El coronavirus ha tomado al Ayuntamiento de Granada para revolverlo aún más. El positivo del alcalde, Luis Salvador (Ciudadanos), ha provocado una cascada de reacciones que le sitúan a él en el centro de la diana. La oposición sospecha que siguió trabajando pese a que alguno de sus colaboradores ya había dado positivo en Covid-19, y que por lo tanto él podía estar contagiado. En el seno de su equipo de Gobierno opinan de manera similar de puertas para adentro. Tanto es así, que se va a llevar a cabo una investigación al respecto.
Desde el primer momento en el que Luis Salvador anunció que había dado positivo por coronavirus, Vox, que le aupó a la Alcaldía al darle sus tres votos a la coalición que forman Ciudadanos y Partido Popular, solicitó una comisión de investigación. Su portavoz, Onofre Miralles, no ha ocultado en ningún momento que cree que la actitud del alcalde no fue la correcta porque tenía indicios de que debía confinarse. El pasado lunes 28 de septiembre, cuando Luis Salvador hizo público que había dado positivo, Miralles ya fue tajante al respecto.
En su cuenta de Twitter afirmó que le parecía “muy grave que tu colaborador lo sabía este fin de semana y no os habéis confinado de inmediato”. A lo que añadió que “sé que tu colaborador lo sabía porque yo también lo sé”. Por eso, desde su formación solicitaron un pleno extraordinario que abordase la cuestión para saber si la actitud de Salvador fue negligente.
Podemos-IU entra en escena
Después de que Vox pusiera encima de la mesa una investigación para esclarecer si Luis Salvador obró mal por no guardar una cuarentena preventiva, la coalición de Podemos-IU entró en escena para recordar que llevan meses solicitando que se lleven a cabo medidas para el control de la pandemia en el Ayuntamiento de Granada. El portavoz de la formación de izquierdas, Antonio Cambril, recordó que el Ayuntamiento estuvo repleto solo cuatro días antes de conocerse el positivo del alcalde para la celebración del pleno ordinario de septiembre.
Por ese motivo y tras recoger la propuesta de Vox, Podemos-IU ha pedido que se celebre una junta de portavoces en la que se puedan resolver las dudas que hay sobre el positivo de Luis Salvador y la posible imprudencia que pudo llevar a cabo el primer edil. El objetivo que persigue la coalición es que se den cita el menor número posible de personas para evitar más contagios, pero que se pueda investigar cuanto antes. Porque, según explica Cambril a este diario, “hay muchos contagios en el Ayuntamiento y se tienen que tomar medidas para evitar que se sigan produciendo más casos”.
Malestar con el alcalde
Más allá de la discusión sobre la fórmula en la que se va a investigar al alcalde, lo que ha puesto de manifiesto este asunto es que hay malestar con el regidor municipal. En los pasillos del Ayuntamiento se sostiene que Luis Salvador debía haberse confinado antes y no participar en ningún acto porque tres de sus colaboradores ya se habían puesto en cuarentena el mismo lunes en el que se confirmó su positivo. Algo que ha enfadado a los concejales que forman el equipo de Gobierno, según ha podido saber eldiario.es Andalucía.
Sus propios compañeros de mandato dudan de la actitud del alcalde y creen que fue negligente al poner en peligro a trabajadores municipales y a ellos mismos en las reuniones que tuvo durante ese lunes y en los actos del fin de semana en los que participó. Según explican fuentes consistoriales a este medio, Luis Salvador habría acudido a un cumpleaños el viernes anterior en el que estaba su equipo de colaboradores y entre los que se sospechaba que había al menos un caso positivo por Covid-19 que acabó confirmándose al lunes siguiente.
Un argumento que también ha hecho suyo el PSOE. Una de sus concejales, Raquel Ruz, sostiene que “ya tenían sospechas de que un colaborador, muy posiblemente, era ya positivo”. La socialista afea que el alcalde mantuviera toda su agenda y que se celebrase el pleno con normalidad. “Mantuvo actos en los que estuvo dando abrazos a diestro y siniestro que se le acercaba”, denuncia Ruz.
“Todo es un montaje”
Luis Salvador niega cualquier acusación de negligencia por su parte. Aunque es cierto que durante el fin de semana previo a su positivo participó en varios actos y que el mismo lunes, antes de tener el resultado de la PCR que se hizo, también acudió a lo que tenía marcado en la agenda municipal, el regidor sostiene que no hizo nada reprobable. En declaraciones a este medio argumenta que “el primer positivo lo damos mi colaborador y yo el lunes a las 21.30 horas”.
“Los dos fuimos sin síntomas visuales. Yo no he tenido ninguno ni siquiera ahora, y mi colaborador notó esa mañana que estaba perdiendo el olfato y el gusto. Esa fue la pista para decir que se hiciera la PCR. Y al hacérsela él, como colabora conmigo, dije de hacérmela yo”, explica Luis Salvador que indica que la PCR se la hicieron a la una y media de la tarde de ese lunes. No obstante, según el alcalde, “el último día que le había visto antes (a su colaborador) fue el sábado por la mañana que me asistió en dos actos”.
Por eso, Salvador cree que todo lo que está sucediendo al respecto de su positivo atiende a motivos políticos y no tanto al miedo por las posibles negligencias que pudo cometer al mantener su agenda. “Todo lo que están orquestando es un montaje y lo saben. Pero en vez de rectificar, lo que hacen es acelerar más y contar mil cosas distintas por enredar”, sentencia el alcalde de Granada.