Tamara Falcó zanja en 'El Hormiguero' su polémica con Joaquín Torres: “Se me ha liado una esta semana...”
La inesperada guerra mediática surgida entre Tamara Falcó y Joaquín Torres, a cuenta del nuevo ático de la aristócrata que el arquitecto había diseñado, parece haberse cerrado. Al menos, entre los dos principales protagonistas. Horas después de que él anunciase una demanda contra Socialité, al hilo de este tema, la marquesa quiso quitar hierro a lo ocurrido.
Como cada jueves, la hija de Isabel Preysler participaba en la tertulia de actualidad de El Hormiguero, en compañía de Nuria Roca, Juan del Val y Cristina Pardo. Nada más empezar, Pablo Motos le preguntaba por su mudanza. Ella aprovechaba el pie para resumir el entuerto.
“Se me ha liado una esta semana...”, reconocía. Falcó puso en antecedentes y se retrotrajo a sus palabras originales de El Hormiguero, hace justo una semana, donde manifestó un descontento relativo a su nueva propiedad. El lío, aclaraba, vino “por algo que dije y que no expliqué bien”. “Algo dije que se malinterpretó y fueron a por Joaquín Torres y le dijeron que a Tamara Falcó no le gusta su casa”.
“Ya son ganas de fastidiar”, apuntó Motos. Ninguno de los dos, ni presentador ni colaboradora, mencionaron el nombre del programa de Telecinco, aunque la alusión era más que evidente para quien estuviera mínimamente enterado.
“A Joaquín le cortan trocitos de la conversación”
Además, Falcó recupera la versión que, horas antes, había expuesto el mismo arquitecto en Espejo Público. “A Joaquín le cortan trocitos de la conversación y se empieza a liar una... Me dicen que me odia”. Torres aseguró que desde Socialité, al llamarlo, no le avisaron de que la conversación era grabada y que manipularon sus palabras: “De una conversación de más de tres cuartos de hora donde les digo que no insistan, acabé haciendo comentarios. Sacaron esa parte y dijeron que estaba molesto”.
Falcó agregó que habló con Torres a través de Instagram y resolvieron el problema. “Mi casa es genial. El bloqueo botánico va viento en popa. Estoy feliz, nos mudamos ya. Ya he hecho las fotos... Con la cocina de mis sueños, que me la ha hecho”, concluyó.
Torres, que ya indicó que el desagrado de la famosa no era con él o con sus diseños, sino con la promotora, anunció en Espejo Público que ha “demandado a Socialité por haberme grabado sin permiso y por haber dado una comunicación totalmente contraria a la que yo les di”.