La primera jornada de ensayos de Eurovisión, celebrada el pasado domingo, estuvo marcada por la aparatosa lesión cervical que sufrió Mikolas Josef, representante checo en el certamen y uno de los grandes favoritos a la victoria final.
Un mal movimiento sobre el escenario del Altice Arena le llevó directamente al hospital, donde se descartó que sufriera lesiones de gravedad, aunque sí lo suficientemente importantes como para poner en riesgo su participación en el festival.
Ahora, pasados unos días, Josef ha querido transmitir tranquilidad a sus seguidores. En una de sus recientes stories de Instagram, recogida a su vez por la web ESC Daily, el joven cantante dice sentirse “mejor” de sus dolencias, añadiendo que ha recibido un “buen tratamiento” con analgésicos que le ha permitido “andar para coger mi comida de hoy”.
Además, ha informado que los doctores “están examinando el TAC para confirmar que la espina está bien y que la actuación puede seguir adelante sin riesgo para mi salud”. En este sentido, Mikolas dice que actuará pase lo que pase porque “hemos trabajado muy duro durante los últimos meses” y, por tanto, “dar un paso atrás ahora no es una opción”.
De cumplirse su objetivo, el cantante de 'Lie to me' estará en la primera semifinal, que se celebrará el 8 de mayo y en la que intentará hacer valer su privilegiado puesto en las apuestas, que le sitúan entre los 7 máximos favoritos a la victoria en la final del día 12.