Gervasio Sánchez muestra su 'Álbum de posguerra': “Pocos años de violencia pueden ser décadas de dolor”
“Las guerras no acaban cuando dice Wikipedia, sino cuando se superan sus consecuencias. A veces años, a veces décadas, y a veces nunca”. Gervasio Sánchez es uno de los reporteros de guerra con más conflictos a sus espaldas. Durante cuatro décadas, el periodista y fotógrafo acumula vivencias e imágenes en cuatro continentes, mientras informaba y vivía en primera persona enfrentamientos armados en América Latina, Europa, África y Asia.
Desde este martes 27 de abril, los abonados a Movistar+ pueden ver Álbum de posguerra, un documental en el que Gervasio Sánchez se reencuentra, 25 años después, con las personas a las que fotografió durante el asedio de Sarajevo, durante la Guerra de Bosnia. Al otro lado del teléfono, nos confiesa que con esta obra audiovisual siente cómo salda una deuda:
“Me siento obligado a conocer qué ha pasado con los protagonistas de mis trabajos, por los cuales me han dado premios. Me he convertido en alguien conocido gracias a estos protagonistas. Me parecería inmoral no buscarles, me siento moralmente obligado a buscarles y saber qué ha pasado con ellos”, nos cuenta vía telefónica desde la playa de La Concha, tras la presentación a la prensa del documental en el marco del Festival de Cine de Derechos Humanos de San Sebastián.
Álbum de posguerra se convierte de esta forma en una deuda saldada por el periodista y fotógrafo, que cubrió la guerra durante tres años y medio, y que desde entonces ha mantenido una estrecha conexión con el país. En sus posteriores viajes se dio cuenta de cómo “el impacto emocional del conflicto estaba muy presente, sobre todo en los más jóvenes”. Y por ello “decidí que esos niños que habían protagonizado mis fotografías durante la guerra cuando tenían entre 5 y 14 años, me interesaban para saber cómo habían evolucionado sus vidas y qué había pasado con ellos”.
Pensando en ellos, Gervasio Sánchez tuvo clara la idea de este documental: “Lo que he querido es recuperar las historias de estos niños y adolescentes para que ellos cuenten qué significó esa guerra. Para darnos cuenta todos de que cuando empieza una puta guerra, sus consecuencias van a ser para siempre”.
“Compensar la balanza anímica con historias de vida”
El resultado final, este Álbum de posguerra que desde este martes puede verse en Movistar+ tras viajar gracias a Al Jazeera y la televisión bosnia, nace desde la propia experiencia. No sólo la de Gervasio Sánchez, también las de Àngel Leiro y Airy Maragall (que dirigen y guionizan la obra) y la de Stephanie von Lukowicz (que la produce para Lukimedia). Los tres conocen bien Sarajevo, pues han vivido en la ciudad tras la guerra.
El periodista se muestra satisfecho con esta forma de “compensar la balanza anímica con historias de vida” tras tantas experiencias de conflicto: “La guerra es pura oscuridad, brutalidad, violencia, destrucción de puentes de convivencia, muertos, desastres económicos, desastres psiquiátricos y psicológicos”.
Su exitosa carrera le ha llevado a reflexionar, y a comprender que “uno de los problemas graves de los periodistas es que nos olvidamos de las historias en cuanto salen de la primera página de un periódico. Vivimos tan al día, que perdemos conciencia de que las historias continúan aunque nosotros no tengamos ningún interés”. Y por eso él ha querido reflejarlo con historias que sí han continuado.
Ejemplifica en Edo, al que conoció hace treinta años cuando era un niño de apenas cinco que le “enseñó a entrar en la biblioteca de Sarajevo destruida sin matarme”. Tras reencontrarse en cada viaje del periodista, puesto que Edo vivía y sigue viviendo al lado de la biblioteca, su relación se prolonga hasta la actualidad y para él es “casi como si fuera un hijo”. Una muestra de cómo los protagonistas del documental, al igual que Edo, “formaban parte de mi memoria visual y periodística, y me han dado muchas alegrías”.
Mirar al pasado para aprender en el futuro
Usando su documental como ejemplo, le preguntamos si de él hay que extraer una moraleja o conclusión. Y empieza por dejar claro la principal: “Para no entrar en guerra, no hay que destruir los puentes de convivencia entre las comunidades”.
Recordando lo que él ha visto y vivido otras veces, lamenta “lo fácil que es manipular a la población, contarles mentiras sobre la historia de cada país, cuando dicen que algo pasa porque me maltratan desde otro lado, que los otros son los culpables”, y advierte “una vez empieza la guerra, ya no hay vuelta atrás”.
Por ello, Gervasio Sánchez espera que Álbum de posguerra “sirva para reflexionar, sobre todo a los más jóvenes, de que hay que tener mucho cuidado con 'jugar' a guerrearnos. Los insultos, el ninguneo, la prepotencia, la chulería, el intentar destruir las relaciones...”, lamenta, añadiendo que no es una realidad lejana: “No voy a hablar de lo que pasa en España y en Cataluña, porque a buen entendedor pocas palabras bastan. Pero podemos hablar de lo que pasa en Siria”.
Desde su experiencia, adelanta que “esos niños que llevan 10 años sufriendo las consecuencias de la guerra, dentro de 25 años tendrán el resentimiento de lo que ha pasado en su país”. Y zanja: “Si lo trasladamos a Afganistán, Irak, Yemen, Eritrea, el Congo, o Chad, a cualquier país, nos encontraremos lo mismo: que pocos años de violencia de la guerra pueden ser décadas de dolor. Y eso es lo importante”.
> 'Álbum de posguerra' puede verse desde este martes 27 de abril en Movistar CineDoc&Roll (dial 31) y disponible en el servicio bajo demanda de Movistar+.