El representante de Israel en 'Eurovisión 2022' acapara críticas en la segunda semifinal por su afán de protagonismo
Michael Ben David se quedó con las ganas de pasar a la gran final de Eurovisión 2022, pero no de enervar al respetable con su excesivo afán de protagonismo durante la segunda semifinal. El representante de Israel, que no pasó el corte con su canción I.M., dio la nota tras la actuación de República Checa, la última de los 18 semifinalistas que había en liza. En ese momento, la realización de Eurovisión conectó con Laura Pausini, Mika y Alessandro Cattelan, los presentadores de la gala, que se disponían a anunciar la apertura de las votaciones.
Sin embargo, Michael Ben David rápidamente se unió a ellos por sorpresa. El cantante israelí irrumpió en escena con una banderita de su país en una mano y una copa en otra, y no dudó en intentar dar sendos besos en la mejilla a Pausini y Cattelan. Ambos le siguieron el juego de buen grado, lo que dio más alas a nuestro protagonista para quedarse ahí, agitar su banderita y asentir paródicamente con la cabeza a las palabras de los presentadores.
La actitud del cantante no pasó desapercibida para el público, que la criticó sin miramientos en las redes sociales, hasta el punto de celebrar su posterior eliminación. “El tío de Israel es el ser humano más pesado que he visto en televisión”, señaló una espectadora. “No he visto en la historia de Eurovisión a un participante más pesado y busca focos que el de Israel”, comentó otro usuario. “Estoy segura que el de Israel se ha quedado fuera por cansino”, apuntó una tercera televidente.
A los más eurofans no les habrá pillado esto por sorpresa, pues Michael Ben David ya dio la nota hace unos días en la 'Turquoise Carpet' repartiendo besos entre el resto de participantes -incluida Chanel- y haciendo otros gestos destinados a acaparar el mayor protagonismo posible.