Los lanzadores de aplicaciones llevan ya unos cuantos anÌos entre nosotros. En la deÌcada de los noventa, ya existiÌan Launchbar (NEXTStep y luego OS X) y JetToolBar (Windows). Sin embargo, ambos soÌlo eran, en efecto, lanzadores de aplicaciones al uso.
Los lanzadores te permiten acceder a tus programas directamente desde el teclado, presionando un comando preestablecido, y despueÌs introduciendo las primeras letras del nombre del programa o archivo. Estos programas acceden a un iÌndice de los contenidos de tu disco duro que permanece siempre actualizado y muestran los resultados en base a lo que vas escribiendo, de modo que los resultados siempre son instantaÌneos. Esto hace 15 anÌos era un concepto novedoso y por eso, entre otras cosas, se hicieron muy populares.
Antes de la aplicacioÌn de los iÌndices, las buÌsquedas escaneaban los contenidos cada vez que necesitabas encontrar algo, y era un proceso muy, muy lento, y que requeriÌa de muchos recursos de sistema. Hoy los iÌndices de archivos son un estaÌndar en todas las plataformas. Otra cosa interesante de los lanzadores es que ademaÌs aprenden de tus haÌbitos para saber que generalmente, si introduces “fi” lo maÌs probable es que te refieras a Firefox y no a Filemaker, que usas con menos frecuencia.
Durante mucho tiempo, surgieron multitud de propuestas con una filosofiÌa similar, pero hubo dos factores que cambiaron el rumbo por completo. El primero fue el desarrollo de Quicksilver, que aunque manteniÌa la filosofiÌa de lanzador de aplicaciones, era realmente mucho maÌs. PodiÌas extenderlo hasta el infinito con plug-ins, configurar multitud de acciones con comandos de teclado, y ejecutar casi cualquier cosa casi como si fuera un terminal con un enfoque algo maÌs graÌfico. El segundo factor fue el lanzamiento de Spotlight con el que era la uÌltima versioÌn del sistema operativo de Apple, OS X Tiger, seguido al anÌo siguiente por Windows Search. A partir de ahiÌ, los lanzadores estaÌndar perdieron todo el tiroÌn que teniÌan y Quicksilver se convirtioÌ en el arma secreta de los usuarios avanzados.
El problema de Quicksilver es que era (y es, aunque quizaÌs en menor medida) un software inestable, y sobre todo, complicado de aprender. La curva de aprendizaje es muy pronunciada y la mayoriÌa no conseguimos sacarle partido entre bugs y cierres inesperados. Hay que dedicarle mucho tiempo.
Hace unos anÌos salioÌ una alternativa a Quicksilver que a miÌ personalmente me tiene enamorado. Alfred es una pequenÌa joya, que sin ser tan extensible como Quicksilver, auÌn es capaz de hacer muchas, muchas cosas, y las que hace, las hace mejor (aunque sea porque funciona nada maÌs instalarlo). Sus desarrolladores entendieron que habiÌa auÌn un lugar para alguien que hiciera algo potente pero sencillo y usable dentro del mundo de los lanzadores de aplicaciones, ahora llamados maÌs correctamente “aplicaciones de productividad”.
Una de las cosas que maÌs uso de Alfred son las buÌsquedas personalizadas o custom searches. Con ellas puedes lanzar buÌsquedas en casi cualquier sitio de internet, ya sea Amazon.com o .co.uk, Thomann.de, sitios de torrents, o incluso sitios sin un buscador web como Spotify o Mac App Store. Lanzar una buÌsqueda desde Alfred es mucho maÌs raÌpido que abrir el navegador, ir a la direccioÌn, hacer click en la barra de buÌsqueda... Me gusta poner palabras clave que agrupen las buÌsquedas. De modo que si tengo varias buÌsquedas en Amazon por paiÌses, las palabras clave podriÌan ser “amazon” para la tienda estadounidense, “amazuk” para la britaÌnica, o “amazes” para la espanÌola. Esto tiene de ventaja que seguÌn escribo “am” en Alfred, ya me estaÌ ofreciendo las opciones que hay y puedo ir directamente a una sin tener que escribir la palabra clave al completo, y con una referencia visual de las opciones.
Cómo crear búsquedas personalizadas en Alfred
Para empezar, abrimos las preferencias del programa (cmd + , con el lanzador abierto) y nos vamos a la seccioÌn “Custom Searches”. AhiÌ damos al “+” y nos aparece el formulario de creacioÌn como en la captura.
He puesto uno ya rellenado para que lo usemos de ejemplo. La direccioÌn que introducimos en el campo “Search URL” la conseguimos haciendo una buÌsqueda en el propio sitio, en este caso, en Delicious. Lo ideal es que hagamos una buÌsqueda de algo que lleve al menos dos palabras, por ejemplo, “Harry Potter”. Ahora vemos por queÌ.
Como veis, la buÌsqueda en Delicious trae esta paÌgina de resultados (en la captura), que contiene su propia direccioÌn: http://www.delicious.com/search?p=harry+potter
Eso es lo que tenemos que copiar en el campo “Search URL”, pero tenemos que sustituir los teÌrminos de buÌsqueda que aparecen en la direccioÌn (en este caso “harry+potter”) por “{query}”, de modo que Alfred sepa doÌnde poner los que introduzcamos cada vez. Si os fijaÌis tambieÌn hay una opcioÌn bajo este campo el formulario, un recuadro seleccionable que pone “Encode spaces as +”. Os vais a encontrar muchas webs, como Delicious, que anÌaden un + entre los teÌrminos de buÌsqueda en la URL. Por eso es mejor introducir al menos dos teÌrminos en la buÌsqueda, para ver directamente si necesitamos marcar esa opcioÌn.
Hay otro recuadro en el que pone “Encode query using UTF8” que se supone que es por si usamos caracteres no estaÌndar. De momento no he necesitado marcarlo, pero si ves que la buÌsqueda en alguna web no funciona al lanzarla desde Alfred, quizaÌs tengas que probar si es por esto.
El resto de campos del formulario no tiene mucho misterio. “Title” es el nombre que le quieras poner, y “keyword” el trigger o palabra clave que le asignes a esa buÌsqueda. Como comentaba antes, a veces asigno variaciones de una misma palabra clave para agrupar tipos de buÌsquedas, pero eso es una opcioÌn personal.
Y ya estaÌ, con esto tenemos cualquier buÌsqueda que queramos accesible desde cualquier parte del sistema, a tan solo un comando de teclado.
Un apunte. Alfred tiene una versioÌn gratuita y otra de pago. Una de las ventajas que tiene la versioÌn de pago es que permite sincronizar mediante Dropbox la configuracioÌn del tema visual y, entre otras cosas, las buÌsquedas personalizadas y los Snippets. Si usas varios ordenadores y te da como a miÌ por crear un montoÌn de buÌsquedas, la versioÌn de pago con el Powerpack es altamente recomendada.
Como aporte extra, otra cosa que tiene Alfred que uso mucho son los Snippets del portapapeles interno que tiene. En los Snipplets puedes poner cosas que escribas a menudo, como tu email, e invocarlos pulsando alt+cmd+C, parecido al que se usa para copiar, asiÌ que es faÌcil de recordar. Para acceder a ellos, estaÌn en las preferencias dentro de la seccioÌn “Clipboard”.