los elementos contrarios a la memoria democrática estén colocados en edificios de carácter privado con proyección a un espacio o uso público, las personas propietarias de los mismos deberán retirarlos o eliminarlos” -artículo 32.4-), si bien dejaba la decisión en manos de los “propietarios”. Ahora son las administraciones públicas a quienes corresponde “garantizar lo dispuesto”. Un informe jurídico de la Junta cuestionó en su día la posible exhumación de los restos de Queipo, un asunto que lleva años en la agenda pero no termina de concretarse y un informe al que se ha aferrado la Junta durante la anterior legislatura para no mover ficha del tema.

Cabe recordar que Queipo, entre otras muchas cosas, protagonizó arengas tan encendidas e incendiarias como estas: “Se les perseguirá como a fieras, hasta hacerlos desaparecer a todos”, decía el general golpista desde la radio. “Nuestros valientes legionarios y regulares han demostrado a los rojos cobardes lo que significa ser hombres de verdad. Y de paso también a sus mujeres”, exaltaba ante los micrófonos de Unión Radio Sevilla (emisora de la Cadena SER). “Esto está totalmente justificado porque estas comunistas y anarquistas predican el amor libre. Ahora por lo menos sabrán lo que son hombres y no milicianos maricones. No se van a librar por mucho que berreen y pataleen”.

Etiquetas
stats