'GH VIP 8' se sacó de la manga un cambio en la repesca por Luitingo y expulsó a una concursante que sale a deber
GH VIP 8 pareció este jueves dar palos de ciego durante la emisión de su décima gala en Telecinco. El reality presentado por Marta Flich improvisó al dar un giro a la mecánica de su proceso de repesca que no había anunciado. Después de una semana votando y luchando por meter a su concursante deseado de nuevo en la casa, los espectadores vieron cómo todo esfuerzo había sido en balde, ya que al programa de Mediaset no le importó a última hora meter también con calzador al participante menos votado por la audiencia.
El pasado jueves, Albert Infante, Pilar Llori y Luitingo, los tres expulsados más votados en una selección previa, regresaron provisionalmente a Guadalix de la Sierra para intentar convencer al público de que debían ser los concursantes repescados. Marta Flich explicó en varias ocasiones que sólo dos de ellos conseguirían de nuevo una plaza en el reality, aquellos dos participantes que contasen con el favor del respetable, que durante siete días se implicó en el proceso votando a través de la app gratuita -menos mal- del formato.
La repesca de Albert se efectuó el pasado domingo, durante el debate presentado por Ion Aramendi, con Pilar y Luitingo disputándose supuestamente la última plaza que la dirección de GH ponía en juego en la gala emitida este jueves en Telecinco. En ella, la valenciana se convirtió en la segunda repescada al imponerse al sevillano por sólo un 2% de los votos. Lo que no esperaba nadie es que el programa se sacase de la manga una vida extra para Luitingo de la que no se había informado en ningún momento.
Jéssica Bueno dio una vida extra a Luitingo
Tras el reingreso de Pilar, Marta Flich anunció por sorpresa que el andaluz también podría volver a convertirse en concursante de pleno derecho esa misma noche. El reality puso la decisión en manos de Jéssica Bueno y Pilar, sus supuestos intereses amorosos en la casa, que debían decidir si permitían también la repesca de Luitingo a cambio de 5.000 euros del premio final que consiga el ganador. Y mientras que Pilar se negó en rotundo, Jéssica Bueno acabó aceptando, alegando que Luitingo es uno de sus mayores apoyos en el concurso.
No lo dudó demasiado Jéssica, que vio como la segunda oportunidad para Luitingo tenía un precio más que asequible respecto a otras decisiones que se han tomado durante las últimas semanas. De esta manera, GH VIP se aseguraba la continuidad de su culebrón, con los tres miembros de un forzoso triángulo amoroso -tras la confesión de Luitingo sobre sus repentinos sentimientos hacia Jéssica tras romper con Pilar- dentro de la casa.
La maniobra del programa de Telecinco cogió a los espectadores con el pie cambiado, ya que en ningún momento se había explicado que podían ser tres los participantes finalmente repescados. De hecho, en el arranque de la edición, se anunció que sólo había una vida extra para los expulsados: la que se concediese al expulsado al que uno de sus compañeros en Guadalix decidiese salvar tras su eliminación a cambio de 25.000 euros del premio. Después de varias semanas descartando esta opción, Zeus decidió ejecutar su poder para salvar a Susana.
Susana, expulsada otra vez a las primeras de cambio
Precisamente, la canaria fue la concursante expulsada durante la décima gala tras perder su duelo contra Michael. La audiencia volvía a no tener piedad con Susana, echándola otra vez a la calle a la primera oportunidad que tuvo después de su regreso a Guadalix. Así, los 25.000 euros que Zeus había gastado del premio final terminaron de caer en saco roto, ya que la modelo no logró revertir la imagen que los espectadores tenían sobre ella.
A su llegada a plató, Susana se topó además con las críticas de una amiga de Zeus que le echó en cara cómo lo había tratado en la convivencia: “No le has hecho brillar. Le has quitado el sol... Siempre le culpabas de todo. No es sano para ninguno de los dos. No me ha gustado el comentario de si la tenía pequeña. Si él supiese todo, creo que no le gustaría nada”, le dijo la defensora del hijo de Sara Montiel. “Lo que yo he vivido en esa casa es lo contrario a lo que se ha vivido fuera”, respondió la joven, que al comienzo de la noche se había llevado una bronca de Marta Flich por acusar al programa de dar una imagen de ella que no se correspondía con la realidad.
Finalmente, los concursantes se sometieron a una nueva ronda de nominaciones en las que todos los concursantes (menos los repescados, inmunes esta vez al estar recién llegados a la casa) subieron a la palestra. Uno a uno, los participantes debían repartir sus votos, que podían ser de 3, 2 y 1 punto en función del nivel de picante que estaban dispuestos a soportar al comerse una serie de dulces marroquíes. Tras las votaciones, Michael, Carmen, Laura Bozzo, Naomi, Jéssica y Zeus, todos los concursantes en liza, resultaron nominados. Sin embargo, el hijo de Sara Montiel, que tenía el poder de la salvación, decidió sacar a Jéssica de la lista.