De “Accidente”, nada: así es la nueva serie que ha estrenado Telecinco
La ficción española sigue empeñada en mantener el nivel que desde hace años demuestra no sólo en clave nacional, sino también en ámbito mundial. Este martes se vive un nuevo duelo en la cumbre con los estrenos de El Accidente en Telecinco y de Traición en La 1.
Mientras TVE apuesta por un drama familiar protagonizado por Ana Belén, la cadena de Mediaset se lanza con esta ambiciosa trama criminal e hipnótica en la que nada es lo que parece, ambientada en un hábitat rural y reconocible, y encabezada por Inma Cuesta y Quim Gutiérrez.
En la presentación y visionado de la serie ante los periodistas, Vertele pudo ver el primer capítulo de El Accidente, y bastó para apreciar su tono intrigante, la cuidadísima fotografía y un elenco que cuaja a la perfección con cada uno de sus papeles.
Inma Cuesta, reina también en El Accidente
Una de las fortalezas de El Accidente es precisamente su punto de partida, su late motiv. Un hombre (Quim Gutiérrez, como José Espada) al que le marchan bien los negocios y su vida familiar, que de repente desaparece tras estrellarse el avión en el que supuestamente viajaba.
Desde ese impacto inicial, la lucha de su mujer (Inma Cuesta, como Lucía) por averiguar dónde está su marido articula una trama en la que el sufrimiento y la desesperación de la protagonista inunda con éxito todo el desarrollo, y vuelve a demostrar que Inma Cuesta domina cualquier tipo de registro.
La química entre ambos protagonistas da credibilidad en pantalla a su “vida familiar”, si bien, precisamente por ese hecho que desencadena la trama, se disfruta durante poco tiempo.
Los dos están muy bien rodeados por secundarios de lujo entre los que resaltan el hermano de Juan Espada (Alain Hernández, como Juan Espada) y la vecina Pilar Gómez (como Isabel), que pone un brillante contrapunto de humor e ironía que la serie agradece en cada una de sus intervenciones. Del pequeño Hugo Fuertes (Samuel en la ficción, hijo de Quim Gutiérrez e Inma Cuesta) tendremos tiempo de hablar en el futuro, porque su carrera apunta tan alto que apenas merece la pena analizarle como secundario.
La meticulosidad del policía Jorge Bosch (como Ramón), la rigidez de Joaquín Notario (Raimundo, padre de Lucía), la maldad de Eusebio Poncela (João Ferreira) y el atractivo de Berta Vázquez (María), entre otros, conforman un reparto con pocas pegas.
Acertado viaje por la vida rural
La factura técnica, a la que como decimos nos han (mal)acostumbrado las ficciones españolas, vuelve a destacar con una excelente fotografía de entornos rurales y cercanos para el espectador ambientada en Zarza, un pueblo ficticio cerca de la frontera con Portugal. Un cuidado que consigue superar la mala impresión inicial que presenta la serie con el primer “accidente” que muestra, que no es de avión, y en el que los efectos especiales son más efectistas que especiales.
Respecto al guión, destaca en los diálogos y en los acertados puntos cómicos de la vecina Isabel, aunque por momentos resulta un tanto inconexo por trasladar la acción a diferentes puntos y olvidarse de la conexión directa entre sus personajes, generando una cierta sensación de anacronía que no acaba de resolverse ni explicarse.
También puede alabarse la escueta introducción musical, atinada en momento y elección con El Canijo de Jerez, para alegrar cuando todavía hay momentos para reírse en la serie e incluso Inma Cuesta se anima a cantar, antes de que todo cambie.
Horario, ritmo y duración, sus grandes pruebas
Pero la gran prueba de El Accidente no será ni superar ese primer impacto negativo de sus efectos especiales (algo que logra sin problema), ni desarrollar su trama sin que resulte a veces inconexa, ni intentar evitar abusar de la tensión sexual. Será, como todas las series, el horario.
El primer episodio de la ficción se alarga durante 90 minutos, lo que sumado a las horas a las que empieza el prime time, augura algunas cabezadas e incluso que a más de un espectador le pueda el sueño. Por suerte, los demás capítulos tendrán menor metraje.
En este sentido, el ritmo narrativo de la trama tampoco ayuda. Pese a que se presenta con momentos de tensión y acción, el desarrollo acaba siendo un tanto lento, algo que el propio creador Daniel Écija explicó así: “Nos permite presentar todo y llevar un tempo de avance constante, lento pero seguro. Nos apetecía y era un reto. En las ficciones se reflexiona poco, y esta serie es de reflexión”.
Con dosis de reflexión, mucho de intriga y un claro éxito interpretativo encabezado por Inma Cuesta, El Accidente se presenta como una buena apuesta de Telecinco para retomar una senda que había abandonado en sus últimas ficciones.