Por fin hemos podido ver la actuación completa de Blanca Paloma en Eurovisión, con un nuevo plano cenital
Blanca Paloma sigue perfeccionando su EaEa de cara a la final de Eurovisión 2023. Tras la celebración de la primera semifinal, con la clasificación de los dos grandes favoritos, la representante española ha vuelto a subirse al escenario del M&S Bank Arena de Liverpool para realizar su tercer ensayo en tierras británicas.
Esta nueva prueba, la primera que la prensa acreditada -también verTele desde Liverpool- ha podido ver al completo, ha supuesto su debut con público en las gradas durante el primer ensayo general de la segunda semifinal. Y la respuesta de los periodistas ha sido unánime, reaccionando con una sonora ovación a una actuación que termina en alto.
Como es habitual en la artista nacida en Elche, ha firmado una interpretación perfecta a nivel vocal. En lo que a la realización se refiere, como ya habíamos explicado, la actuación mantiene el concepto mostrado en el Benidorm Fest 2023, con algunos cambios obligados -como la ausencia del icónico plano cenital del inicio- y novedades que potencian la segunda parte de la canción.
Blanca Paloma arranca su actuación dentro de un círculo de invocación que recrea el mantón que le dejó su abuela Carmen, quien le transmitió su pasión por el flamenco. Una imponente estructura de flecos de 3,5 metros de altura envuelve a la artista y a las bailaoras que la acompañan en un abrazo que rememora los mantones de manila que usaban sus abuelas.
A continuación la artista canta de rodillas con una enorme luna a sus pies. Una imagen que ya no se observa desde el cielo debido a las limitaciones técnicas del escenario de Liverpool, y que se ha sustituido por un plano diagonal.
Tras salir del círculo de flecos, Blanca Paloma canta con fuerza junto a sus palmeras para acabar dirigiéndose a otra zona del escenario, donde un haz de luz se le refleja en la palma de la mano creando un efecto mágico y diferencial respecto a su interpretación en el Benidorm Fest.
Finalmente, y después de lanzar la 'flecha' simbólica con su gesto de arquera, se dirige al segundo escenario del estadio para terminar subida a un podio, y rodeada de las cinco mujeres que le acompañan. Es ahí donde se introduce uno de los mayores cambios de la actuación con la incorporación de un nuevo plano cenital antes del apoteósico cierre.