El singular mundo de Ana Obregón: 'Me fui de la tele porque quise yo'
Hoy domingo 16 de octubre llega a DKiss el formato estrella de su parrilla, 'Algo pasa con Ana'. Un docureality que pretende mostrar cómo es el día a día de Ana Obregón. Durante la presentación del formato, Obregón atendió a los medios de comunicación, entre ellosVertele, para hablar de éste y otros asuntos.
Durante la grabación de 'Algo pasa con Ana', ¿algún amigo te ha dicho que no quería o que no podía salir en el programa?
Para nada. Todo el mundo encantado. De hecho, la gente que sale, que son amigos íntimos, están todos encantados. Por ejemplo, me llevan a una clase de sexo tántrico y me voy con Juan Peña, el cantante, que es muy amigo mío. Y nada, todo el mundo encantado.
Cuando fuiste al programa de Bertín Osborne, ¿ya estaba este formato en marcha o se convirtió en un aliciente?
La primera vez que me ofrecieron asistir al programa de Bertín, dije un no rotundo. Pero después me convencieron porque se abordaría cómo es de verdad mi vida. Y no solo mi vida en casa, sino cómo es la vida de una actriz en general, cómo son los ensayos, cómo me voy al supermercado para comprar el pescado para mi hijo o cómo cuido de él, en todo. Bueno, él ahora ya es mayor, pero en la educación, en los consejos... Entonces, nada, me encantó.
Y por supuesto que me animó. Como la gente lleva tantísimos años viéndome en la tele bien interpretando personajes, presentando programas, corriendo por los aeropuertos... Entonces, es una forma de verte tranquila, en tu casa, y mostrando a la Ana de verdad, a la Ana normal. Bueno, la que intento ser pero no siempre se puede [sonríe].
¿Y en 'Algo pasa con Ana' de verdad has ido a hacer la compra?
De verdad que he ido a hacer la compra, ¡porque la compra la hago yo! [sonríe]. Y lo llevo fenomenal.
¿Y cómo piensas que te ve la gente antes y después del programa?
He descubierto tarde lo de las redes sociales -Instagram me he hecho hace poco, por ejemplo- y soy muy mala [sonríe]. Porque pienso: '¿y por qué voy a poner una foto si llevo luchando toda mi vida precisamente para que no me hagan fotos?'. Hay gente que ha empezado ahora o hace unos años y está encantada con Instagram, pero a mí me cuesta porque son 35 años de perseguirme con las fotos, razón por la que me cuesta un montón subir una cuando he rezado para que no me la hicieran. Pero bueno, a través de las redes te das cuenta del pulso que hay, de la gente, y siempre es muchísimo cariño y la gente te dice cosas como 'qué divertida eres' o 'qué buen rollo transmites' y entonces eso me encanta.
¿Te vamos a ver enfadada en el reality?
En algún momento sí, pero me enfado muy poco. La verdad es que intento siempre tener buen rollo. Si veis el programa, veréis que el primer capítulo es el más tranquilito, y a partir del segundo una verdadera locura.
¿Hasta qué punto se te olvida la existencia de las cámaras?
¡Todo el rato! Madre mía, si es que es horrible. Si de hecho ahora me he ido 10 días de vacaciones y los he aprovechado para estar con mis padres, y me miraba mucho y mi madre me preguntaba que qué es lo que hacía, y yo contestándole que tenía la sensación de que todavía llevaba el micro [ríe]. Se te olvida totalmente. Pero bueno, que tengo la experiencia de haber estado 35 años perseguida por las cámaras, así que....
¿Qué momento de tu trayectoria elegirías para rescatar en este programa?
El programa se llama, precisamente, 'Algo pasa con Ana' -el título lo busqué yo-, para hacer un homenaje a Cameron Díaz en 'Algo pasa con Mary'. Porque es comedia, y así es como considero que es mi vida. Tiene los momentos de dolor que yo transformo en comedia. ¿Qué momentos son los que rescataría de toda mi vida? Mira, muchos. Es que hay muchos en los que, si hubiera estado el programa, madre mía.
