Greenpeace ha pedido hoy un incremento de los medios para luchar contra la contaminación tras el hundimiento del “Oleg Naydenov” ante la aparición de manchas de fuel cerca de Gran Canaria, que achaca a “los errores cometidos en la cadena de decisiones desde que el buque se incendió”.
“La llegada de hidrocarburos a las costas hace imprescindible activar todos los medios técnicos y humanos para evitar que los impactos sean más graves”, afirma la organización ecologista en un comunicado emitido ante la noticia de que, “a última hora de ayer, una cantidad de fuel aún por determinar alcanzó la playa de Veneguera, en el municipio de Mogán, en Gran Canaria”.
Un enclave al que se han trasladado desde primera hora de la mañana para conocer la situación activistas de Greenpeace, organización que informa de que, además, en la jornada de hoy, como en otras anteriores, sobrevolará de nuevo la zona para volver a documentar el estado del vertido.
La organización subraya que, ahora mismo, este vertido tiene tres frentes abiertos: la zona del hundimiento; la mancha de casi 200 kilómetros de extensión que se aleja al suroeste y la zona costera de Mogán.
Y añade que, “por ello, Greenpeace considera fundamental incrementar cuanto antes los efectivos para que puedan estar actuando en los tres puntos y conocer con antelación la posible llegada de nuevas manchas a tierra”.
En esa línea, opina que, “hasta ahora, el Ministerio de Fomento es el que ha llevado el peso del operativo, pero es esencial que el Ministerio de Medio Ambiente se ponga a trabajar activamente”.
Greenpeace recuerda que el entorno de la playa de Veneguera es de los pocos espacios que quedan sin urbanizar en Gran Canaria y que está incluido en la Red Natura 2000, protegido por la Unión Europea por la presencia de tortugas y del amenazado delfín mular, y que forma parte del Parque Rural del Nublo, un espacio singular donde coinciden varios valores naturales que justifican su protección.