La Comisión Europea ha abierto un procedimiento formal de infracción contra la red social X (antes Twitter) por incumplir la Ley de Servicios Digitales (DSA) que está en vigor desde el pasado mes de agosto. Se trata de la primera medida de este tipo contra una plataforma digital desde que esa normativa europea está vigente. Bruselas considera que la compañía que dirige el magnate Elon Musk ha incumplido las nuevas normas en materia de transparencia y que no ha puesto en marcha las medidas necesarias para combatir la diseminación de desinformación y de contenidos ilegales.
La decisión parte de las evaluaciones que hasta ahora ha hecho el gobierno comunitario en base a la DSA y también al no encontrar satisfactorias las respuestas que la compañía de Musk dio a la investigación abierta a raíz de la detección de desinformación y contenidos ilegales tras el ataque de Hamás a Israel el pasado 7 de octubre y la consiguiente respuesta bélica de ese país sobre la Franja de Gaza.
“No podemos prejuzgar el resultado de la investigación”, ha dicho el portavoz del área de economía digital, Johannes Bahrke, que no ha querido “especular” sobre otros procedimientos para otras plataformas en el futuro. La Comisión Europea también solicitó información a Meta y TikTok por la preocupación de los contenidos que se difundían en las redes sociales en relación al conflicto en Oriente Medio.
La Comisión Europea da ahora un paso más en el caso de X al abrir un procedimiento de infracción para determinar la situación de la red social respecto a obligaciones de la DSA, como la evaluación de riesgos y las medidas de mitigación adoptadas para luchar contra la difusión de contenidos ilícitos en la UE, así como el funcionamiento del mecanismo de notificación y actuación en materia de contenidos ilícitos en la UE. También respecto a las medidas puestas en marcha para combatir la manipulación.
Otros de los asuntos que la Comisión Europea quiere analizar son las medidas para incrementar la transparencia de la plataforma al haber detectado “deficiencias” en el acceso a los investigadores a los datos (relativos a la seguridad, por ejemplo) así como en el repositorio de anuncios publicitarios de X. También apunta a un “diseño engañoso de la interfaz” de la red social en relación a las marcas de suscripción (los denominados 'checks' azules.
La normativa europea contempla sanciones de hasta el 6% de la facturación global de la compañía en el caso de que la conclusión del procedimiento sea que, efectivamente, X ha incumplido las obligaciones recogidas en cinco artículos de la DSA. No obstante, no hay un periodo establecido para llevar a cabo el procedimiento y depende en buena medida de la colaboración de la compañía, según explica la Comisión Europea en un comunicado. Por el momento, Bruselas seguirá con la investigación que ha puesto en marcha “recabando pruebas, por ejemplo, enviando solicitudes adicionales de información, realizando entrevistas o inspecciones” y se reserva la posibilidad de adoptar medidas cautelares.