¿Te consideras historia de España?
No, hombre, no [ríe]. Lo que ocurre es que la mayoría habéis crecido conmigo. Soy ya como el mueble de las casas: no sé si soy el sofá o qué soy [risas], pero llevo toda la vida, desde que tenía 19-20 años.
Aparte de Antonio Banderas, que aparecerá en el programa, y Alessandro Lequio, ¿qué otros amigos vamos a poder ver?
Tampoco quería involucrar a muchos, no me gusta pedir favores. Pero sí, salen Antonio Banderas, Juan Peña, Carmen... Mucha gente.
Se comentó incluso que iba a aparecer Antonia Dell'Atte...
[Risas] Nos llevamos muy bien, pero me da mucho corte pedirle que salga.
¿Y Victoria Beckham?
[Más risas] De ella hablamos y además se cuenta mucho. Pero eso lo tenéis que ver. Se cuenta lo del gimnasio, donde me tiró de los pelos y eso [sonríe].
Tras muchos años en televisión, a veces has aludido a que se ha dado una imagen distorsionada de ti...
Como comentaba antes, yo creo que transmito esa naturalidad y ese buen rollo, y ya no es que lo crea, es que me lo han confirmado, Por un lado, las redes sociales. Siempre hay gente que escribe para decirme que te quiere mucho, que se ríe contigo y que han vivido contigo. Por el otro, a través del teatro con todos los bolos, que hemos estado en 80 ciudades haciendo la función. Y es en esa salida del teatro, donde ves, palpas, lo que la gente siente, el cariño que te tiene o lo que piensan de ti.
¿Si 'Algo pasa con Ana' funciona en audiencia te gustaría hacer una segunda temporada?
Pues no lo sé, porque yo ahora... A ver, la verdad es que yo tengo mucha energía. Incluso hablando, que hablo mucho y muy rápido, esto agota, ¿eh? Son muchas horas.
¿Hasta qué punto has controlado tú 'Algo pasa con Ana'? Es decir, ¿has decidido en la edición y has decidido tú 'esto sí, esto no...'?
No, no, en la edición les he dejado. Lo que he controlado yo han sido los contenidos, en el sentido de 'esto lo hacemos, esto no' pensando en lo que podría gustarle al público. Siempre bajo la premisa de contar lo que es mi vida, buscando la verdad: que soy una persona positiva, que me río de todo y de mi misma, y que quería hacer sonreír a la gente con lo que van a ver. Es decir, yo no me voy a poner ahí a llorar. Eso no. Eso lo hago yo sola pero sin reality y sin nadie. Pero lo que he intentado ha sido eso, porque creo que el entretenimiento es eso. Es sonreír, es divertirte.
¿Y qué te has negado a mostrar en el programa?
Hombre, hay cosas a las que me he negado, como en el cuarto de baño, por ejemplo, para darme una ducha.
Hablas de que te ríes mucho de ti misma, ¿cómo de importante es saber en este negocio encontrar ese punto de comedia?
Eso es importantísimo. Yo creo que en este negocio y en todo. Ahora estoy con la meditación y siempre meditamos con una sonrisa. Porque si tú vas con una sonrisa, ya eres positivo y atraes cosas positivas. Es decir, yo creo que es importante, no solo porque seas un personaje público, sino para cualquier persona que es positiva y se ríe de sí misma. ¿Qué quiere decir reírse? No quiere decir que no se tengan problemas, sino que si es un problema que tiene solución, lo solucionas, y si no, no te vas a 'jorobar' la vida, a estar cabreado... Es una filosofía de vida.
Ya que tienes tanto sentido del humor y te has reído muchas veces de ti, ¿cuántas veces has perdido el equilibrio en el reality y has acabado en el suelo?
