Se trata de uno de los trabajos “más avanzados en el campo de la inmunoterapia celular adoptiva”. Al menos así lo ha calificado Manel Juan, jefe del Servicio de Inmunología en el Hospital Clínic de Barcelona. Este jueves la revista Nature publica el artículo 'Sustitución de receptores de células T de precisión no virales para la terapia celular personalizada', cuya novedad se basa en el uso de la tecnología CRISPR, apodada la 'tijera genética', para modificar los receptores de linfocitos T del propio paciente en el tratamiento contra el cáncer.
En el artículo, se describe el desarrollo y el primer ensayo clínico en humanos de células inmunitarias no modificadas por ingeniería viral para el tratamiento del cáncer, señala la Universidad de California en una nota de prensa. Para ello, se modifica el genoma a través de la herramienta CRISPR (un sistema que se basa en el comportamiento de las bacterias) para que produzca células T específicas para un paciente.
“Abre la puerta a la propuesta más personalizada posible para el tratamiento de tumores”, ha añadido el doctor Manel Juan en declaraciones al Science Media Centre. “No se trata, como dice la nota de prensa, del primer trabajo que prueba por primera vez la herramienta para modificar linfocitos T (como ellos mismos citan, ya se ha hecho con las terapias CART), pero sí que es el primero que lo hace con receptores de linfocitos T del propio paciente, con lo que consigue dirigirlos contra antígenos específicos de cada tumor en cada paciente”.
El poder del sistema inmunitario
“Aprovechar el poder del sistema inmunitario humano es un objetivo atractivo para el tratamiento del cáncer. Los receptores en superficie de los linfocitos T pueden detectar células cancerosas debido a mutaciones puntuales en el genoma del cáncer que modifican las proteínas de la superficie celular”, describe la misma nota. “Aislar estos receptores de células T que detectan el cáncer y utilizarlos para generar células T terapéuticas podría proporcionar una nueva forma de tratar los tumores resistentes a la terapia”.
El equipo liderado por Antoni Ribas utiliza este sistema de edición genómica para insertar receptores de células T específicos para el cáncer en las células T de pacientes con cáncer. De este modo, se producen células inmunes personalizadas contra el cáncer. “Esto supone un salto adelante en el desarrollo de un tratamiento personalizado para el cáncer, en el que el aislamiento de los receptores inmunitarios que reconocen específicamente las mutaciones en el propio cáncer del paciente se utilizan para tratar el cáncer”, describe Ribas en la nota remitida a medios.
La tecnología CRISPR ya se había utilizado anteriormente para eliminar genes específicos y permitir que el sistema inmunitario se active contra el cáncer. Lo que ahora se habría logrado es insertar genes que permitan a las células inmunitarias centrar su ataque en las células cancerosas, sin dañar a las células normales y aumentando la eficacia de la inmunoterapia.
En este estudio clínico en fase 1, han participado 16 pacientes con tumores sólidos metastásicos, en su mayoría con cáncer colorrectal, que no respondían a terapias estándar. El tratamiento dio lugar a la estabilización de la enfermedad en cinco de los 16 pacientes analizados. Los autores de la investigación reconocen que el enfoque, por el momento, tiene limitaciones relacionadas con el tiempo que se necesita para caracterizar antígenos potenciales y para aislar, clonar y probar los receptores de células T. Con todo, consideran posible que estos procesos puedan tener futuras mejorías.
“Es un paso muy importante en el terreno de la terapia celular adoptiva con linfocitos modificados para favorecer que cada vez más enfermos con tumores sólidos puedan beneficiarse de estos tratamientos”, afirma Josep Tabernero, jefe del Departamento de Oncología del Hospital Universitario Vall d'Hebrón. “Hasta la actualidad, las diferentes tecnologías de inmunoterapia celular han tenido mayoritariamente un enfoque en pacientes con tumores hematológicos”, recuerda y recoge también el Science Media Centre.