El Internado: Las Cumbres
Los alumnos del 'Internado' de Amazon: “No hay nada de malo en seguir creando contenido de un universo que funciona”
El Internado: Las Cumbres regresó este viernes a Amazon Prime Video con su segunda temporada. Una nueva tanda de capítulos que resuelve las incógnitas que dejó la primera, y que se caracteriza por mantener dos elementos imprescindibles de la franquicia: “Mucho misterio y mucha intriga”.
Así lo aseguran Albert Salazar (Paul), Asia Ortega (Amaia) y Carlos Alcaide (Manu), el trío protagonista de las tramas de esta producción de The Mediapro Studio y Buendía Estudios que ha estrenado de golpe los ocho episodios de su temporada 2. “Se resuelven muchas dudas que se plantearon la primera temporada: se descubre quién es el asesino de las niñas, vemos a Paul y a Amaia cada vez más cerca, a Manu sufriendo... y se van desvelando todas las incógnitas... o casi todas”, apunta el primero de ellos en esta entrevista con verTele cuyo vídeo acompaña al titular.
Para la actriz, El Internado: Las Cumbres ha ganado entidad en sus nuevos capítulos: “Nos conocemos más, hemos podido profundizar más en las relaciones interpersonales de los personajes y se ha trabajado también a nivel técnico. Ha cogido un tono más oscuro, un clima de terror, y creo que la temporada está muy bien. La segunda tiene todas las respuestas, y da más ganas de ver la primera”, opina.
“Indaga más en la psicología de los personajes, qué piensan y qué sienten”, añade por su parte Albert Salazar, que avanza un paso adelante en la relación entre Amaia y Paul: “El roce hace el cariño y el cariño hace que se sientan culpables”, comenta. “Hay un tira y afloja en los dos personajes que es muy bonito y que juega muy a favor hacia lo que va a ser el final de temporada”, dice Carlos Alcaide, el otro vértice del triángulo amoroso de la temporada.
Las comparaciones con 'El Internado' original
Preguntados sobre si consideran que las comparaciones con El Internado original impidieron que se valorase a Las Cumbres de manera independiente y justa, Alcaide se explaya: “Las comparaciones son inevitables y obviamente hubo un poco de conflicto, pero la acogida ha sido buena. Hemos tenido críticas muy positivas y no hay nada de malo en seguir creando contenido de un concepto o de un universo que funciona. Es el mismo concepto con otras tramas, personajes... ha quedado claro que es una serie diferente con sus similitudes y guiños, pero que ha funcionado bien”.
A su lado, y tras ponerse sobre la mesa las semejanzas existentes entre la trama de esta segunda temporada y la historia de misterio del Laguna Negra, Asia Ortega opina: “No es lo mismo la semejanza en los métodos que en los elementos que lo conforman. Hay guiños para los nostálgicos, se desvelan misterios de una manera parecida porque a todos nos gusta ver cosas que reconocemos, pero no tiene nada que ver”.
Por último, los tres apuntan que la continuidad de la serie por una tercera temporada “depende del público” y reflexionan sobre cómo ha cambiado el fenómeno fan asociado a las series juveniles: “Después de la pandemia, de ir con mascarilla por la calle, el fenómeno fan ha bajado un poco. Pero sí lo hemos notado por redes sociales”, comenta Salazar.
