'MasterChef Celebrity' pasó de las sonrisas a las lágrimas con su nuevo expulsado, que celebró su propia marcha
En MasterChef Celebrity empezaron 15 aspirantes famosos y ya solo quedan 6 en cocinas, tras la expulsión de un Jorge Cadaval que casi tira la toalla en mitad de la prueba de eliminación.
Anteriormente, el concursante ya había mostrado su inseguridad en el programa al enzarzarse con Laura Londoño por una doble capitanía en la que, según él, ella no había estado a la altura. “Creo que tiene problemas él y hoy me ha tocado pagarlos a mí”, decía la actriz. Y es que el humorista no vivió su mejor noche y hasta acabó celebrando la decisión de expulsarle.
Todo ello en una entrega en la que las celebrities se enfrentaron para conseguir el delantal dorado, viajaron a Málaga, donde fueron recibidas por Antonio Banderas y protagonizaron los clásicos duelos.
Primera prueba con amigos, exparejas y conocidos
En el primer reto de la noche, los aspirantes tuvieron que ser rápidos e intuitivos para llevarse el delantal dorado. Al llegar a las cocinas se encontraron con unos frigoríficos en apariencia iguales. Sin embargo, cada uno de ellos contenía alimentos diferentes, que fueron los ingredientes con los que pudieron cocinar un plato libre de alta cocina.
Los aspirantes se esmeraron al máximo por donar 4.000 euros a una ONG que escoja, pero también porque en la mesa se encontraron con algunos de sus mejores amigos: Álex Roca, las influencers Lola Lolita y Emi Huelva, el chef Bosquet, los toreros Finito de Córdoba y Miguel Abellán y las exaspirantes Terelu Campos y María Zurita.
Los propios amigos votaron como el peor plato el de Toñi y al mejor el de Laura Londoño. Mientras que la decisión de los jueces fue en la misma línea, alabando la elaboración de la actriz como “la más ordenada” y entregándole el delantal dorado.
Prueba de exteriores con la enemistad de todos hacia Laura
Antonio Banderas recibió a los aspirantes y al equipo en la azotea del Real Club Mediterráneo de Málaga, donde se ha embarcado en un proyecto gastronómico. Durante la prueba, el “premio” de Laura fue enfrentarse a la compleja doble capitanía de un equipo formado por Toñi, Álvaro y Jesulín (azules) y otro con Jorge, Daniel y Blanca (rojos).
Las celebrities tuvieron que preparar un menú diseñado por el equipo gastronómico de Banderas, que degustaron 60 personalidades de la vida social y cultural de Málaga, entre las que se encontraba el mismo actor.
Durante el cocinado, los dos equipos se desgañitaron llamando a la capitana. Tanto que Blanca le dedicó la canción 'Laura no está' con todas sus fuerzas. Álvaro no entendía sus indicaciones aunque decía que sí, Laura pedía más prisa, cuando el resto seguía pelando gambas. Ante tantas críticas, la actriz finalmente se enfadó y puso a cada uno a su lugar.
Tras servir todos los platos, llegó el momento de la valoración con los equipos echándole en cara a la capitana no estar por ellos. Sobre todo por parte de Jorge y Álvaro. Los jueces también señalaron los “errores garrafales en ambas cocinas” y Laura lamentó que fuera un problema de falta de actitud.
Con todo ello, el jurado decidió que los dos equipos “habían cometido errores garrafales” por lo que todos se iban a eliminación, excepto Laura que tenía el delantal dorado. Una decisión que aumentó la incomodidad de todos hacia la actriz, con los que ella se disculpó excepto con Daniel y Jorge.
Prueba de eliminación con retos muy reñidos
En la última prueba de la noche, el jurado sometió a los delantales negros a uno de los retos más exigentes de este programa: los duelos. Pero antes de empezar, Laura salvó a Blanca del cocinado.
Los otros cinco se prepararon para cocinar. La primera en seleccionar una campana fue Toñi y, tras ver la crema catalana, escogió a Daniel para batirse en duelo. Una elección acertada porque él no logró el resultado esperado y lo dejó crudo. Por lo que la presentadora se salvó y él continuó con los retos.
El siguiente reto consistió en elaborar lionesas y para ello, Daniel escogió a Jesulín para enfrentarse. Los dos lo lograron, bastante igualados, aunque el mejor resultado fue el del torero. Por lo que el tercer reto se lo disputaron Daniel contra Álvaro cocinando cuatro buñuelos de viento que salvaron al joven.
El último reto lo protagonizaron el jinete contra Cadaval que tuvieron que elaborar soufflés. Los dos empezaron bien pero hubo un momento en el que el humorista tiró la toalla, sin hacer lo que debía, sin luchar por mejorar el resultado. “Estaba en blanco, se me ha ido todo de la cabeza”, reflexionó Jorge que finalmente lo sacó como pudo.
Por todo ello, Pepe sentenció lo esperado: “El aspirante que no continúa en las cocinas es Jorge Cadaval”. Álvaro subió al balcón para ver cómo se marchaba uno de sus mejores apoyos en el talent.