Finalmente se han confirmado los peores pronósticos para el sector de las energías renovables y el documento de Modificación de aspectos puntuales de la Planificación Energética 2015-2020 no ha incluido el eje Caparecena-Baza-La Ribina, una auténtica autopista eléctrica de 400 kv llamada a permitir la evacuación de los proyectos, sobre todo eólicos, en la parte oriental de Andalucía.
El documento, elaborado por la Secretaría de Estado de Energía, considera que no concurre ninguno de los tres requisitos para el cambio: que se haya presentado un hecho imprevisto que pudiera afectar a la garantía y seguridad del suministro, que haya surgido uno nuevo cuya alimentación únicamente pueda realizarse desde una red de transporte no prevista o que concurran razones de eficiencia económica del sistema. Pero para el sector esto es “indignante”, no sólo porque están convencidos de que se cumplen estas condiciones, sino también porque se incumple el compromiso del Ministerio de Energía el pasado verano y que incluso fue trasladado a Javier Carnero, consejero de Empleo, Empresa y Comercio, como se había hecho a su predecesor, José Sánchez Maldonado, dado que la negociación ha sido prolongada.
En total, hay 49 modificaciones que corresponden a actuaciones que se incluyen en la Planificación Energética 2015-2020 o que se actualizan y otras seis que son cambios de titularidad. Suman 47,5 millones de euros de euros extra sobre la planificación aprobada por el Consejo de Ministros en 2015, destacando en el caso de Andalucía los 8,7 millones de euros para la línea Andújar-Guadame 2 de 220 kv.
El Clúster Andaluz de Energías Renovables y Eficiencia Energética (Claner), que integra más de 90% del sector, ha anunciado alegaciones sobre la propuesta de la Secretaría de Estado de Energía. Su director general, Carlos Rojo, ha trasladado la “frustración” en el sector y ha recordado que el propio Ministerio de Energía calificó esta infraestructura de “primordial, vertebradora, clave y estratégica para el desarrollo energético y socioeconómico” de esta parte de Andalucía, con condiciones inmejorables para las energías renovables pero que sin embargo sus provincias son una mancha vacía en el mapa de las redes de transporte.
Carlos Rojo ha recordado que estaba prevista hace años y que en 2008 el Gobierno de España “la sacó de la planificación” para sucederse desde entonces compromisos de ida y vuelta. La gravedad de esto radica en que las empresas proyectan con mucha previsión, “porque se tardan unos cinco años de tramitación”, y lo hacen porque tienen la garantía de unas infraestructuras para poder evacuar luego su producción. Y en este caso se contaba con este eje. Calcula, de hecho, que este nuevo retraso, dado que el Gobierno de España, podría replantearlo para 2020, “pone en riesgo proyectos por más de 1.100 millones de euros” y “miles de puestos de trabajo”.
La decisión ha provocado también reacciones políticas. Este lunes se han reunido los secretarios generales del PSOE de Almería, Granada y Jaén, José Luis Sánchez Teruel, José Entrena y Francisco Reyes para plantear una estrategia de respuesta. Los dos últimos son, además, presidentes de las diputaciones de sus provincias. El secretario de Organización del PSOE de Andalucía, Juan Cornejo, ha subrayado que “ya está bien”, incidiendo en que esto forma parte del “olvido” que ya sufren estas provincias en otras materias, como es el caso más llamativo de las infraestructuras ferroviarias.
Crisis también en la Plataforma Solar de Almería
No ha sido el único golpe para el sector en Andalucía oriental. La Plataforma Solar de Almería, el mayor centro de investigación de energía solar de concentración en Europa, ha visto dimitir a su cúpula por las trabas del Gobierno de España para poder emplear todos los fondos europeos que les llegan debido a las restricciones en el gasto público. Tal y como ha adelantado El País, la Plataforma Solar de Almería puede perder en torno a un tercio de sus investigadores por las imposiciones del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas que les impiden emplear un dinero que realmente tienen.