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Villar Mir (OHL): del odio al amor por Manuela Carmena en 48 horas
En un ejercicio de realismo político (y económico) el Marqués de Villar Mir, presidente de OHL, amigo íntimo del reyl Juan Carlos I y consejero del Banco Santander, cambiaba radicalmente su discurso sobre el ascenso al poder de las nuevas formaciones políticas asegurando que Manuela Carmena “puede ser una gran alcaldesa de Madrid”. Que un constructor agasaje a la alcaldable de la principal ciudad de España no sería significativo si solo dos días antes no hubiera asegurado, en la presentación de sus resultados empresariales, que estaba “muy preocupado” por el resultado de las elecciones autonómicas y locales y que la actual recuperación económica podría ponerse en peligro “en caso de que se pongan de moda alguna de las tesis que defiende Podemos”.
“Me preocupa mucho”, aseguró el exministro al ser preguntado por el resultado electoral el pasado 27 de mayo. “Las declaraciones que he oído a alguno de los nuevos grupos políticos, en particular a Podemos, con expresiones como 'marxismo' y 'leninismo' y con alusiones al sistema bolivariano de Venezuela no cabe en la UE y en España”, declaró.
El giro de 180 grados en el discurso de Villar Mir, que figura en los papeles de Bárcenas como donante de más de medio millón de euros al PP, tiene como telón de fondo las grandes operaciones pendientes en la ciudad de Madrid, especialmente el Complejo Canalejas. El complejo hotelero y comercial que el magnate planifica para el centro de Madrid está presupuestado por 285 millones de euros pero aún no tiene el visto bueno definitivo del Ayuntamiento. En las jornadas de Economía de Sitges donde Villar Mir trató de reconciliarse con las nuevas fuerzas políticas, el constructor ofreció su colaboración a la previsiblemente próxima alcaldesa, y aseguró no estar preocupado por el futuro de los proyectos en Madrid de la constructora que lidera.
Aún más reseñable entre los proyectos pendientes del constructor en la capital es la quinta torre de la antigua ciudad deportiva del Real Madrid, que Villar Mir se adjudicó mediante su inmobiliaria Espacio y que asciende a 434 millones de euros, para construir un hospital privado con un canon anual para el Ayuntamiento de Madrid que se embolsará, según las condiciones actuales, 1,9 millones de euros anuales por esta obra.
Puede ser que el marqués haya reconsiderado su postura recordando los sabios consejos de su amigo, el difunto Emilio Botín, que siempre se supo entender con el gobierno de turno , o tras leer en la prensa, como Carmena ya se empieza a entrevistar con grandes banqueros, como el presidente de Bankia, y ve factible iniciar una negociación. Por el momento, Villar Mir tiene otras relaciones con el Gobierno con las que preocuparse: las del Gobierno de México que auditará los contratos con su empresa en busca de posibles sobornos.