Huelva, 14 jun (EFE).- Más de 1.600 científicos se han sumado en una semana al manifiesto de WWF para pedir la retirada de la proposición de Ley de ampliación de los regadíos en la Corona Norte de Doñana que se tramita en el Parlamento andaluz y medidas urgentes para salvar a este humedal, Patrimonio de la Humanidad, de su estado crítico de conservación.
Frente al “veto” a los científicos y especialistas por parte de la Junta de Andalucía, WWF ha dado voz a investigadores de universidades e instituciones nacionales e internacionales que rechazan “esta ley que desafía a la ciencia y la legalidad”, ha informado la organización en un comunicado.
El manifiesto ha sido firmado por destacados científicos como Eloy Revilla, director de la Estación Biológica de Doñana (EBD); Fernando Valladares, investigador del CSIC, e investigadores de la Universidad de Stanford (EE UU), Tour du Valat, (Francia), CONICET de la Universidad Buenos Aires, (Argentina), Universidad Concordia (Canadá), Universidad Wageningen (Países Bajos) y Royal Botanic Gardens (Reino Unido), entre muchos otros.
“La nueva ley aceleraría la destrucción de este humedal de importancia mundial, cuya supervivencia depende del uso sostenible de las aguas subterráneas y superficiales. La norma además impactaría a la población local, a los productores de fresas legales y a la naturaleza, además de socavar la adaptación al cambio climático”, destaca el manifiesto firmado por los científicos.
Los firmantes piden a la Junta de Andalucía que retire la propuesta de ley, garantice una agricultura sostenible en la región dentro del escenario actual de cambio climático y ponga en marcha medidas de restauración del espacio natural y de los ecosistemas más amenazados.
También piden a la Comisión Europea que tome todas las medidas necesarias para frenar el proyecto de ley y garantizar la conservación de este valioso humedal.
La norma fue debatida ayer en la Comisión de Fomento del Parlamento andaluz, en la que continúa el proceso de tramitación, aunque dejó fuera del debate “a gran parte de la sociedad de Doñana y, en particular, a voces científicas por haber sido críticos con la proposición de ley”.