Hombre, pierdo el equilibrio muchas veces porque odio los tacones y acabo por los suelos varias veces, en el reality también. Sobre todo en el ascensor, pero no es que perdiera el equilibrio, es que tengo vértigo y en los ascensores acristalados que dan al exterior... pues eso. Entonces, claro, ellos (el equipo), no se lo esperaban. Estaban aguardando con las cámaras tras una función de teatro y cuando se abrieron las puertas del ascensor y vieron que salía a gatas... [ríe]. Claro, les sorprendió. Pero vamos, que me llevaron a un mago para quitármelo. Me han hipnotizado y todo.
Una de las polémicas de este verano ha sido la surgida entre Alessandro Lequio y Olvido Hormigos, y han soltado un pequeño cebo diciendo que algo de esto saldrá en el programa.
Lo tenéis que ver, lo tenéis que ver [sonríe]. Sale la verdad, la verdad de todo. La verdad de la verdad. Lo que no sé es si me lo van a censurar [sonríe de nuevo].
¿Crees que a través de 'Algo pasa con Ana' pueden volver a abrirse para ti las puertas de las grandes cadenas como Mediaset, TVE o Atresmedia?
Hombre, esas puertas las he tenido siempre abiertas, ¿eh? Otra cosa es que yo haya querido cruzarlas. Yo, por ejemplo, este reality me lo ofrece cualquier otra de las demás cadenas y no lo hubiera hecho.
¿Y no presentarías, por ejemplo, nada de lo que hay ahora?
Hombre, sí, sí. Vamos, si además ya me han ofrecido cosas y ahora tengo una serie y tal. Pero lo que quiero decir es que mi apuesta era con una nueva cadena y no es que me abran o no las puertas.
Yo lo que he necesitado muchísimo es, después de 'Ana y los 7', desconectar de todo. El teatro ha sido lo mejor que he podido hacer, donde me he probado a mí misma como actriz, subirme a un escenario y estar alejada. En esos momentos, las cadenas me han ofrecido cosas pero yo me he negado para enfocarme en el teatro. Y ahora volver así... me empieza a picar el gusanillo porque yo acabé muy harta de todo, ¿eh? Porque 30 años de tele son muchos. A ver quién lo puede decir.
¿Te verías de celestina del amor con 'los tróspidos' en Cuatro presentando un programa de ese estilo?
Es que nunca he querido presentar. Si es que lo que me da rabia es que siempre me llaman para presentar, y yo no he querido presentar nunca. Pero, bueno, he acabado presentando todo: las campanadas, los Premios TP, los ATV, el Festival de San Sebastián... Todo lo he presentado, pero yo no quiero hacer eso. Parece ser que a la gente le gusta mucho cómo presento, pero no sé... Lo que yo quiero es ficción.
¿Te verías, por ejemplo, en 'La que se avecina'?
Hombre, me encanta esa serie, pero justamente fui yo la que me fui. Dejé yo la serie 'Ana y los 7' y dije 'hasta aquí hemos llegado' con, fíjate tú, 6 millones de audiencia en el último capítulo. A ver quién hace eso ahora. Y lo dejé porque quise yo. Es decir, la que se fue de la tele fui yo porque no podía más. Y ahora he vuelto con esto, y también tengo otro tema que he escrito yo y que ya se está moviendo pero sobre el que no puedo contar nada. Solo que, como siempre, es comedia, que la necesitamos más.
Cambiando un poco de tema, ¿has vivido muchos momentos en los que la fama te ha dado algún que otro incidente?
La fama es un coñazo. Pero un coñazo como no os podéis imaginar. Al principio me decían: 'cuando eres famosa te sirve para que te den mesa en un restaurante y te cuelen en el dentista'. Pues, mira, no. Eso sí, la gente por la calle es maravillosa, de verdad. Hombre, te agobia si estás comiendo con el solomillo en la boca y vienen a pedirte una foto. Pero no, la gente nunca agobia, y eso es algo que a mí no se me olvida, pero sí es algo que se nos olvida a las personas que llevamos muchos años ahí. Y es que estamos ahí gracias al público, gracias a esa gente que nos ha seguido en el '¿Qué apostamos'? en el 'Gracias por todo', en 'A las once en casa', en 'Ana y los 7'... Siempre me han dado un apoyo de 35% de share, siempre una media de 6, 7, 8 millones de telespectadores... Eso no se paga con nada.
