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Andalucía dice adiós a su última central térmica tras 40 años en funcionamiento

Momento en el que el trabajador de la central Javier Romero pulsa el botón de desconexión

Clara Gamarra

16 de diciembre de 2021 20:38 h

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Andalucía dice adiós a la última central térmica de la región tras 40 años en funcionamiento. La desconexión de la planta situada en la provincia de Almería se ha hecho efectiva este jueves tras recibir el pasado 6 de octubre la autorización de la Dirección General de Política Energética y Minas, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica, a través del Boletín Oficial del Estado (BOE). La planta carboeléctrica, propiedad de Endesa Generación S.A., fue construida en 1985 y consta de dos grupos separados con una potencia de 557 megavatios (MV) y 562 MV.

La empresa de electricidad solicitó en diciembre de 2019 la autorización administrativa para el cierre de los Grupos 1 y 2 de la central termoeléctrica de carbón. Tal y como comunicaba la compañía, los motivos para la desconexión se basan en las modificaciones de las condiciones del mercado que ha supuesto un incremento en el precio de los derechos de CO2 que actualmente rondan los 60 euros la tonelada, el doble que en 2020 según los datos de la empresa dedicada a la compraventa de derechos de emisión, Sendeco2.

Para la desconexión y el consiguiente desmantelamiento de las instalaciones, la Red Eléctrica de España, en su calidad de Operador del Sistema, condicionó el cierre del segundo grupo a cambio de cumplir con la repotenciación de la L-220 Gabias-Órgiva. Una cláusula que ha sido cumplida tal y como confirma el director general de Endesa en Andalucía, Rafael Sánchez. De esta forma, la eléctrica ha procedido a apagar los sistemas de gestión de la central, aunque aún tardarán un plazo de entre cuatro y seis años para el desmantelamiento completo para el que tendrán que realizar tareas de limpieza con el fin de minimizar al máximo el riesgo.

La persona encargada de pulsar el botón que inicia el desmantelamiento de la central ha sido Javier Romero, un trabajador de la Central Térmica de Carboneras que, después de 38 años ofreciendo sus servicios en las instalaciones, se prejubilará tras la decisión de Endesa de cerrar la planta almeriense. Una vez presionado el botón que iniciaba el apagado de la sala de control, las pantallas y controles de la central se han desactivado para dar paso a una futura que se base en energías más limpias.

La central ha producido a lo largo de su vida útil un total de 183.628 GW, lo que corresponde al consumo de cuatro años y medio del consumo en Andalucía. Ahora, la electricidad producida será sustituida por energías renovables como la solar o la eólica. Por ello, la actividad industrial de las instalaciones de Carboneras no se paralizará sino que acogerán otros proyectos englobados en el Plan Futur-e.

Futuro de las instalaciones y de los trabajadores

El compromiso de Endesa de mitigar las consecuencias de la transición energética afecta a 269 trabajadores. Muchos de ellos ya han sido recolocados en diferentes sedes de la empresa eléctrica, mientras que otros se enfrentan a una situación incierta. Para minimizar el impacto que puede acarrear el cierre de la central sobre la población local, en 2020 se puso en marcha el Plan Futur-e. “Este proyecto se basa en la búsqueda proactiva de empleo, el fomento de la actividad económica de la zona, la formación y capacitación de la población local y en incentivar las iniciativas de sostenibilidad del municipio”, aclara el director de la central, Juan Luis Redondo. 

Con este objetivo, Endesa ha puesto en marcha una convocatoria internacional de proyectos a través del cual pretenden atraer la actividad económica y empleo a la zona, poniendo a disposición de los interesados el emplazamiento y los activos existentes en la central térmica. Hasta el momento, hay 14 propuestas seleccionadas cuyas temáticas van en relación a la economía circular, la acuicultura, los combustibles, el sector turístico y la actividad logística aunque sobre ninguna de estas se conocen detalles por motivos de confidencialidad. 

Además de la fase de selección de nuevos proyectos, el Plan Futur-e incluye cursos de formación para fomentar el empleo. La responsable de medioambiente de la Central Litoral de Almería, Margarita Martínez explica que Endesa va a lanzar este plan de formación “en conjunto con el Ayuntamiento de Carboneras y la Junta de Andalucía” y será la Consejería de Empleo la encargada de seleccionar los alumnos cuya preferencia serán las personas afectadas por el cierre de la planta carboeléctrica.

Mientras, el alcalde del Ayuntamiento de Carboneras (PSOE), José Luis Amérigo Fernández, espera que Endesa tenga la misma generosidad en cuanto a planes de futuro que la que tuvo esta localidad con ellos hace 40 años cuando instalaron la central para la generación de electricidad a través del carbón. 

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