El Gobierno ha impulsado varias medidas para contrarrestar los posibles afectos adversos de los sistemas de Inteligencia Artificial, como la transparencia de los algoritmos laborales prevista en la ley rider o la Agencia de Supervisión de Algoritmos, que el Ejecutivo planea constituir a finales de este año. A partir de octubre España será también el campo de pruebas del primer Reglamento Europeo de Inteligencia Artificial, que actualmente se negocia en las instituciones comunitarias.
Bruselas ha visto con buenos ojos la propuesta del Ejecutivo español para ensayar en el país la aplicación del nuevo Reglamento antes de su entrada en vigor, prevista para el 1 de enero de 2024. Se trata del primer paquete de normas a gran escala para que la Inteligencia Artificial (IA) deje de ser una tecnología desregulada y uno de los objetivos del proyecto piloto que se desarrollará en España es que no pille a los países desprevenidos.
“No queremos que nos pase como el Reglamento General de Protección de Datos y que cuando llegue el momento de aplicarlo, las instituciones y empresas no estén preparados porque los cambios que introduce son demasiado grandes”, ha explicado Carme Artigas, secretaria de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial (SEDIA), en una reunión con periodistas.
Para la UE, el objetivo es que la experiencia obtenida en España se aplique luego en el resto de países y facilite la aplicación inicial del Reglamento. Para España, que ese año y medio sea un período en el que se puedan dar “desarrollos tecnológicos sin cortapisas”, ya que las empresas ya podrán tener en cuenta las nuevas normas europeas sobre la IA, ha enumerado la secretaria de Estado.
Sistemas de alto riesgo
“Quiero felicitar a España por ser pionera y por ser el primer país en lanzar este piloto, orientado a ser un proyecto seguido por el resto de países”, ha expresado este lunes el comisario europeo de Mercado Interior, Thierry Breton, en la presentación del piloto en Bruselas. El francés ha recordado que esta nueva regulación europea pretende “dar confianza a los ciudadanos y a las empresas de que la Inteligencia Artificial europea es segura y respeta nuestros valores”.
Entre las medidas que prepara Bruselas está la prohibición de que los criticados sistemas de reconocimiento facial cuando se empleen en espacios públicos, o aquellos que pueden modificar el comportamiento humano. El Reglamento creará varios niveles de riesgo para los sistemas de IA. Los dos citados serán considerados de “alto riesgo” y “estarán sujetos a estrictas obligaciones antes de que puedan comercializarse”.
España invertirá 4,3 millones de euros de los fondos de recuperación a sufragar los gastos del proyecto piloto. La coordinación correrá a cargo de la SEDIA, que depende del Ministerio de Asuntos Económicos. El Gobierno lanzará una convocatoria de interés para reclutar a empresas e instituciones que estén interesadas en participar el el proyecto piloto. “Priorizaremos aquello donde haya más demanda y en donde haya más disposición a invertir tiempo y recursos”, ha avanzado Artigas.
Aunque el Reglamento Europeo sobre IA aunque está perfilándose en Bruselas, el Gobierno espera que la Comisión y el Parlamento hayan acordado un texto prácticamente definitivo para octubre, momento en el que empezará a ensayarse en España. Su aprobación final está prevista para 2023 y podría coincidir con la presidencia rotativa de España del Consejo Europeo, agendada para el segundo semestre de 2023.
Agencia de Supervisión de Algoritmos
La SEDIA colaborará con expertos de Bruselas y con instituciones internacionales de investigación durante el desarrollo de las pruebas sobre las medidas de control de la IA. “Esta colaboración nos vendrá muy bien para terminar de afinar las funciones que va a tener la Agencia Supervisión de Algoritmos”, ha manifestado Artigas en una reunión con periodistas en la que explicó los detalles del proyecto piloto.
Los presupuestos generales de 2022 destinaron cinco millones de euros a la creación de este nuevo organismo tras un acuerdo entre el Ejecutivo y Más País. Su lanzamiento definitivo está previsto para finales de año y la sede está aún por decidir, así como los métodos que usará para llevar a cabo esa supervisión de los sistemas de Inteligencia Artificial.
“Los países de la Unión Europea nos están esperando. Quieren ver cómo montamos nosotros la Agencia para para poder desarrollar algo similar, por lo que toda la experiencia de pruebas con el Reglamento va a ser muy práctica para perfilar estos nuevos organismos que son muy novedosos”, expone Artigas.
Una de las ideas es que las agencias de supervisión de algoritmos del continente puedan “coordinarse en una especie de sistema de alerta temprana, tipo alerta sanitaria, para que antes de que haya un producto con IA de alto riesgo en el mercado seamos capaces de detectarlo”, ejemplifica la secretaria de Estado.
Antes del lanzamiento definitivo del proyecto piloto en octubre el Gobierno aprobará un Real Decreto-ley para detallar su encuadre legal y su presupuesto final.