Los concejales del equipo de Gobierno del PP en Cádiz abandonaron el lunes el Pleno mientras un ciudadano tomaba la palabra. Al finalizar el turno de intervenciones, Lorenzo Jiménez, activista del 15M, inició un discurso de espaldas a los políticos como medida para denunciar el “desinterés” que éstos muestran ante quienes participan en este órgano de Gobierno. Jiménez ya había intervenido en Pleno con idéntica actitud el 29 de abril. Entonces, una edil del PP, Mercedes Colombo le hizo fotografías con el móvil mientras hacía muecas a sus compañeros de partido. Ayer, los concejales del PP decidieron, directamente, abandonar el salón plenario.
Fue la propia alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez (PP), la que dio el Pleno por finalizado e instó a los representantes políticos a abandonar la bancada en el momento en el que Jiménez tomó la palabra de cara al público. Los populares abandonaron la sala entre abucheos de los presentes y algún insulto: “Fachas”, “esto es una dictadura”, profería una señora. Los miembros de la oposición (PSOE e IU) se mantuvieron en sus sillones a pesar de que también fueron aludidos por la denuncia del interviniente.
El activista del 15M, mientras tanto, siguió leyendo el manifiesto que ya tenía preparado. Lo hizo visiblemente exaltado. Cargó contra la expulsión, unos minutos antes, de dos portavoces de la plataforma de parados de Cádiz que no paraban de interrumpir a los políticos pidiendo un trabajo. “Son unos cobardes porque sólo van a por los más débiles. Yo me opondré y desobedeceré a toda esta autoridad fascista y prepotente que es el Ayuntamiento de Cádiz”, vociferó.
El Ayuntamiento contesta
El Ayuntamiento de Cádiz justificó la decisión de los ediles del PP con este razonamiento: “Hasta el día de hoy, y si ninguna ley dice lo contrario, los representantes democráticos de los gaditanos son las 27 personas que ocupan los escaños del Pleno, no quienes se arrogan esa representación sin someterse a ningún proceso de elección entre esos gaditanos. Y a esos gaditanos son a los que les da la espalda quien se dirige de esa forma al Pleno, algo por lo que el Grupo Municipal Popular, que es quien mayor respaldo obtuvo de los ciudadanos para que los representara en este seno, no va a admitir más”.
Jiménez, activista con una larga trayectoria en la provincia, cumplió el mes pasado una condena de 15 días de localización permanente a raíz de una denuncia policial formulada por poner carteles en la calle contrarios a la gestión del Ayuntamiento de Cádiz y de la Junta de Andalucía. Entonces, justificó su decisión de dar la espalda a los políticos en el pleno reseñando que “a la intervención de los ciudadanos no se le da importancia, nadie les escucha, se menosprecia a las personas”. “No entiendo por qué no se escucha a las personas, después de siete horas que dura un Pleno municipal en las que la mayoría de las cosas de las que se hablan no tienen nada que ver con los intereses de los ciudadanos”, defendió en una entrevista publicada por este medio.