El exconsejero Vallejo asegura que nadie le advirtió de que la agencia IFA-IDEA no pudiera pagar las ayudas de los ERE
El exconsejero de Innovación, Ciencia y Empresa Francisco Vallejo y presidente del Instituto de Fomento de Andalucía (IFA, luego agencia IDEA) entre 2004 y 2009 ha señalado en el juicio del caso de los ERE que “nadie” le advirtió de que dicho ente instrumental no pudiera pagar las ayudas sociolaborales gestionadas por la Consejería de Empleo y que, en ningún caso, “nunca” dio orden alguna en relación con las ayudas que se están juzgando en la Audiencia de Sevilla.
Vallejo, a quien la Fiscalía le pide ocho años de prisión por prevaricación y malversación, ha declarado por espacio de unas tres horas y ha dicho que “nadie me advirtió de ninguna irregularidad” en relación al pago de duchas ayudas. Según las acusaciones, IFA-IDEA (agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía) era el socio perfecto como pagador de las mismas para eludir los controles. Vallejo ha dicho que IFA-IDEA pagaba pero que el dinero era “de Empleo” en base a las “órdenes de pago” por parte de dicha consejería, recordando que al inicio de su mandato se trató de que Empleo se encargara también del pago pero que su “decisión personal” fue que se siguiera abonando por parte de IFA-IDEA, en virtud del convenio entre ambas consejerías que databa de 2011, ya que esa posibilidad de traspaso competencial, planteado por el exdirector general de IFA Miguel Ángel Serrano, podía generar “un nuevo conflicto” entre ambos departamentos de la Junta, amén de un cambio en la ley de presupuestos ya en marcha en aquel año 2004.
Durante el interrogatorio, que el miércoles seguirá con las preguntas de su abogada, Vallejo ha dejado ver en varios momentos la “situación poco amistosa” con Antonio Fernández, consejero de Empleo entre 2004 y 2010, al verse éste despojado de muchas de sus competencias al inicio de aquella legislatura a favor de la nueva “macroconsejería” de la Junta (Innovación, Ciencia y Empresa), con una veintena de centros directivos. El consejero aceptó el puesto no sin reticencias ante la insistencia del entonces presidente, Manuel Chaves, según ha confesado, puesto que creía que debía abandonar la primera línea política tras ser consejero de Obras Públicas (1994-2000) y de Salud (2000-2004) durante los diez años precedentes.
El exconsejero ha defendido que IFA-IDEA era “un órgano de la Junta que se adscribía a una consejería pero que prestaba servicio a todos”, por lo que optó por evitar “un enfrentamiento más con ellos”, en alusión a la Consejería de Empleo. “Se decidió seguir prestando esa labor para Empleo”, ha comentado. “IFA nunca pagó por encima del dinero que tenía”, también ha dicho, explicando que hubo un momento en que Empleo no enviaba el dinero suficiente a IFA-IDEA, generando un déficit presupuestario pero “era una deuda de la Junta con la Junta” porque “IDEA no tenía ningún problema” en ese sentido.
“Un consejero no puede dedicarse a eso”
Vallejo también ha insistido durante su declaración que no se ocupaba de conocer los elementos procedimentales ni el detalle de muchas cuestiones resididas en su departamento. “No recuerdo haberme planteado por qué pagábamos las ayudas”, ha dicho al señalar que este tipo de entes públicos como IFA-IDEA “a veces eran usados” para tales fines. En todo caso ha reconocido que “no le presté atención prácticamente ninguno en cinco años al pago de IFA-IDEA de las ayudas”, si bien ha defendido que este ente “nunca ha tenido un déficit presupuestario porque no podía tener” ni tampoco se le trasladó “ninguna retención económica” por parte de la Intervención General.
El fiscal ha incidido en mostrarle las actas y los informes de las cuentas anuales de IFA-IDEA. Vallejo ha dicho que no le extrañó que este ente se limitara a pagar las ayudas pero no a tramitarlas porque “no le presté atención” a ello. “Un consejero no puede dedicarse a eso, el consejero estaba para otras cuestiones”, ha dicho al ser preguntado por si conocía de algún acuerdo entre Innovación y Empleo con alguna empresa en concreto. “Jamás” supo si había o no órdenes o decretos que regularan las ayudas, ha comentado también, insistiendo en el perfil más político de su cargo.
Acerca del control financiero permanente de los entes instrumentales por el que también le ha preguntado el fiscal ha dicho que sabía que desde 2000 se fue mejorando su regulación anualmente pero no accedió a los informes concretos pese a que era uno de sus destinatarios. Al exhibírsele las cuentas de resultados de IFA-IDEA o los acuerdos de su consejo rector, firmadas por él, ha asegurado que “no tenía por qué leer” el detalle de su contenido en base a la “confianza” en que si llegaban hasta ahí tienen todos los parabienes de los escalafones inferiores de su departamento, ha venido a explicar. “Nunca en 15 años de gobierno me han pasado ningún informe del interventor”, ha dicho en otro pasaje.
Una tesis “insólita”
En la reanudación de su interrogatorio, Vallejo ha considerado “insólita e increíble” la tesis de que “cientos de personas de distintos ámbitos” cooperasen “durante 12 años” para sostener adrede un “sistema” ilegal de subvenciones arbitrarias o irregulares.
Vallejo ha defendido además que la Agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía (IDEA), adscrita a su consejería durante su etapa como responsable de Innovación, “sólo materializaba” el pago de tales subvenciones, exponiendo que era la Consejería de Empleo el departamento que “dominaba todo el procedimiento” relativo a la tramitación de las ayudas. Así, ha insistido en que IDEA “no tenía margen de decisión” en tales ayudas ni intervenía en los expedientes, porque su papel se reducía a abonar las cuantías promovidas desde la Consejería de Empleo.
En ese sentido, ha asegurado que “ninguna” de las instancias de “control” a las que estaba sometida la actividad de la agencia Idea comunicó nada que hiciese pensar en alguna “irregularidad” en el pago de las citadas subvenciones.