Andalucía afronta su segunda ola de calor del verano con máximas de hasta 44 grados
La tregua llega a su fin. O, al menos, lo poco que quedaba de ella. Tras un final de junio y comienzo de julio protagonizado por temperaturas relativamente suaves en buena parte de Andalucía, el verano pisa el acelerador justo en el comienzo del periodo canicular. La dorsal anticiclónica norteafricana encontrará acomodo durante los próximos días sobre la Península Ibérica, donde se asentará y recalentará de cara a comienzos de la próxima semana.
Aunque el momento crítico del episodio se espera que se dé a comienzos de la próxima semana, será a partir de este viernes cuando tenga su punto de partida. Desde la tarde del próximo sábado la mayor parte del valle del Guadalquivir ya podrá superar la barrera de los 40 grados, ante lo que la Agencia Estatal de Meteorología ha activado para dicha jornada el aviso naranja por calor en las áreas del Andévalo onubense y las campiñas de Sevilla y Córdoba. De hecho, la propia AEMET ha emitido un aviso especial ante el comienzo del episodio y que sitúa a la mitad occidental andaluza como uno de los epicentros de la que previsiblemente termine siendo segunda ola de calor de la temporada.
Una ola de calor de larga duración
Más que por los registros extremos que puedan darse, el episodio llama la atención por la duración que puede llegar a tener. Con temperaturas que tanto en altura como en superficie se situarán entre 5 a 7 grados por encima de los valores medios para la época, lo más destacado será lo mucho que se prolongue dicha anomalía en el tiempo. Desde la jornada del viernes, comienzo oficial del episodio, y hasta mediados de la próxima semana, buena parte del valle del Guadalquivir vivirá de manera sostenida con jornadas de 40 grados o más en las horas centrales del día. Además, el calor se extenderá a otras zonas del interior oriental andaluz a partir del próximo martes, cuando durante el punto álgido del episodio podrán llegar a darse registros de hasta 44 grados en el cauce medio de la depresión del Guadalquivir.
Hasta entonces, el calor estará focalizado en cotas bajas y medias de la mitad noroccidental andaluza, donde incluso en amplias áreas de Sierra Morena podrán alcanzarse los 38 o 39 grados durante el fin de semana. En el resto de la Comunidad las temperaturas serán algo más suaves, con máximas de hasta 36 grados en el valle del Genil y la comarca de Guadix, bajando hasta el entorno de los 30 a 32 grados en el prelitoral y zonas costeras mediterráneas. Como es habitual, las mínimas también notarán la entrada de aire cálido, dejando noches de insomnio en la mayor parte de la región. Las temperaturas no bajarán de los 20 grados en la mitad occidental, con picos de hasta 23 o 24 grados de mínima en cotas medias y bajas de las provincias de Sevilla y la vertiente atlántica gaditana.
Máximas de hasta 44 grados en el punto álgido del episodio
Lo más duro llegará de cara a la próxima semana. A partir del lunes 11 de julio, el descuelgue hasta el área de San Vicente de una baja aislada en altura, inyectará aire aún más cálido procedente del norte de África hasta la Península Ibérica. Se repite el patrón de otros episodios históricos por calor en Andalucía y que tan recurrente es desde la pasada década. La nueva normalidad climática en nuestra región viene de la mano de este tipo de circulación atmosférica, que tiene en las rupturas del “jet stream” (una suerte de autopista en la baja atmósfera que transporta las borrascas a través del hemisferio norte) su principal origen.
Así, desde comienzos de semana las temperaturas sumarán entre dos a tres grados de manera general hasta alcanzar los 42 o 43 grados en el interior occidental andaluz. El calor se extenderá de igual modo al resto de la región, donde incluso en puntos de costa del tercio oriental podrán alcanzarse los 36 o 37 grados. Durante las tardes del martes 12 y el miércoles 13 de julio será cuando previsiblemente se alcance el cénit del episodio.
Toda la depresión del Guadalquivir alcanzará o superará la barrera de los 40 grados, generalizándose la marca de los 42 grados en casi todos los puntos de cotas bajas y medias del valle. Las provincias de Sevilla, Córdoba y Jaén serán las más perjudicadas por el ascenso de las temperaturas, con máximas que de manera general se situarán entre los 43 y los 44 grados hasta la tarde del próximo miércoles. Desde entonces, y a expensas de la evolución que siga el centro de la depresión, se abre el terreno de la incertidumbre ante la posibilidad de que el episodio se prolongue aún más en el tiempo o tenga un brusco final.
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