¿Crees que se te ha valorado lo suficiente en el sector?
Hombre, claro. Se me ha valorado desde el momento en el que 8 millones de personas me han visto hacer 'Hostal Royal Manzanares' y 6 millones de personas 'Ana y los 7' de media. La verdad es que tengo mogollón de premios, tengo TP´s, tengo 'Mejor Actriz' en 'Ana y los 7', 'Mejor serie'... Lo que pasa es que la prensa del corazón ahora me ha alejado bastante. ¿Cómo me ha alejado? Pues no teniendo novio. Aquí si tienes novio, ya estás en la prensa; y si no lo tienes, fuera de ella.
Y hablando de esa fama y de los novios, ¿alguna vez te ha generado algún malestar con alguna pareja?
Hombre, como decía, la fama es un coñazo que luego con una pareja que no sea del medio es terrible. Es fulminante, acaba con todo. Y ha llegado a acabarse alguna relación. Todo este tema de la fama es muy complicado. Cuando yo empecé, los famosos éramos los profesionales, y ahora hay famosos que yo no sé de dónde salen; no conozco a nadie. No son ni cantantes, ni actores, ni nada y dices '¿Quién son?' No sé si son hijos de, padres de....
Por otra parte, ¿qué ocurrió al final con esa versión española de 'Homeland', en la que ibas a participar y que se anunció en 2013
Ahí todo se distorsiona [ríe]. No era una versión de 'Homeland' española, sino una película que se iba a hacer y al final no se hizo. Y además, menos mal, porque yo estaba en el teatro y no lo podía compaginar. Y dije que era estilo 'Homeland' porque había una persona que era un americano al que también secuestraban y todo eso.
¿Qué consideras que le falta a la televisión de hoy en día?
Creo que faltan programas de entretenimiento. Los de ahora, como 'La Voz', que me encanta y considero que está muy bien hecho,'Tu cara me suena'... están muy bien. Pero pienso que faltan espacios de entretenimiento tipo grandes concursos de la clase '¿Qué apostamos?', 'Grand Prix', etcétera. También pienso que faltan, en cuanto a series, comedias románticas; aunque la verdad es que ya hay muchas series y buenísimas. Y de comedia, también. Yo con 'La que se avecina', por ejemplo, me muero. Pero haciendo balance, creo que hay cosas que sobran y cosas que faltan... y las que faltan no las voy a decir [sonríe].
Si te dieran la oportunidad, ¿participarías en 'Tu cara me suena'?
No, no. Yo para cantar... en la clausura de '¿Qué apostamos?' quisieron que cantara, y si ya me costó hacerlo entonces... Yo todo lo que sea de bailar, sí, pero de cantar nada. Ni de jurado, porque a mí no me gusta juzgar ni que me juzguen. 'Juzgar', de hecho, es una palabra que odio.
Y como espectadora, ¿de quién gustaría ver un programa al estilo 'Algo pasa con...'?
A lo mejor no nos gustaría ver la vida de nadie, pero si esa vida que estoy viendo me enseñara que hay que ser positivo, superar los problemas, transformarlo todo, dar amor, ser buena hija, buena madre y ese tipo de cosas, lo vería.
¿Te consideras cotilla?
¡Nada! [sonríe]. Pero si tuviera que ver la vida de algún personaje público, como soy fan total de Meryl Streep o de Julia Roberts, pues sí, la verdad, me gustaría conocer su vida.
¿Y a los Beckham?
A los Beckham no me gustaría tanto verlos. Acabé de ellos hasta las narices [risas].