Los principales medios de EEUU se ofrecen a apoyar a la CNN en su denuncia contra Trump
El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha defendido que el presidente, Donald Trump, tiene derecho a decidir qué periodistas acceden a la Casa Blanca.
Una postura que llega tras la denuncia presentada por la CNN y por el periodista Jim Acosta al que le fueron retiradas las credenciales de reportero por enfrentarse públicamente al mandatario en una reciente rueda de prensa.
Tal comunicado ha provocado que los principales medios estadounidenses se ofrezcan a respaldar a la CNN en su denuncia contra la Casa Blanca.
Desde The Washington Post, hasta The New York Times y Fox News
La agencia Associated Press, los diarios 'The Washington Post' y 'The New York Times' o la cadena Fox News - la presencia de esta última llama la atención por ser uno de los principales defensores de las políticas del republicano- son algunos de los principales medios de Estados Unidos que se personarán como terceros interesados, los llamados 'amicus curiae', en la denuncia presentada por la cadena CNN contra la Casa Blanca por retirarle la acreditación a su reportero.
La cadena anunció el martes la presentación de una denuncia en un tribunal de Washington por una presunta violación de la Primera y de la Quinta Enmienda de la Constitución norteamericana: referentes a la libertad de prensa y de expresión y al debido proceso, por retirarle sus credenciales a su reportero Jim Acosta, que se enfrentó públicamente al mandatario en una reciente rueda de prensa.
El pulso dialéctico, en el cual Trump llegó a insultar al periodista tachándole de “persona terrible” y de “grosero”, concluyó con el veto a Acosta, al que la Casa Blanca acusó de agredir a una becaria que intentaba quitarle el micrófono para que no siguiese preguntando.
“Los reporteros deben de seguir ser libres de formular preguntas”
En un comunicado, los citados medios, junto con la agencia Bloomberg, la cadena NBC, 'Politico', 'USA Today' y otros grupos mediáticos y de defensa del trabajo periodístico, han defendido que “ya se refiera la noticia del día a la economía, la seguridad nacional, o el medio ambiente, los reporteros que cubren la Casa Blanca deben de seguir siendo libres de formular preguntas”.
Añaden que “es imperativo que periodistas independientes tengan acceso al presidente y sus actividades y que no se vete a los periodistas por razones arbitrarias”.
“Nuestras organizaciones informativas apoyan el derecho constitucional fundamental de preguntar a este presidente o a cualquier presidente”, subrayan anunciando que por ello se personarán como 'amicus curiae' “para apoyar la demanda de la CNN y Jim Acosta sobre la base de estos principios”.
La Casa Blanca defiende el derecho a vetar periodistas
La postura de los grandes medios estadounidense se conoce poco después de que los abogados del Departamento de Justicia hayan defendido que tanto el presidente como la Casa Blanca pueden “regular” a “discreción” el acceso de los informadores y de otros ciudadanos, al igual que tienen capacidad para “seleccionar a los periodistas a los que se concede entrevistas o a los que informa en ruedas de prensa”, informa la propia CNN.
La demanda presentada por la cadena de televisión incluye entre los demandados a Trump así como al jefe de gabinete de la Casa Blanca, John Kelly, la principal portavoz, Sarah Sanders, el 'número dos' de comunicación, Bill Shine, el director del Servicio Secreto, Joseph Clancy, y el agente que expulsó a Acosta el pasado miércoles.
La CNN ha explicado que su objetivo es llegar a un acuerdo con la Casa Blanca para que Acosta pueda regresar a su labor como reportero y que figure por escrito que no se le retirará en un futuro sus credenciales. La cadena ha advertido de que el castigo “podría ocurrirle a cualquiera”, en una advertencia contra las tácticas de la Administración.
Entre los argumentos en favor de la CNN figura una sentencia de un tribunal de apelaciones de Washington en la que se delimitan 'de facto' los argumentos que puede esgrimir el Servicio Secreto -responsable de la concesión de acreditaciones- para expulsar a un periodista de la Casa Blanca. En la práctica, el castigo se limita solo a casos de que exista una amenaza física para el presidente y su familia.