La tapa de un reactor de la empresa química que explotó ayer en Tarragona salió volando como consecuencia de la deflagración hasta acabar empotrada en un piso a casi tres kilómetros del lugar y acabó con la vida Sergio Millán, de 59 años, según Efe.
El hombre vivía en el piso inferior al que sufrió el impacto, y falleció anoche como consecuencia del desprendimiento del piso superior a causa de la chapa de hierro, que pesa cerca de una tonelada. La tapa del reactor entró por la ventana tras volar 2,5 kilómetros, según explicó el alcalde de Tarragona, Pau Ricomà, ha explicado este miércoles a EFE este “casi inverosímil” suceso como la “hipótesis más probable” que manejan los técnicos para conocer la causa de la muerte de Sergio, que falleció en su casa del barrio tarraconense de Torreforta a consecuencia de la explosión en la industria IQOXE, situada en el municipio de La Canonja.
La de Sergio fue la primera muerte confirmada del suceso registrado ayer. En la mañana de este miércoles los bomberos han localizado el cuerpo sin vida del trabajador de la industria que se encontraba desaparecido desde que se registró la explosión ayer. Además, han resultado heridas otras ocho personas, todas ellas trabajadoras de la empresa.
El alcalde ha puntualizado que la chapa, de dos metros de largo por uno de ancho, voló “en línea recta” unos tres kilómetros para “entrar por la ventana”, al parecer abierta en el momento de la explosión en la fábrica, del piso tercero del inmueble ubicado en el número 7 de la plaza García Lorca de Tarragona.
Ricomà ha explicado que anoche se trabajó con la hipótesis de que la onda expansiva de la explosión fuera la que ocasionó la rotura de vidrios en la casa de la víctima, y que la caída de los mismos le hubiera provocado la muerte.
El alcalde ha precisado que, pasadas las horas, revisada la casa y “recogidos in situ” el testimonio de los testigos, “todo parece indicar” que seguramente la tapa del reactor fue la causante de la muerte de Sergio Millán, persona muy conocida en el barrio de Torreforta, donde poseía desde hace año un comercio.
“Es la hipótesis más probable”, ha dicho Ricomà, a la espera de que “lo acaben de confirmar los técnicos”. El alcalde presidirá este mediodía en el Ayuntamiento de Tarragona una reunión de la junta de gobierno del consistorio, que ha decretado dos días de duelo por el accidente.