Jorge Javier Vázquez vuelve junto a Mila Ximénez a 'Sálvame' con pullas a quienes criticaron sus vacaciones
El martes 1 de septiembre ha supuesto el regreso de Jorge Javier Vázquez y Belén Esteban a Sálvame después de las vacaciones de verano. Pero no solo de estos dos: también Mila Ximénez, que abandonó los platós de Mediaset en junio tras anunciar que se le había diagnosticado un cáncer de pulmón, también ha reaparecido para recuperar su silla como colaboradora habitual.
La granadina ha vuelto con indirectas hacia quienes habían cuestionado que volviera a su labor después de tres meses y en pleno tratamiento. “Entré una depresión que no podía ni levantarme de la cama. Por eso me he puesto a trabajar. Pido perdón si tengo que disculparme por el hecho de que con mi tratamiento no me vaya a caer el pelo, por intentar superar la enfermedad y por no dar lástima”, decía en su primera aparición, pasadas las 17:10 horas, acompañada por Vázquez, que también regresaba con otra pulla, en su caso motivada por razones ideológicas.
“¡Sale más a cuenta tener una cuenta en Suiza!”
“Para futuras vacaciones, me gustaría que dijeran a la gente de izquierdas a qué sitios podemos ir y a cuáles no, hasta cuándo me puedo gastar...”, se quejaba, por los ataques que ha recibido también tras trascender imágenes de su destino de vacaciones: “La de hostias que me han caído... ¡sale más a cuenta tener una cuenta en Suiza!”, bromeaba.
Desde que aparecieron en pantalla y hasta casi las 18:00 horas, Vázquez y Ximénez estuvieron aislados del resto del equipo, escenificando el programa un yate donde el primero ha entrevistado a la segunda sobre su estado y el tratamiento. “Nos quedan tres sesiones de quimio, y luego seguiré con la inmunoterapia”, explicaba, tratando de contener emoción. “La mejor noticia es que no hay noticia”, decía sobre la progresión positiva del tratamiento, si bien puntualizó: “Voy a vivir toda mi vida con ello”.
Belén se reafirma en sus críticas sobre la gestión de la covid
Hubo que esperar a la segunda hora de emisión para volver a ver a Ximénez y Vázquez. Antes, eso sí, sí veíamos a Belén Esteban, con la que arrancaba el magacín vespertino. Detrás de un croma que simulaba la terminal T-4 del aeropuerto de Madrid-Barajas, Lydia Lozano conversaba con la “princesa del pueblo” sobre algunas de las polémicas que había protagonizado durante la época estival. El entorno representado aludía a las imágenes captadas por las cámaras días atrás, nada más bajarse de un avión, para quejarse de la falta de controles contra el coronavirus en el recinto.
“Yo dije lo que vi y no me arrepiento”, aseguró. “Que la gente haya puesto fotos del cumpleaños de mi marido del 7 de julio, o que diga que he tirado fotos con fans... Todo son ataques”, añadió, antes de indicar que no iba a volver a hacer declaraciones relativas a temas políticos en plató. Tampoco tenía intención de tocar esos mismos temas con el presentador del espacio, después de la bronca que protagonizaran en julio a cuenta de la gestión de la crisis de la covid-19 en España.
