Sánchez choca con la aritmética para renovar RTVE: ERC exige diálogo “sin renuncias” en Catalunya y el PP reivindica su mayoría
Sacar adelante el decreto para la renovación de RTVE se le está complicando a Pedro Sánchez mucho más de lo que esperaba. Las cuentas del presidente no salen por las exigencias que ha puesto ERC, que condiciona su apoyo a la aceptación del Gobierno de un diálogo sin renuncias en Catalunya. En su comparecencia con el primer ministro portugués, Antonio Costa, en Lisboa, Sánchez hizo un llamamiento al resto de partidos políticos y subrayó que la regeneración en los medios públicos precisa de dos “elementos fundamentales, la mayoría parlamentaria y el apoyo de los trabajadores”. El presidente del Gobierno apeló “a la responsabilidad y generosidad de los grupos para anteponer los objetivos de regeneración a los legítimos que pueda tener cada uno de los partidos”, después de que se frustrase por falta de apoyos en el resto de los partidos y entre los trabajadores la candidatura del periodista de eldiario.es, Andrés Gil, el nombre que el Gobierno había pactado con Podemos.
El PSOE mira ahora al PP, de quien trató de blindarse y que ahora abre la puerta a apoyar el cambio en la corporación a cambio de exigentes condiciones: quiere seis consejeros frente a los cuatro que le ofertan los socialistas.
Este lunes el Congreso ha rechazado, como estaba previsto, la designación del nuevo consejo de administración para lo que necesitaba dos tercios del hemiciclo; pero los partidos que lo llevaron a La Moncloa se han mostrado muy alejados de repetir su apoyo en la próxima votación, que será este miércoles. Por eso el PSOE mantiene abierta la puerta de la negociación con el PP.
Los populares, que ya han anunciado que recurrirán el decreto aprobado por el Gobierno por considerarlo anticonstitucional, sí están dispuestos a entrar en la renovación del Consejo de Administración de RTVE esta misma semana y fuentes del partido reconocen que han establecido una línea de conversación con el PSOE, si bien este lunes por la tarde, después del pleno, no hay indicios que hagan vislumbrar ese acuerdo. “Estamos estudiando qué posibilidades hay de lograrlo”, aseguraba a última hora el portavoz popular en la Comisión Mixta de control de RTVE, Ramón Moreno.
El PP parte de una propuesta que, a priori, parece complicada de aceptar por el Ejecutivo de Pedro Sánchez: quiere la mayoría absoluta en el consejo, seis de diez representantes. Y lo justifican apelando a su condición de primera fuerza en el Congreso y a su mayoría en el Senado. Alegan los populares que el PSOE ya contaría con “el voto de calidad” del presidente de la corporación. Por el momento, el PP no establece a ningún candidato como condición sine qua non para el acuerdo. “Los diez son igual de importantes”, asegura Moreno.
“Tenemos el mandato que nos ha dado la ciudadanía, que es representar su voz y su presencia con el voto, y no estamos ni para salir corriendo, no para huir, ni para no participar. Como grupo mayoritario tenemos que estar a la altura de las responsabilidades incluso cuando alguien, como en este caso el Gobierno, perpetra este tipo de actuaciones inconstitucionales e improcedentes”, aseguraba, por su parte, el portavoz popular en el Congreso, Rafael Hernando.
Los socialistas se muestran confiados en recabar los apoyos para la mayoría absoluta que necesitan para la renovación de los consejeros de RTVE, así como para la elección posterior del presidente. A pesar de que el reparto inicial con Unidos Podemos otorgaba a Pablo Iglesias la capacidad de propuesta, ha sido el PSOE finalmente el que ha puesto sobre la mesa el nombre de Tomás Fernando Flores, que el grupo confederal ha acabado apoyando. El motivo que explican desde el grupo de Iglesias para renunciar a proponer otro nombre es que había perdido la esperanza en que se lo apoyaran, según fuentes de la formación.
Podemos apoyaría un acuerdo que alcancen PSOE y PP
En la reunión del grupo socialista, la portavoz, Adriana Lastra, ha asegurado que la negociación sigue abierta aunque diputados presentes se han quedado con la idea de que era más factible el acercamiento al PP que a otras fuerzas como ERC. “Va a haber que negociar y mucho”, comenta un parlamentario.
Desde la dirección socialista dicen que todas las puertas están abiertas. “Hemos dicho que queremos acordar con todos”, aseguran fuentes del PSOE que no quieren, no obstante, mostrar sus cartas. Unidos Podemos quiere que el PP esté en el consejo de administración en base a su realidad parlamentaria y aseguran que si el PSOE cierra un acuerdo con el PP Unidos Podemos lo respaldará.
Además, los socialistas insisten en que nada está cerrado e insinúan que el miércoles podrán tener más apoyos de los que han tenido este lunes. De hecho, apuntan a una posible abstención de Compromís y PDeCAT. Los independentistas catalanes han reconocido no tener ningún problema con los nombres propuestos.
Más complicado ven el camino de ERC, ya que lleva varios días amenazando con no sacar adelante el decreto si el Gobierno no acepta su petición de “diálogo sin renuncias ni condiciones previas” sobre Catalunya. Los socialistas lo rechazaron en una moción que el grupo que pilota Joan Tardà llevó al Congreso el pasado martes. “Nunca hemos hablado de negociación; siempre de diálogo. Quizá tarde meses pero tiene que asumir que se puede hablar de todo”, aseguran desde ERC. Incluso esa distinción entre negociación y diálogo la destacan en el PSOE como importante a la hora de alcanzar un posible entendimiento. Tardà ha dejado la pelota en el tejado de la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, que comparece en el Congreso este martes.
