Una semana después de la tragedia de la DANA y con las terribles consecuencias cada vez más claras, Gran Hermano decidió romper con una de las reglas del reality y dar información del exterior a los concursantes: “Dada la dimensión de esta tragedia hemos considerado que en la casa deben saberlo”, explicó Jorge Javier Vázquez.
Seguidamente, el presentador aparecía en la pantalla del comedor, frente a los inquilinos y les pidió atención: “Debo informaros de algo importante, una noticia que no querría daros, pero que lamentablemente ha sucedido y dada su magnitud hemos considerado que debéis conocer”.
Todos ellos se quedaron con la boca abierta al ver las sucesivas imágenes de los informativos, en los que mostraban la catástrofe histórica, las inundaciones, los daños materiales y el relato de las consecuencias derivadas días después.
Para tranquilizarles, el presentador les aseguró a todos que sus familias estaban bien, pero que el “el país está profundamente conmovido”. Al pronunciar tales palabras, se le quebraba la voz y pedía “perdón” porque no podía continuar. En plató, algunos de los expulsados y familiares también estaban con lágrimas en los ojos.
Segundos después, el presentador retomaba el discurso para agradecer a todas los cuerpos del Estado y los voluntarios por “dejarse la piel en ayudar a los afectados”. Los concursantes se levantaban para aplaudir y también lo hacía el público de plató.
Antes de cortar la conexión, Jorge Javier quiso sincerarse con la audiencia: “En medio de tanto horror, en estos momentos uno a veces se siente muy ridículo trabajando. Con todo lo que está pasando en este país, es un sentimiento al que tenemos que hacer frente. Lo comparto con vosotros, me siento muchas veces ridículo, ojalá de verdad sirva para que en algún momento os podamos sacar una sonrisa y no os olvidéis que estamos a vuestro lado”, zanjó muy emocionado.