Confinamiento en serie: la escalada de ficciones rodadas en casa y bajo mínimos para TV
Con el mundo atravesando una desigual desescalada tras los meses de confinamiento por el coronavirus, siguen saliendo a la calle los frutos de una industria, la televisiva, que trató de hacer de la necesidad oportunidad: la de realizar series bajo mínimo, con equipos caseros pero con talento de altos estándares, dentro de las posibilidades que las viviendas permitían durante la cuarentena. Netflix ha sido la última en sumarse a esta tendencia que se ha propagado rápidamente entre los grandes surtidores de contenidos bajo demanda con Hecho en casa, una colección de cortometrajes rodados en aislamiento por cineastas de todo el mundo.
Bien es cierto que el grueso de los programas de entretenimiento de Occidente tuvieron que reaccionar rápido y plantearon con premura versiones caseras que permitieran seguir en emisión sin requerir que sus talentos delante y detrás de las cámaras se vieran expuestos. Sin embargo, ante la parálisis de la producción de ficción a nivel global, y la incertidumbre en torno a la vuelta a una cierta normalidad que permita reactivar la producción en serie, la alternativa de ficciones hechas en estas condiciones extraordinarias ha servido como una socorrida, y en algunos casos, creativa puerta al exterior.
Hasta el punto de que nos hayamos podido acostumbrar como espectadores a esta precarización estética, ligada a la producción desprovista de medios y a unas historias que, en buena medida, han apuntado a la cotidianidad: actores que se convierten en sus propios operadores de cámara, maquilladores y atrezzistas, dirigidos a distancia y con contados recursos. ¿Conlleva esto una homogeneización de la imagen, una simplificación de las narrativas, tal vez? Estamos aún demasiado cerca del meollo para medir el impacto, si lo tiene, de esta dinámica, pero sí la podemos medir en términos cuantitativos, listando los ejemplos que hemos podido encontrar en la televisión lineal y en plataformas durante los últimos tres meses.
'Hecho en casa' (Netflix)
La antología de Netflix ha sido la última en anunciar su salida al mercado, que tendrá lugar el próximo 30 de junio. En contrapartida, cuenta con el aval de tener entre sus créditos a nombres de alto calibre: Pablo Larraín, Ladj Ly, Paolo Sorrentino, Kristen Stewart, Ana Lily Amirpour, Maggie Gyllenhaal, la directora de fotografía Rachel Morrison o Naomi Kawase están entre los artistas que han participado en esta iniciativa, consistente en narrar historias “personales y conmovedoras” sobre la experiencia de la vida en cuarentena en distintas partes del mundo.
Producida por The Apartment Pictures (del grupo Fremantle) y Fabula, se describe como “una celebración de la artesanía de la cinematografía y el poder de la creatividad ante una pandemia mundial”. Todas ellas están rodadas con el material técnico disponible en las casas de las personas implicadas, una necesidad convertida casi en gimmick, como ha quedado demostrado en las producciones que se adelantaron a esta en el tiempo.
'En casa' (HBO)
La propuesta de Netflix se acerca a la que había propuesto con anterioridad HBO en España: recurrir a cinco firmas personales de la industria cinematográficas para componer una antología bajo parámetros similares. Leticia Dolera, Rodrigo Sorogoyen, Paula Ortiz, Carlos Marques-Marcet y Elena Martín fueron las elegidas para elaborar una tanda de historias autónomas, marcadas por las limitaciones impuestas por el confinamiento para mitigar la propagación del coronavirus en nuestro país: el equipo de rodaje se reducía al mínimo (un móvil y algunos accesorios), mientras que el calendario de rodaje se estrechaba al máximo (transcurrieron solo siete semanas desde el anuncio oficial del proyecto hasta su lanzamiento en la plataforma, el 3 de junio). En la producción, Caballo Films y Warner Bros ITVP.
Tras servir España como fase 1 particular del proyecto, HBO Europe exportaría la idea a Polonia, bajo el título At Home (W domu), con las mismas restricciones técnicas pero con una mayor muestra poblacional: 16 directores para un total de 14 episodios.
'Diarios de la cuarentena' (TVE)
Sin embargo, la que se colocó en la vanguardia de este frente de la ficción casera no fue sino Televisión Española y, de forma particular, Morena Films, responsables de Diarios de cuarentena. A diferencia de las anteriores, se planteaba como una estructura de sitcom clásica con continuidad entre sus episodios y tramas entrelazadas. Álvaro Fernández-Armero y David Marqués eran el dúo creativo detrás de un proyecto que se presentaba como “deudor de Seinfeld” y que enroló a parejas de actores y convivientes como Carlos Bardem y Cecilia Gessa, José Luis García Pérez y Cristina Alarcón o Montse Pla y Víctor Clavijo.
En total, ocho episodios emitidos en el prime time de los martes de La 1 entre abril y mayo, esta estableció el modelo de trabajo en la coyuntura del encierro por el coronavirus: cada pareja recibía un iPhone para grabar, un micrófono y un trípode para grabar sus escenas, que después enviaban a sus creadores, quienes previamente habían dado indicaciones técnicas. “Ensayamos y dirigimos por Skype, pero no vemos exactamente cómo encuadra cada uno el plano”, explicaban.
Una dinámica que, si bien no gozó de números relevantes por parte de la audiencia (el producto recibiría más titulares por las críticas del PP contra el proyecto y en particular por la participación de Bardem), sí ha propiciado que otros países se asomaran desde sus ventanas catódicas. No en vano, TVE anunció con orgullo la venta del formato para su adaptación en Francia y México, así como negociaciones avanzadas en países como Estados Unidos, República Checa y Sudáfrica para hacer lo propio.
'Relatos con-fin-a-dos' (Amazon)
Curiosamente, el esfuerzo de Amazon por integrarse en esta vertiente de producción cuenta con varios nombres ya presentes en Diarios de la cuarentena. No en vano, se trata de una idea original de Cecilia Gessa junto a Álvaro Longoria que produce de nuevo la ya curtida Morena Films, y en la que Carlos Bardem se acredita como guionista de una de las entregas. Las conexiones no acaban aquí: Fernández Armero participa como responsable de uno de los cinco Relatos con-fin-a-dos de la plataforma, como también lo hace Fernando Colomo, que había participado en la serie de La 1 como actor.
La experiencia en TVE sirve como campo de pruebas para esta otra ficción que sí asume la estructura de antología de episodios autónomos y autoconclusivos, con una duración variable de 15 a 20 minutos, y en la que las estrellas participantes ejercen de hombres y mujeres orquestas encargadas de todos los departamentos básicos de un equipo de trabajo. Y si es cuestión de citar nombres, hay algunos “galácticos”, si se permite la broma: es el caso de Isco Alarcón, futbolista del Real Madrid, que debuta como actor junto a su pareja Sara Sálamo; pero también del alumno de Élite Álvaro Rico, de Luis Tosar, Manuela Velásco y Alberto Ammann.
Aunque anunciada con anterioridad a la de Netflix, Relatos con-fin-a-dos será, de momento, la última en llegar, el 3 de julio.