El naturalista de la TV Luis Miguel Domínguez, en estado grave tras sufrir un ictus
El reconocido divulgador medioambiental y documentalista Luis Miguel Domínguez se encuentra ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) en un hospital madrileño tras haber sufrido un ictus el pasado sábado 18 de mayo. La información, avanzada por Europa Press, ha sido corroborada por la fundación que preside, Lobo Marley.
El realizador de premiados documentales como Amazonia, última llamada, Vietnam, vida tras la muerte o Tesoro del sur pasaba el día con unos amigos cuando se empezó a sentir indispuesto. Sus acompañantes reaccionaron rápido y pidieron con carácter urgente asistencia médica. Se encuentra en coma inducido y tras pasar satisfactoriamente las primeras 48 horas, las más críticas en esta clase de dolencias, se le ha ido rebajando la sedación.
A través de un comunicado, la asociación para la defensa del lobo ibérico explica que la situación del naturalista “es estable dentro de la gravedad”: “Está respondiendo favorablemente a las pruebas que se le realizan y sabemos que su fortaleza y vitalidad van a pesar mucho y muy positivamente en la balanza”, indican.
Más de 30 años de trayectoria en medios de comunicación
Uno de los más firmes herederos del legado comunicativo de Félix Rodríguez de la Fuente, Luis Miguel Domínguez atesora una trayectoria de más de 30 años, no solo como realizador (con su productora Avatar Wildlife Docs) sino como colaborador en diversos programas. Entre otros, Sabor a ti, La aventura del saber o Cuarto Milenio. En la actualidad, participa de forma habitual en Aquí la tierra, en las tardes de La 1. En la radio, ha sido director de espacios de divulgación y protección de la naturaleza en RNE, Onda Madrid, Cadena SER y M21 Radio.
Asimismo, es vicepresidente de la Asociación de Productores de Documentales de Historia Natural y ejerció de co-director de URBAN TV (Festival Internacional de televisión sobre ecología urbana) durante los años que se realizó en la Casa Encendida.
En los últimos años, no obstante, su principal labor se ha concentrado en la asociación Lobo Marley, ciudadanos por el Lobo y el Mundo Rural, fundada en 2012. “La plataforma surge por la radicalización de las posturas en contra de la existencia natural del lobo en nuestros ecosistemas y como parte de nuestra Biodiversidad principalmente por parte de algunos colectivos ganaderos que creemos han sido engañados por la Administración, que ha utilizado al lobo como cabeza de turco para silenciar los problemas que el mercado plantea a la ganadería”, puede leerse en su web.
