Andalucía, convocada a manifestarse ante “las profundas deficiencias y debilidades” de su sistema sanitario
La ciudadanía de Andalucía está convocada este sábado 19 de febrero a movilizarse por una mejora del sistema público sanitario después de que la crisis pandémica provocada por el coronavirus haya “puesto en evidencia las profundas deficiencias y debilidades” del mismo, según recoge el manifiesto 'Es tu derecho. Por una sanidad pública de calidad en Andalucía', suscrito por los sindicatos UGT, CCOO y una decena de organizaciones sociales que apoyan la iniciativa, quienes denuncian al tiempo “la ineficiente gestión que ha realizado y sigue realizando el actual Gobierno andaluz, que daña al servicio público”.
De forma casi simultánea, y con recorridos en las ocho capitales, numerosas asociaciones, plataformas, colectivos vecinales o movimientos sociales se han ido sumando a las movilizaciones en cada provincia en defensa de una mejor sanidad pública. A nivel andaluz, FACUA-Consumidores en Acción, la Coordinadora Andaluza de Mareas Blancas, la Coordinadora Andaluza de ONGD, la Coordinadora Andaluza por la Memoria Histórica y Democrática, la Fundación Triángulo Andalucía, la Confederación Andaluza Vecinal, las Federaciones de Organizaciones Andaluzas de Mayores, la Asociación Adriano Antinoo, Médicos del Mundo Andalucía, la Red de Municipios Orgullosos y ProDDHH Intersex Krisol firman el manifiesto. Partidos políticos como PSOE, IU, Unidas Podemos o Andaluces Levantaos ya han anunciado también su apoyo a la inicitiva
Y es la sanidad pública será, a buen seguro, unos de los caballos en la batalla que se librará este año hasta las elecciones autonómicas, aún sin fecha pero con seguridad en 2022. Muchas han sido las cuestiones que se han debatido estos meses atrás en clave sanitaria, y también política. Nuria López y Carmen Castilla, dirigentes de CCOO y UGT, que participarán en la manifestación de Sevilla, avalaron hace justo un mes el pacto por la salud que el líder del PSOE andaluz, Juan Espadas, propuso sin éxito al presidente de la Junta. La no renovación de 8.000 sanitarios de refuerzo contra la Covid-19 que perdieron su puesto el pasado 31 de octubre, los contratos a sanitarios en las navidades, el traslado obligatorio de médicos entre hospitales para paliar la falta de personal, la controvertida opción de reforzar la sanidad con médicos jubilados, la propuesta a los médicos de familia de trabajar 12 horas al día, el número de contagios entre los sanitarios, la no renovación de otros 12.000 sanitarios de refuerzo o la recopilación de medidas antiguas para 'vender' el plan de refuerzo en atención primaria que anunció Moreno Bonilla han sido motivos de queja de los representantes de los trabajadores que culminan con esta “gran movilización” que esperan que sea la convocatoria del sábado. Las organizaciones profesionales, además, continúan con un goteo constante de protestas en todas las provincias y, de manera recurrente, ante las puertas del Servicio Andaluz de Salud (SAS) en la capital hispalense.
¿Y qué dice la Junta a todo esto? El último posicionamiento que tenemos es del consejero de la Presidencia y portavoz del Gobierno andaluz, Elías Bendodo, que el martes en rueda de prensa aseguró que la atención primaria “se está recuperando” y, de paso, cargó contra los sindicatos por ejercer de “altavoz de la oposición”. Bendodo pidió a los partidos “basta de guerra política con la sanidad”, instándoles a “abandonar el frentismo”. “Que dejen de atacar a la sanidad pública, que es la que nos ha sacado de la pandemia; lo que tienen que hacer es reconocerla en vez de criticarla”, obviando que las reivindicaciones van precisamente en la línea de dotar de más personal y medios al sistema público.
“Pérdida de accesibilidad”
Los convocantes de las movilizaciones recuerdan que la sanidad pública andaluza “ya arrastraba problemas estructurales derivados de las políticas de recortes que se aplicaron a raíz de la crisis del 2010 pero, sin duda, el deterioro se ha acelerado profundamente en el binomio 2020-2021, y todo ello a pesar de la comprensión y comportamiento ejemplar de la ciudadanía andaluza, y por supuesto por la profesionalidad, compromiso e implicación de las trabajadoras y trabajadores sanitarios que, con su esfuerzo, dedicación e incluso, en ocasiones, bajo el coste de entregar su salud y sus vidas, han permitido que la atención y calidad sanitaria se mantuvieran a lo largo de todos los pueblos y ciudades de nuestra Andalucía”.
El manifiesto hace hincapié en que Andalucía es la comunidad “con menor gasto sanitario público por habitante, a pesar de las necesidades urgentes que tenemos por nuestra extensión y dispersión geográfica” y considera que existe “una atención primaria absolutamente colapsada que ha sufrido el deterioro de los valores que la hicieron grande y apreciada por la ciudadanía, además de la pérdida de las actividades de promoción y prevención de la salud que actualmente y en un futuro tendrá repercusiones gravísimas en enfermedades crónicas como, por ejemplo, en el diagnóstico del cáncer en estadíos avanzados”.
Según recalcan, “en pandemia hemos asistido, con asombro, al cierre de centros sanitarios, camas hospitalarias, a la pérdida de personal de atención primaria, e incluso se ha despedido a más de 8.000 trabajadoras y trabajadores, a pesar de la falta de personal y de la sobrecarga extenuante que arrastran las y los profesionales sanitarios provocando incluso un aumento alarmante de las agresiones a profesionales. Y todo ello incumpliendo el deber de retribuir a nuestras y nuestros profesionales sanitarios, al menos, en igual medida que en el resto de comunidades autónomas”. Asimismo, denuncian que “se ha desatendido y despreciado igualmente la situación precaria e igualmente preocupante de las personas trabajadoras de las subcontratas de limpieza, mantenimiento, emergencias sanitarias, cocina o seguridad”.
La “pérdida de accesibilidad” a la sanidad pública “se evidencia con colas interminables de usuarios en las puertas de los centros de salud, grandes listas de espera que ascienden a más de 720.000 personas en Andalucía, casi triplicando las cifras de Madrid y Cataluña, y todo ello a pesar del infradiagnóstico de patologías, y de la derivación sistemática de pacientes menos graves a la privada, que ha supuesto que el Gobierno andaluz actual haya incrementado el presupuesto de la asistencia sanitaria con medios ajenos en un 43% en un año (2021-2022), intentando transformar la sanidad pública en un negocio”, como avanzó este periódico.
También resalta el manifiesto el “aumento de la brecha digital con la exclusión del sistema sanitario público de personas mayores, colectivo muy vulnerable que requiere de atención preferente” y la “indecente” tasa de contagios de los profesionales sanitarios en Andalucía fundamentalmente “por la deficiente protección, además de la infradeclaración de accidentes de trabajo por COVID-19 (el 90% de los casos)”. “En definitiva, una situación que es inexplicable en un momento en el que el Gobierno andaluz declara tener un superávit de casi 2.600 millones de euros en las cuentas de 2020, y siendo la comunidad autónoma que ha recibido más fondos COVID para la sanidad en 2022, superando la cifra de 4.600 millones en los dos últimos años de pandemia”, detalla el manifiesto previsto para esta movilización ciudadana. “Es el momento de decir 'basta'”.
5