Más de 120 académicos de distintos campos han suscrito un manifiesto en el que reclaman al Gobierno de España una mayor transparencia en el desarrollo de la app Radar COVID. Los firmantes piden que se abra la puerta a una mayor colaboración con expertos de distintos ámbitos y la sociedad civil, algo que consideran clave para el éxito de la herramienta.
Algunos de los que apoyan el manifiesto son Ricardo Baeza-Yates, catedrático de Ciencias del Dato y miembro del Consejo Nacional de Inteligencia Artificial; Itziar de Lecuona, catedrática de Bioética de la Unesco y miembro del Grupo de Trabajo Multidisciplinar del Ministerio de Ciencia; Miguel Luengo Oroz, profesor de la Universidad Politécnica de Madrid, jefe científico de datos de la ONU y asesor experto de la OMS; y Daniel Innerarity, catedrático de Filosofía del Derecho.
Radar COVID es una herramienta de rastreo que la Secretaría de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial ha lanzado en las últimas semanas en colaboración con Indra. Hasta el momento ha sido descargada por más de 3,4 millones de personas y ya está activa en diez comunidades autónomas. Las últimas en sumarse han sido Madrid y Navarra. Este tipo de aplicaciones se han desplegado en otros países como Alemania, Italia o Suiza, con unos resultados que, según los expertos, “llaman al optimismo”.
Los firmantes del manifiesto advierten de que este tipo de apps necesitan para ser útiles “la cooperación de toda la sociedad” y que esto solo se consigue, en una población tan heterogénea como la nuestra, con “la ayuda de expertos de diversas disciplinas”. Lamentan que a día de hoy “no se ha publicado ninguna documentación sobre el diseño de la aplicación, sobre su implementación, ni sobre el proceso de integración de las comunidades autónomas”.
Desde la Secretaría de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial han anunciado que el código de la aplicación, un conjunto de textos con los pasos que sigue un dispositivo para ejecutar un determinado programa, se hará público el próximo 9 de septiembre, algo que en el manifiesto consideran el inicio de la “democratización de las infraestructuras digitales públicas”. Sin embargo, los académicos creen que esta decisión debe ir acompañada de otras para que tanto expertos de la comunidad científica como civil puedan contribuir a la mejora de la herramienta, por lo que piden la “documentación e información completas”.
En el manifiesto exigen que se hagan públicos determinados elementos como un “repositorio con el código que permita analizar la versión de todos los elementos del sistema el día que se haga público así como futuros cambios”, “repositorio de código utilizado durante el desarrollo”, un “informe de diseño del sistema”, un “informe detallado de los mecanismos de monitorización” asociados y, por último, una “evaluación de impacto en la protección de datos”.
Finalmente, recuerdan que a pesar de que Radar Covid sea una herramienta “esencial” para luchar contra el virus, no es la única ni sustituye a los rastreadores manuales. Ponen de manifiesto la importancia del uso de las mascarillas y la distancia social y piden tener en cuenta las “asimetrías sociales” de nuestro país, que hacen que no todo el mundo pueda tener acceso a esta herramienta digital.