Vis a vis abona un terreno explosivo para rematar en su final de temporada
El penúltimo capítulo de la tercera temporada de Vis a vis ha allanado el terreno para lo que promete ser un trepidante capítulo final.
Las presas se han enfrentado a su destino en esta nueva entrega en la que todas están a punto de cerrar puertas para abrir ventanas.
(¡Cuidado Spoilers!)
Zulema y Altagracia, ¿cumplirán su acuerdo?
Como ya apuntó el capítulo anterior, Zulema y Altagracia descubrieron que podrían lograr sus objetivos si unían fuerzas más que si se enfrentaban.
Por lo que la funcionaria ayudó a frenar el traslado de la presa y esta entrega acababa con Zulema dentro del autobús para marcharse, y la trabajadora al volante del vehículo.
En el adelanto del nuevo episodio dejan ver a la presa fuera del transporte, por lo que todo parece que podría conseguir huir y dejar el dinero pactado a su “socia”.
Las chinas y Mercedes con su plan de fuga
Mercedes cumplió con su labor de infiltrarse en los planes de las chinas. De esta forma, la policía podría frenar la intención de las presas de huir de Cruz del Norte.
Pero la líder del grupo sospecha de Mercedes y para probar sus intenciones la obliga a fugarse con ellas. Algo que cambia la estrategia de la policía de forma radical y deja en suspense la trama.
Agridulce puesta en libertad de Antonia
Los momentos más sentimentales de la entrega los protagonizaron la salida de Antonia, con su despedida de Tere y la saeta de Saray.
La prisión dejaba salir a Antonia, lo que originaba alegría y tristeza entre las presas. Sobre todo para Tere, que cuando recogía su comida de la mano de Antonia, ambas corrían a abrazarse adelantándose a la nostalgia que sentirían cuando se separaran.
Este fue uno de los momentos más aplaudidos por los espectadores:
También se bañó en halagos la saeta que le dedicó Saray a su excompañera, mientras salía de la cárcel: “Hoy te vas gitana mía de este pozo de amargura, ve tranquila paso a paso camina sin prisa con los pies llenos de arena y cantando de alegría. Corre por esa playa por la que tú siempre corrías, con la cara llena de sal y en la cara una sonrisa”.