Por primera vez en más de tres décadas, no se televisó un partido de La Roja en la televisión española. El encuentro de clasificación para el Mundial 2014, que acabó en goleada para el conjunto de Del Bosque frente a Bielorrusia en Minsk, no fue emitido por ningún canal debido a las elevadas pretensiones económicas de la empresa propietaria de los derechos, la alemana Sportfive, como ya informamos.
El diario El Mundo publicaba un artículo ayer en el confirmaba que Mediaset España había negociado los derechos con SportFive. El grupo de Fuencarral envió posteriormente un comunicado el que negaba todo y acusando a Unidad Editorial de querer deteriorar “su imagen: ”La manifiesta intención de su titular de soliviantar a los españoles en contra de Telecinco, sin ningún intento previo de contrastar la información publicada, no puede sino responder a oscuros intereses de la editora del periódico, Unidad Editorial“, apuntaba Mediaset en su nota.
La operadora alemana exigió 25.000 euros para poder entrar al Dynamo Stadium de Minsk a las emisoras de radio. Una cantidad que todas las radios consideraron desorbitadas, por lo que decidieron emitir el choque desde sus respectivos hoteles.
SportTV, Al Jazerera y RCTI emitieron el encuentro
Los únicos espectadores que pudieron seguir el partido fueron los que recurrieron al satélite: la portuguesa SportTV, la indonesia RCTI y la catarí Al Jazerera sí ofrecieron el encuentro. Además, el canal panárabe sirvió de enlace para la mayoría de las páginas 'on line' que ofrecieron un 'streaming' sin pagar por los derechos (como 'rojadirecta.me', frombar.tv' y 'pirlotves.com). Estas webs' aprovecharon para enlazar por internet a cadenas que sí habían pagado, como es el caso de Al Jazeera, informa El Mundo.
CRÓNICA DEL PARTIDO
Pedro lidera a una España con un hat trick
La selección española de fútbol resolvió con insultante superioridad su visita a Bielorrusia (0-4) en la segunda jornada de clasificación para el Mundial de Brasil, un partido que se presumía complicado tras el sufrimiento en Georgia y que los hombres de Vicente del Bosque, aupados por el 'hat trick' de Pedro, convirtieron en un plácido trámite, recoge Europa Press.
Vicente del Bosque resolvió el rompecabezas defensivo, generado por las bajas de Puyol y Piqué, incrustando a Busquets en el centro de la zaga junto a Sergio Ramos. En lugar de mantener su habitual doble pivote, el salmantino cinceló un equipo más ofensivo con la entrada de un Cazorla que está asombrando en Inglaterra.
El resultado fue agradablemente positivo, ya que la pelota circuló rápidamente y, lejos del barroquismo de otras ocasiones, se advirtió mucha profundidad, ayudada por la adelantada defensa de los bielorrusos, que se vieron impotentes para frenar los puñales que penetraban, ya fuera por las bandas o desde el centro.
España encadenó tres ocasiones muy claras en los primeros diez minutos y convirtió la tercera. Primero fue Cesc, alineado como delantero mentiroso que se encontró con el poste tras un pase interior de Silva. Acto seguido, precisamente el canario marró un mano a mano cristalino enviando la pelota fuera y finalmente fue Jordi Alba, que recibió en fuera de juego un fino taconazo de Pedro, el que regateó al guardameta Veremko y marcó a puerta vacía.
Tras este arranque huracanado, la campeona mundial atemperó los ánimos, una vez constatado que Bielorrusia no era tan fiera como la pintaban tras la victoria del BATE Borisov ante el Bayern de Munich en la Liga de Campeones. Hasta que, a los veinte minutos, el primer movimiento de la sinfonía de Pedro cerró el partido. Silva encendió la conexión canaria y habilitó al azulgrana, que picó con suavidad hacia la red.
Desde la lejanía, el capitán Iker Casillas observaba el paseo de sus compañeros preguntándose si le tocaría intervenir, algo que nunca llegó a ocurrir en todo el partido. Fue una victoria plácida, solo sacudida por alguna patada a destiempo de los locales, como una al tobillo de Silva, quien por precaución dejó su sitio a Iniesta al inicio de la segunda parte.
Tras un largo periodo de transición, Pedro decidió redondear el marcador con dos mordiscos consecutivos a falta de veinte minutos. Primero recibió un pase en profundidad y le colocó una bella vaselina al portero rival y en la siguiente jugada completó su 'hat trick'. Cesc le robó la cartera a la defensa y le regaló el tanto a su compañero en el Barça, que regateó a Veremko saltándole por encima con el balón antes de posarlo en las mallas.
En el último cuarto hora, Del Bosque tuvo tiempo para dar descanso a Xavi y minutos de juego a Villa, que demostró estar preparado para jugar más tiempo y, de hecho, solo el larguero impidió que marcara. Además, entró Albiol con vistas a una posible inclusión ante Francia, el principal rival del grupo, que visitará el Vicente Calderón el próximo martes (21 horas) en el duelo que decidirá el liderato.